Capítulo 25. Cumpleaños.

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— ¡FELIZ CUMPLEAÑOS!

Tae me gritó en el oído y sentí cómo me despertaba con brusquedad al mismo tiempo que mi corazón se aceleraba. Me senté de golpe colocando una mano en mi pecho y con la otra me tocaba la frente.
Mi respiración estaba muy acelerada y no podía controlarla.

—Mierda, Tae.
—No quería asustarte. -Se sentó a mi altura- Pero, quería ser el primero en felicitarte, ¡Feliz cumpleaños! -Me abrazó-

Inhalé y exhalé varias veces para poder volver a mi ritmo de respiración normal y después de sentirme más aliviada, me reí y lo abracé también.

— ¿Qué hora es? -Bostecé-
—Las 12:02 am. Te desperté justo a las 12. -Tae sonrió satisfecho-
—No volveré a dejarte dormir en mi apartamento cuando sea mi cumpleaños, ya sé que me asustarás así. -Me acosté nuevamente-
—Pero agradecerás esto. -Tae caminó hacia la cocina-
— ¿Qué cosa? -Fruncí el ceño mientras lo perseguía con la mirada y me sentaba en el sofá esperándolo-

Tae caminó con cuidado teniendo una pila de panqueques en un plato, tenían forma de pastel y encima le colocó varias velitas.
Con una mano rodeó las velitas para que no se apagaran y caminó cuidadosamente hacia mí, yo sonreí automáticamente.

—No es un pastel, pero improvisé lo mejor que pude. -Se agachó-
— ¿Lo hiciste mientras dormía? -Sonreí-
—Sí, tampoco tenía sueño. -Alzó los hombros- ¿Podrías pedir un deseo y soplar las velitas? Esto pesa -Rió-
—Oh sí sí.

Me acerqué cuidadosamente al plato que Tae sostenía hacia mí y cerré los ojos, pedí que todas las personas que quiero siempre se mantengan con salud y ser feliz.
Al abrir los ojos el calor de las velitas me invadió y las soplé felizmente, Tae sonrió satisfecho y dejó el plato en el sofá para luego volver a abrazarme.
Cuando se separó de mí, su rostro estaba muy cerca del mío y pude sentir como se me formaba un nudo en el estómago y mis manos empezaban a temblar, incluso sentí que en cualquier momento yo comenzaría a sudar frío de los nervios.
Él me miró los labios y volvió a verme a mí, acarició mi mejilla y colocó un mechón de cabello detrás de mi oreja, pude sentir el peso de su torso sobre mí y cómo su cabello rozaba mi frente.

—Quiero besarte. -Susurró repentinamente-

Tragué saliva y lo miré nerviosa, eso no me lo esperaba en lo absoluto, Tae ha estado bastante distanciado de mi en ese sentido desde la última vez que tuvimos un poco de intimidad en mi cocina, y realmente desde hace tiempo también quiero besarlo, pero yo no tengo ni idea de cómo tomar la iniciativa en estas cosas y mucho menos con Tae, él es tan impredecible en cuanto a sus reacciones que realmente nunca sé lo que quiere. Un día quiere besarme, al otro día no quiere.

—Eh..

La puerta de mi habitación se abrió y Hoseok salió despeinado al mismo tiempo que se acercaba a nosotros teniendo un ojo abierto y uno cerrado.
Se acercó sin expresión alguna hacia mí mientras se tambaleaba y me abrazó bruscamente mientras volvía a cerrar los ojos y dejaba caer su cuerpo sobre mi regazo.

—Feliz cumpleaños. -Me dio unas palmaditas en la cabeza y siguió durmiendo-
—Estás aplastándome. -Le toqué el cabello-

Hoseok solo se resignó en alzar los hombros y seguir sobre mí mientras dormía. Tae se rió y yo lo miré incómoda.

—Creo que se quedará así. -Tae rió-
—Creo lo mismo. -Resoplé-

De mi habitación luego salieron Jin y Yoongi, también estaban adormilados pero no tanto como Hoseok.
Cuando se acercaron a mí, me iban a abrazar pero notaron la presencia de Hoseok en mi torso así que frenaron repentinamente y solo se resignaron en darme una palmadita en el hombro.

~El desorden que dejas. [Taehyung] (BTS) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora