Ahora me perteneces

2

Mi cabeza palpitaba como un tambor, la parte posterior de mi cabeza dolía como el infierno.

Abro los ojos para ver dónde estaba, estaba en la habitación de un dormitorio en un barco, el barco de Drago.

El océano meció suavemente el barco en un lento pero tranquilo movimiento de balanceo, comencé a mirar a mi alrededor, preguntándome si aquí hay algo útil.

La habitación de la cama era muy agradable para ti. Sabes que un tipo malo se esconde, una alfombra de oso, una pequeña chimenea en el medio con una silla de terciopelo rojo que parecía estar hecha de pieles de animales, huesos de dragón y dientes. unas cuantas velas encendidas y una cama grande tamaño king en la que estaba acostado y que podía acomodar a cinco personas. Hacía calor en esta gran habitación oscura, entonces comencé a mirar mi cuerpo.

Estaba envuelta en mantas de piel hasta la barbilla, pero eso no era lo extraño, lo más extraño era encontrarme completamente desnudo bajo las gruesas pieles, salté un poco por la falta de ropa, Lo único que tenía que cubrir mi cuerpo pálido eran las mantas. Toda mi armadura estaba tendida en el suelo junto a una silla de madera con una cierta capa que lo cubría.

Esa capa era dragos.

"Es bueno ver que finalmente estás despierto". Una voz oscura dijo en las oscuras sombras de la habitación grande.

Lentamente me senté para ver al dueño de esa voz y no para mi sorpresa fue Drago, genial, estoy jodido.

"¿Que duermas bien?" Preguntó mientras caminaba hacia mí y se sentó en el borde de la cama mirándome con ojos hambrientos, sus dedos recorriendo lentamente mis piernas, haciéndome saltar hacia atrás.

"¿Qué me vas a hacer?" Pregunté con miedo en mi voz.

Dejó escapar una risita oscura cuando comenzó a quitarse la camisa y la tiró al suelo, oh no, oh dioses, no, ¡esto no está sucediendo! ¡Todo esto es solo una pesadilla muy mala y estoy a punto de despertarme, ahora mismo! Esto no puede estar sucediendo, ¡no hay manera de que este hombre realmente se salga con la suya conmigo!

"Relájate maestro dragón". dijo sombríamente, trazando sus dedos por mi pierna y tirándome hacia abajo. "Esto no dolerá por mucho tiempo".

Traté de levantarme y tomarme un respiro, pero era demasiado tarde, me agarró por el cuello y enterró su nariz en mi cabello y lo olió, me encogí de miedo cuando estaba agarrando mi trasero y frotando mis caderas con un movimiento constante , luego su otra mano ahuecó mi pequeña virilidad, haciéndome retorcerme. Pensé que me iba a desmayar ya que sentí todo el calor subiendo por mi cara.

"Oh dioses por favor no me hagas daño". Gemí mientras pedía misericordia. "Por favor no hagas esto".

Agarró mi cara aplastando mis mejillas y me besó, forzó su lengua en mi boca y literalmente me lamió toda la boca. Podía probar el alcohol en su boca, sabía a cerveza con mezcla de leche de yaks.

"No te haré daño", dijo con una sonrisa malvada, "no demasiado". Miró a la mitad inferior de mí con sus ojos fríos dirigiéndose hacia mi parte trasera. Luego me atrajo para un beso, amortigué y traté de alejarme de él, pero él se defendió y me dijo que dejara de retorcerme. Sentí que su mano pasaba los dedos por mi cabello, cuando sentí que algo me sobresalía, por el rabillo del ojo noté que su dura erección golpeaba la pierna.