"Cuando nadie ve"

La verdad que hace sufrir y amar (2)

Seguía muy molesta y todo lo que pasaba me ponía muy triste, pero por una parte siento que no estuvo nada bien que me ocultaran las cosas.

Daniel es un buen chico, pero no quería encariñarme del todo, pues el año siguiente el tendría que ir a la preparatoria, y eso me hizo pensar en la canción que había escuchado ayer, y en el consejo que la anciana me había dado.

Simplemente, tenía muchas dudas y extrañaba mucho a Ángel, necesitaba verlo y abrazarlo, pero ni loca lo iba a hacer, el orgullo me ganaba.

Después de lo que paso con Daniel, me sentía extraña, pero creo que aveces las cosas pasan por algo, y esta vez creía que era algo increíble.

Me envió un texto que decía:

-Que linda te veías hoy.

Yo le sonreí al celular y le contesté:

-Gracias...

Tal vez sería la persona correcta, y algo me decía que tenía que estar con el.

Tenía examen oral de química, y de verdad, yo sólo quería que ya fuera la hora de almuerzo para verlo; realmente no quería distraerme conforme a mis estudios por Daniel y por eso no le di mucha importancia.

-Señorita Andrea, es su turno.

Esta bien. -Le respondí.

Me hizo unas cuantas preguntas, y cuando yo las contestaba el anotaba algo en su cuaderno de calificaciones, para ser sincera todo estaba muy fácil.

Cuando termine, Ángel se me acercó y me dijo:

-¿Podemos hablar?

-¿Hablar? ¿Sobre? Yo no tengo nada que hablar contigo -Le dije.

-Andy, claro que tenemos que hablar, por favor, te explicaré las cosas.

-Esta bien, pero hasta la hora del almuerzo.

Tal vez el creía que estando con el las cosas eran más sencillas, y tenía razón, el era mi mejor amigo desde que eramos pequeños, siempre estamos juntos, pero nunca habíamos discutido tan fuerte como la otra vez, anhelaba que todo fuera como antes.

El profesor nos dijo que mañana estarían los resultados de los exámenes en dirección.

Realmente, no soy una mala estudiante, tengo muy buenas notas y esta vez estaba nerviosa por saber mi calificación en química.

Cheque mi horario, y mañana tendría examen de Lenguas extranjeras y Geometría, por lo tanto, guarde mis libros en mi mochila y me dirigí a la cafetería, fui al sanitario y me encontré con Alexa, ella me dijo:

-Hola

-Hola Alexa -Le conteste mientras salía del sanitario.

Ella me grito algo, pero no escuche muy bien, así que sólo me di la vuelta y me fui.

Iba caminando muy normal, cuando entonces alguien tapo mis ojos con sus manos y preguntó:

-¿Quién soy?

Me imaginé que era Ángel, el quería que lo perdonará por lo tanto creo que lo hizo.

-No lo se, ¿Ángel?

El quito sus manos y me dijo:

-¿Ángel? ¿Quién es Ángel?

Cuando lo miré, me di cuenta de que era Daniel, en ese momento estaba sin palabras y lo único que dije fue quien era Ángel.

-Es mi mejor amigo, supongo.

-¿Tu mejor amigo? Pensé que no tenías -Me respondió.

-Es una larga historia, pero no quiero hablar de eso.

-Muy bien, ¿De qué te gustaría conversar entonces?

-No lo se, platicame de ti....

-¿De mi? Bueno, tu lo has dicho, soy un chico bueno en la conquista...

-Daniel, ¿hablas enserio?

El se empezó a reír y me abrazo.
Es muy tierno y lindo pero no lo se algo no me tenía muy conforme.

Ángel se acercó a ambos y me dijo:

-Vaya, como ya no hablas con tus amigos, prefieres conseguirte un novio y olvidarte de nosotros.

-Espera, ¿tienes idea de lo qué acabas de decir? -Le respondí muy enojada.

-No, no tengo idea.

-Pues bien, eres un egoísta, pensé que era tiempo de hablar, pero después de lo que paso has cambiado mucho. -Le conteste y me fui.

Daniel empezó a gritarme:

-¡No!, Andrea, ¡espera!.

Estaba muy enojada, ellos no quieren verme feliz y eso duele, por que se supone que un amigo se alegra de que estés feliz, al menos así lo pensaba.