El zorro de los ojos azules

Capitulo 10

Tres Genin mayores se lanzaron a través de los árboles en busca del equipo que su rastreador había detectado. Naruto observó sus movimientos desde un lugar bien escondido bajo las raíces de un árbol gigante. Su atuendo los delato, shinobis de Kumo. Al otro lado de él, Tayuya estaba viendo al trío como un halcón mirando un ratón. Saiga estaba escondido directamente debajo de ellos, cubierto por un sudario hecho para parecerse al suelo y las hojas caídas que lo rodeaban.

Uno de ellos saltó no menos de un metro del joven Uchiha, quien trató de mantener su respiración lo más baja posible. Los shinobi de Kumogakure eran peligrosamente fuertes con respecto a los Jutsus Raiton, lo que lo puso en igualdad de condiciones con ellos si podía disparar a uno, pero si las cosas iban bien, no habría una pelea. Echó un vistazo a la kunoichi peliroja en los árboles con su flauta en los labios, lista para lanzar su Genjutsu.

Naruto se mantuvo quieto mientras los otros dos shinobis intentaban unirse a su compañero. Los tres eran grandes en estatura, probablemente veteranos de los exámenes anteriores. Serían problemas si pelearan. Tayuya estaba pensando lo mismo que ella los miraba. Ella no era de tipo sensorial, pero podía decir que estos tres estaban muy por encima de ella y Saiga en Chakra. Sabía que Naruto los había vencido a todos por una diferencia abismal.

Saiga se estaba poniendo más nervioso por el segundo. ¡El antiguo ninja de Kumo se estaba acercando a su escondite!.

Tayuya captó un movimiento de Naruto, asintiendo con la cabeza hacia ella. Tayuya sonrió, y comenzó a jugar.

En el momento en que Saiga escuchó que la melodía comenzaba a sonar, supo que tenía que taparse los oídos con fuerza, y cerró los ojos, esperando que no fuera atrapado en el Genjutsu. Pero no tuvo tanta suerte. Su vista ennegrecida fue repentinamente asaltada con su color menos favorito; rojo.

Naruto inmediatamente supo que había algo mal cuando Saiga no se movió cuando el ninja Kumo cayó. Miró a Tayuya, estando fuera del alcance de los Genjutsu. "¿Ya terminaron?".

Tayuya dejó de jugar, sonriendo ampliamente, "¡Estan listos!"

Naruto no perdió el tiempo y se lanzó hacia su compañero de equipo. Saiga no se movía en absoluto cuando Naruto lo descubrió. "Maldita sea, fue atrapado!" Naruto juró, "Tayuya-chan baja aquí. ¡Saiga fue atrapado en el Jutsu!"

"¡Mierda!" Tayuya gritó, y se echó abajo. "¡Eso fue un miedo induciendo a Jutsu! ¡Despiértalo!"

"¡Cierto!" Dijo Naruto, recordando una sesión de entrenamiento con Jiraiya, y comenzó a canalizar a Chakra en su amigo. "Vamos, Saiga, despierta. ¡No tenemos mucho tiempo!".

"Voy a revisar a estos cabrones para ver el pergamino", dijo Tayuya, apresurándose hacia las figuras propensas, "¿Sabes que esto sería más fácil si me dejas matarlos?".

"No a menos que sea necesario", se rió Naruto cuando Saiga comenzó a despestar: "¡Ah, ahí está!"

"Ugh," gimió el chico, agarrando su cabeza, "¿Qué demonios me golpeó?"

"Tayuya-chan," sonrió Naruto, señalando con el pulgar a la pelirroja, que le gruñó, "Supongo que el Genjutsu era demasiado tenso ya que estabas justo en medio de la refriega. Lo siento".

"Está bien", dijo Saiga con aspecto pálido, "yo mismo elegí el escondite. ¿Tienen el rollo de la Tierra?".

"Joder no!" Tayuya dijo bruscamente, "¡Es un jodido rollo del cielo como el nuestro!"

Naruto suspiró, "Entonces será mejor que hagamos un seguimiento antes de que se despierten". Puso el brazo de Uchiha sobre su hombro y lo ayudó a ponerse de pie. "¿Crees puedas seguir?