capítulo 22

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Narra Brooklyn:
Escuché todo, todo lo que me dijeron, vino mi madre, la había extrañado tanto, yo sé que me abandono y engañó a mi papá por otro tipo, pero yo la amo, siempre la ame, y por más que allá cometido un error, cada persona elige hacer de su vida lo que quiere, y yo la amo.
También escuché todo lo que dijo Cristian, el decía que si me tenía que ir que lo haga, pero yo no quería ese destino para mí.
Y otra vez todo se oscureció, no volvería a caer en ese pozo, luche, luche tanto pero de nada servía, aunque no abandone y lo seguí intentando, puse todas mis fuerzas hasta que todo se puso en blanco.
Lo primero que vi fue luz, mis ojos se abrieron lentamente y pude ver luz.
Gire lentamente mi cabeza, ya que me dolía, y lo vi a el, sentado junto a mí con su mirada hacia el piso.
Moví mi mano como pude y la coloqué es su pierna.
Levantó su vista exaltado.

Cristian: Brooklyn!
(Yo sonreí como pude y el me abrazo)

Médico: señor Pavón necesito que se retiré, tengo que observar a la señorita (dijo entrando a la habitación)

Cristian: no, no me voy a ir (dijo con algunas lágrimas en sus ojos)

Médico: por favor, van a ser unos minutos después puede volver

Cristian se fue y a mi me revisaron, me hicieron varias preguntas y después entro mi padre con una sonrisa de oreja a oreja.
Después de estar hablando con toda mi familia, entraron los chicos del plantel, tenía a casi todo el plantel de boca adentro de la habitación, de pedo no los sacaron a patadas.
Estuvimos hablando un rato.

Pipa: Brook estás muy flaca, prometenos que vas a comer mucho a partir de ahora.

Brooklyn: se los prometo

Magallan: el susto que nos hiciste pegar pendeja! (Reímos)

Estuvimos hablando un rato más hasta que se despidieron todos, me enteré que en este tiempo que yo estuve con Agustín, el estaba con otra, eso quiere decir que mis cuernos chocaban contra el marco de la puerta, soy una estúpida.
A Agustín no le volví a hablar jamás y Cristian es el único en este momento que me está apoyando.

Pasó una semana:
Narra Brooklyn:
Estaba en mi departamento con Cristian.

Cristian: Fila come.

Brooklyn: no quiero milanesas

Cristian: come y no me hagas enojar.

Brooklyn: no quiero, esto engorda.

Cristian: con más razón, si querés salir del primer grado de anorexia que tenés comer.

Brooklyn: y si no quiero que vas a hacer?

Cristian: te llevo al hospital y que te internen

Brooklyn: está bien como.

Después de comer me di cuenta que me había pasado un poco de la raya.

Cristian: bien que no querías comer y te clavaste cinco milanesas, de las cuales comi una.

Brooklyn: ups, perdón, pero lo mio es por una buen causa (sonreí)

Cristian: y mira te digo la verdad? Por mi déjame sin comida mientras que te recuperes está todo bien

Brooklyn: alguien dijo chamuyo? Porque lo estoy empezando a oler... (Reímos)
Gracias Cris, por todo, sos el único que me apoya con mis papás y algunos del club, mientras que el idiota de Agustín está con otra.

Cristian: no tenés que agradecer nada boba, yo te tengo que agradecer tantas cosas, y los perdones que te dije son nada al lado de lo que yo te hice sufrir, todo esto que estás pasando es por mi culpa.

Brooklyn: que? No... A ver a causa de estas cosas que me estuvieron pasando fui yo la que no se supo cuidar, así que fue culpa mía no tuya ni de Agustín.

Cristian: pero esas causas las provoque yo, si no lo hubiera hecho esto no hubiera pasado

Brooklyn: no importa, ya pasó, y por algo las cosas pasan (sonrió y el a mi)
Me das una abrazo?

Cristian: uno solo?

Brooklyn: los que vos quieras... (Sonreímos y me abrazo)

El juego (Cristian Pavón)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora