Introducción "el arte sin admirar"

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Y el destino no me quiso artista,
Mas sí, un simple escritor,
Un hombre sin talento,
que se enamoró.

Cualquier pintor tu rostro pudo retratar,

Y un escultor, tu figura tallar.
Pero el escritor solo te pudo amar.

Y el destino no me quiso artista,
Para mala suerte tuya,
Ningún pintor te logró colorear,
Ningún escultor tu silueta tallar,
Cualquier obra contigo como musa,
En un museo debería estar.

Y el destino no me quiso inteligente,
Para mala suerte tuya,
Los lunares de tu piel,
Con ninguna constelación se pudieron comparar,
Y la simetría de tu rostro,
No pude calcular.
Cualquier comparación entre la perfección y tú,
Un premio debería ganar.

Y el destino me quiso a mi,
Para mala y buena suerte tuya,
Ningún artista te podrá presumir,
Ningún genio te podrá admirar,
Pero ninguno de ellos como yo te va a amar.

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