Caminos

Capítulo 21

Maratón 3/3

Narra _____

Menudo viaje me han pegado estos. No se quedan tranquilos ni por apuesta, está comprobado.

Tom: apuesto 100 € a que lo que queda de viaje no os podéis callar

Fabio: sube la a puesta a 500 € y podrás comprobarlo tú mismo

Tom: prefiero 100

Augusto: por 100 € no me vendo

Álex R: por 250 € se lo piensa

Xavi: y por 350 € lo hace cabreado

Jaume: ni dormir dejáis

Álex M: llevas durmiendo desde que salimos de casa

Jaume: tenía mucho sueño

Marc: ¿Cuándo no tienes sueño?

Jaume: pues...

_____: ¿Cada vez que os vais de viaje hacéis esto?

Fabio: para nada, yo soy un niño normal y corriente

Tom: ¡Qué engañado estás!

Dovi: no corras tanto, Augusto

Augusto: tampoco estoy corriendo mucho

Dovi: estás en un tramo de 120 y vas a casi 150 por hora

Albert: cuando lo paren ya te reirás

_____: ¿Solo él?

Xavi: me da que todos

Augusto: no seáis gafes

Álex R: ¡Va! ¿Hacemos un apuesta?

Augusto: ni se os ocurra

_____: ¿De cuánto estamos hablando?

Augusto: ¿Tú también?

_____: ¿Qué pasa? Así se hace más ameno el camino

Jaume: jajaja; pues es verdad

Xavi: yo tengo 150 €

Marc: yo 10

Álex M: lo raro sería que llevarás más. Yo 50

Jaume: yo 30

Fabio: 55

Tom: 60

_____: 20

Álex R: 100

Dovi: 70

Albert: ¿Cuánto hay en total?

Fabio: 545 € en juego

Albert: lo subo a 560 €

Augusto: ni-se-os-o-cu-rra

De la nada oímos unas sirenas. Miré por la ventanilla y vi que eran la pasma.

_____: son los pitufos

Guardia: ¿Ha dicho algo señorita?

_____: que he perdido el peluche de los pitufos

Guardia: espero que lo encuentre

_____: yo también

Los chicos a excepción de Augusto que estaba pagando la multa que le ha caído se estaban aguantando la risa.

Una vez que se fueron los pitufos, nos empezamos a reír como si no hubiera un mañana. Claro que Augusto no le vio la gracia.

Augusto: ya que os gusta reíros de los demás el dinero de la apuesta me lo dais a mí

Tom: no tenemos la culpa de que le pisaras a fondo

Jaume: es que sí...

_____: ¿Falta mucho para llegar?

Albert: estamos casi llegando

Entre todos avisamos a las demás para decir que estamos cerca. Y menos mal.

En cuanto me quise dar cuenta estábamos aparcando. Cogimos nuestras cosas y nos fuimos para arriba. Era un tercero, tuvimos suerte de que el ascensor funcionara dado que resulta que hace unos meses se estropeó. Para alivio de los chicos todo estuvo en orden.

Una vez llegamos arriba las chicas teníamos un piso y los chicos otros. Los pisos estaban uno al lado del otro. Junto con los chicos quedamos de vernos en media hora abajo, delante de la puerta del edificio.

El apartamento es muy amplio, tiene cinco habitaciones por lo que hay que compartir cuarto. Hay 4 cuartos de baño. La cocina es pequeña, sin embargo el salón comedor es muy grande.

En una habitación están Marta y Paula, en la otra Rosa y Davi. La que se encuentra al lado de la terraza están Itziar e Isi. Por otro lado, el cuarto que tiene literas estamos Lore, Montse y yo.

Nos cambiamos lo más rápido que pudimos y bajamos a junto los demás.

Augusto: hasta que por fin aparecéis

_____: escogimos las habitaciones y tuvimos que cambiarnos

Álex R: el pobre tiene prisa, no le ha llegado con que lo pararan

Augusto: te quieres callar

_____: no os quejéis tanto, vais sobrados

Jaume: ¿A qué te refieres?

_____: literalmente vais con el bañador puesto,la tolla encima del hombro, las chanclas y las gafas de sol

Albert: ¿Para qué queremos más?

Lore: bueno Jaume a mayores lleva la pelota

_____: y Álex Márquez el cubo y la pala, ¿espera qué?

Marc: te dije que lo dejaras en casa

Álex M: es que si no me aburro

Augusto: pues haces como todo el mundo, miras para las chicas disimuladamente y ya

Fabio: desde luego que yo no os conozco absolutamente de nada

____: me da que no eres el único

Tom: claro que no

Fuimos hasta la playa que estaba a menos de cinco minutos andando, pues solo teníamos que cruzar y bajar las escaleras.

Colocamos las toallas y cada uno andaba a su bola. En mi caso junto a Montse, Lore, Itziar, Davi y Rosa nos fuimos para el agua. Isi, Paula y Marta prefirieron quedarse a tomar el sol. Los chicos jugaban al fútbol a excepción de Álex Rins y Albert que vinieron con nosotras.

Esto solo era el principio de un fin de semana en la playa.

Hasta aquí el maratón, espero que os guste.