Mi Amado Pirata (Minjoong)

"Actos prohibidos con el pirata..."

Aprovechando la ruta marítima que habían usado para atacar el buque, los piratas fueron a parar a Port Royal.
Entraron a la primera taberna que vieron, siendo así una tripulación de 200 hombres que se dieron rienda suelta con las prostitutas y el alcohol.

—Tu no beberás?— Mingi se puso a un lado de Joong

—Claro, si me acompañas comodoro — dijo extendiéndole un vaso

—Quiero vino —

—Que eres una damicela en peligro?— preguntó dándole rum. Mingi lo bebió de un sólo trago como Joong lo hizo arrugando su rostro

—No me esperaba ese sabor — dijo bebiendo nuevamente

—Se va a acostumbrar joven comodoro — dijo Joong volviendo a beber.
Luego de unos buenos tragos, y dejarle una bolsa de doblones de oro al cantinero por lo que seguramente sus hombres iban a hacer.
Ambos estaban volviendo al barco, Mingi dijo no sentirse bien ya que aun no se acostumbraba a los mareos provocados por el rum.

—HongJoong— dijo el pelirrojo que se tambaleaba con Mingi— Mi nombre es HongJoong

—Me gusta como suena, es lindo — dijo Mingi riéndose. Tomó nuevamente más rum mientras ambos caminaban al barco. Este apenas se mecía de lado a lado con el mar tan calmado. La brisa calida marina les abrazaba a cada marinero que iba por el océano.
Las estrellas ya estaban en lo alto guiando a todo aquel que se dejara llevar por ellas mientras navegara.
MinGi dejó caer a HongJoong primero y luego él en la cama, ambos se quedaron mirando un momento.
MinGi fue el primero en tocar, apoyó una de sus grandes manos en el rostro de HongJoong pasando su pulgar por la boca del chico, la cual presiono haciéndolas a un lado, sin poder resistirse más se lanzó como si de oro se tratara a besar a Joong.
Una vez que estuvo cerca de él la desesperación les había invadido, Mingi se deparó en lo que estaba a punto de hacer y se freno, estaba ebrio pero no tanto como para saber que se estaba por encamar con el hombre que le arrebató su familia y al que asesinaría...
El pecho de Joong bajando y subiendo por la reciente excitación le llamó la atención, le hizo olvidar todo y volver a besar sus labios con premura.
MinGi se entregó a sus bajos deseos, donde su lado animal salía a flote, el odio que había acumulado le estaba haciendo actuar de forma salvaje y Joong tampoco se quedaba atras en la lucha que se formó entre ambos cuerpos, apurado y enojado, apreto el labio inferior de HongJoong entre sus dientes, tanto que parte de él sangro. Sus fuertes y pesadas manos abrieron su hebilla, rompió su ropa y lo dejó desnudo apurándose por querer sentir esa suave piel.
Cuando acarició ese cuerpo, su miembro empujando por salir le hizo dar un chirrido de dolor, estaba cada vez más erecto y mantenerlo apresado en sus pantalones le estaba haciendo doler

—Dejame ayudarte — dijo HongJoong quitando los pantalones de Mingi, para tocar ese grueso miembro que se exponía erguido como el mástil de la nave donde estaban. El pene de Mingi era hermoso a los ojos de HongJoong, era grande, viril, fuerte, daban ganas de tocarlo. Viendo sus intensiones Mingi tomó las manos de Joong e hizo que lo tocaran

—Has estado con un nombre antes?— HongJoong preguntó mientras su mano bajaba y subía

—No, serás el primero ¿y tu?

—No he probado los placeres ni siquiera de una mujer — contestó Joong. Mingi le sonrió, al parecer el pirata escondía mucho debajo de su crueldad.
No tardó más en volver a besarlo, estaba hambriento del chico y por Dios que se tomaría todas las atribuciones que pudiera. Su boca recorrió la otra, haciendo que su lengua devorara la otra, chocandola como si de una violenta batalla se librara en el mismo mar en donde estaban. Mingi abrió las piernas de Joong y se posiciono entre ellas, de un sólo movimiento entro en él, robándole así un poderoso gemido.
Joong lloró un segundo pero se distrajo por las atenciones que Mingi propinaba en su cuello y pecho, dejando un camino que era testigo de lo que estaban haciendo.
Las caderas de MinGi entraban y salían abusando del culo apretado del contrario, se atrevía a decir que nunca había sentido tal placer antes, quizás porque nunca había podido ser tan bruto. Adoraba el sonido de la cama rechinando con sus movimientos mientras la cabecera chocaba contra la pared.
El pelinegro tomó el parche que cubría el ojo de Joong dejando su hermosa vista al aire, sus ojos eran más luminosos que el cielo por lo que entendía y le quedaba más claro el porque nadie se resistía a Joong.
Cuando estaba por alcanzar el orgasmo se quedó quieto, le permitió al pirata llegar primero porque el, aun tenia ganas de seguir.

Salió del chico, pegó su cuerpo al colchón y no pudo evitar volver a entrar, lo sostuvo de su cadera y nuevamente su furia fue liberada contra el redondo trasero que atrapaba su verga, cada vez era más brutal y Joong pidiendo más, se movía contra el chico dañándole el pudor que le quedaba al pirata. Joong no pudo evitar alcanzar el orgasmo nuevamente estallando en esa cama y con el joven tras él estallando en su interior no pudo evitar caer rendido por el cansancio. Dios un último respiro, para dejarse llevar por el sueño y por la ebriedad, cosa que luego de abrazarlo, Mingi repitió la acción del pirata dejándose llevar por el cansancio.

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Bueno, el lemon, ojalá que les haya gustado