Capítulo 5

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Maratón 1/3

Narra Fabio

Menudo primer intenso día. Esto de volver a estudiar no es mi fuerte pero es lo que hay aunque maldigo el día en que se les ocurrió la "maravillosa idea " de cambiar las normas. Todos aquellos pilotos que no tengan ningún estudio post-obligatorio tendrá que hacerlo. Resumiendo todos aquellos que solo tengan la ESO deberán escoger una rama y ponerme manos a la obra. Supuestamente con que tengamos el bachiller ya nos vale así que fuimos por la vía fácil, sacamos bachiller y fuera.

Con lo que ninguno contábamos es que no fuéramos a vivir solos. En la casa había una chica que resulta que sería nuestra compañera de clase. Casualidades de la vida.

Hoy teníamos la presentación y por la tarde llegaba mi hermana, tengo muchas ganas de verla. Hacía mucho que no podíamos estar casi todo el día juntos, sí a veces viene a los circuitos y yo en vacaciones voy a verles pero no es lo mismo.

Nos despertaron de muy mala gana, eso no se hace.

Desayunamos rápido y fuimos corriendo hacia el insti pues no apetecía llegar tarde, claro que al inteligente que tengo como amigo no se le ocurrió mejor idea que desayunarse las galletas de _____. Solo son unas galletas sí pero teniendo en cuenta que de primera mano dijo que solo iba a desayunar una tostada que no tenía hambre, pues...

La presentación para mí normal, menos mal que nos chilparon fuera pronto me estaba aburriendo. Propusieron ir a tomar algo por lo que todos aceptamos.

Rins: te estás quedando atrás

Fabio: ¿No vamos a esperar por la compañera de piso?

Augusto: es verdad

Álex M: ¿Qué compañera?

Marc: este es tonto

Xavi: la chica que Rins confundió con la de la limpieza

Álex M: ¡Ah! Vale, Vale; ya caigo

Marc: lo dicho es el tonto de la familia

Álex M: querrás decir el guapo

Jaume: el único guapo que hay aquí soy yo

Dovi: ya lo has dicho tú

Jaume: soy rubio y tengo los ojos azules, juego con ventaja

Augusto: también eres bajito

Jaume: ja-ja

Rins: ya, parad. Y Jaume guapo no eres, eso es lo que te han hecho creer tus padres

Jaume: gracias amigo

Rins: por nada, ahora enserio, vamos

Fabio: flipo

Tom: estás pesadito

Fabio-echándole la lengua-: tengo un gran maestro

Rins: vamos a coger sitio

Albert: verás

Fabio: ya me quedo yo

Álex M: ¿Para qué?

Albert: yo no os conozco

Xavi: estoy contigo-se fueron dejándome solo.

Como tardaba fui a ver si le había pasado algo o si necesita ayuda. En cuanto entré vi que estaba hablando con una compañera. Se despidió de ella y fuimos hasta dónde se encontraban los demás.

Hablando con ella descubrí que es una chica muy maja. La mañana en sí pasó rápido tanto que ahora nos encontrábamos comiendo.

Augusto: tío, si sigues comiendo así de rápido te vas a atragantar

Tom: es que tiene prisa

Fabio: tengo el tiempo justo

Dovi: ¿A dónde vas?

Fabio: tengo que ir a un sitio

Dovi: eso no contesta mi pregunta

Fabio: después os lo cuento

_____: ¿Es un secreto?

Fabio: algo así

Terminamos de comer y cada uno se dispersó. Entre tanto aproveché para ir a buscar a mi hermana.

Tom: ¿Te vas?

Fabio: sí

Tom: sé bueno, no te metas en líos y si me llaman de la policía para decirme que te han detenido seré bueno y te dejaré que pases la noche en comisaría

Fabio: vale mi amor, recuérdame que cuando vuelva al mundial te baje el sueldo

Tom: hecho, no lo haré

Fabio: ¿vienes?

Tom: me puede la vagancia- literalmente estaba todo acostado en el sofá con los pies encima de la mesa

Fabio: vago qué pasas de vago, venga vente

Tom: bue-no, ven-ga, va-le

Se cambió y marchamos al aeropuerto. Tenía muchas ganas de ver a mi pequeña. En coche no eran más de 20 minutos que me parecieron horas. Al fin dimos llegado.

Tom: me estás poniendo nervioso a mí también

Fabio: lo siento, es que estoy muy nervioso

Tom: si me dijeras que es por una cita o que está por llegar tu futura mujer vale, comprensible pero es tu hermana

Fabio: lo sé, pero es que tengo unas ganas de tenerla aquí, enormes

Tom: tranquilo

Fabio: eso intento

Vimos a una chica acercarse a nosotros, estaba un poco desorientada más que desorientada parecía un poco perdida. Creo que era mi hermana pero no estaba seguro dado que estaba de espaldas. La chica en cuanto se dio la vuelta sin comerlo ni beberlo se dio contra la pared. Rápidamente se levantó y fingió que aquí no pasaba nada. Vale, sí que era mi hermana. Eso sí que es llegar por todo lo alto.

Nos acercamos para saludar y comprobar que estaba bien aunque eso sí, el ataque de risa no nos lo quito nadie.

Le aparecí por detrás tapándole los ojos.

Fabio: ¿Sabes quién soy?

XXX: eres tú

Fabio: soy yo

Tom: él que no para de llamarte porque no he podido olvidarte

Fabio: pero, ¿qué dices?

Tom: ¿No estábamos jugando?

Fabio: no

XXX: no

Tom: era visto

Fabio: deja de hacer el lelo

Tom: vale cariño mío

XXX: hermaniitoo-tirándose a mis brazos

Fabio: hola Paula, ¿qué tal el viaje?

Paula: cansado y largo

Fabio: ahora vamos para casa y descansas

Tom: eso de descansar se puede discutir

Fabio: Toom

Tom: es verdad, somos ciento y la madre

Paula: ¿Qué me he perdido?

Fabio: quizás y solo quizás se me paso decirte que no vivíamos solos sino con más pilotos

Paula: ¿Cuántos más?

Fabio: pues... sin contar conmigo y con Tom ocho

Paula: ¿Cuááántos?

Fabio: en total 10 pero tranquila que no eres la única chica hay otra

Paula: menos mal

Fabio: vamos y te los presento

Paula: verás lo que saldrá ahí

CaminosWhere stories live. Discover now