Insegnami Insegnante (FugoNara)

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FugoNara (Fugo/Narancia).

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En la habitación de Fugo lo único que se podía escuchar era sus propios gritos, el pelinegro estaba colmando su paciencia y sentía que en cualquier momento tomaría la cuchara con la que se servía azucar en su café para sacarle un ojo.

- ¿¡PERO QUE PUTA MIERDA TIENES EN EL CEREBRO MOCOSO!? - grito furioso mientras jaló el cabello de Narancia para levantarlo de su silla.

- ¿¡MOCOSO!? ¡yo soy tu mayor y debes respetarme! - contestó a Narancia tomando con fuerza su corbata y acercandolo a su rostro - ¡atrévete hacerme algo y te lo devuelvo con mi navaja! -

- ¡SI PERO ESO NO TE QUITA LO ESTUPIDO!- En ese momento Fugo estaba muy alterado para poder razonar, sentía que Narancia solo se burlaba de el o no se lo tomaba enserio ya que a pesar de que lo explicaba mil veces seguía cometiendo con el mismo error - ¿¡CÓMO ES POSIBLE QUE 12 × 34 SEA 1234!? -

Los dos se miraban retandose para ver quien iniciaba con el primer golpe, pero en ese momento la puerta se abrió bruscamente quién era Abbacchio con el rostro enojado e irritado, ambos se soltaron con miedo por la mirada del mayor.

- ¡No se pueden callar por un momento! - Abbacchio cerró su puño y golpeó la pared - ¡Ya tengo suficiente con tener Giorno viviendo aquí! -

- ¿Pero que te ha hecho Giorno? El lava los platos y... ¡Auch! - Fugo pisó a Narancia para que se callara.

Abbacchio suspiró y los miró seriamente - Miren si se van a matar haganlo en silencio. -

- ¡ABBACCHIO! - gritó Bruno enojado, el peligris volteó asustado - ¡No digas esas cosas! Y ustedes dos dejen de intentar asesinarse en cada lección. - los tres asintieron temerosos, el capo cerro cerró los ojos y suspiró - Bueno tengo que ir a recoger un paquete, Abbacchio tu vienes conmigo y ustedes dos compórtense mientras llegan Mista y Giorno. - salió de la habitación seguido del peligris que cerró la puerta.

Los dos volvieron a sentarse en el pequeño escritorio de la habitación, el rubio tomó un trago de cafe con la mano temblorosa intentando relajarse pero empezó a sentirse con culpa, sabe que exageró su forma de actuar pero no puede evitar tener ataques de ira y se maldecía por ser así, por todos los problemas que ha tenido por su comportamiento y a pesar de que fue a muchas terapias seguía sin controlarlo.

- Oye Fugo... Perdón - El rubio volteo a verlo centrándose en sus ojos violetas - Se que te enoja que sea estupido pero le voy a echar más ganas, ¡porfavor sígueme enseñando! - grito entusiasmado.

El rubio sonrió, a pesar de su temperamento su equipo nunca lo han abandonado e intentan ayudarlo, especialmente Narancia que siempre decía algo para que se sintiera mejor.

- Escucha Narancia, tu no eres estupido, pero tienes que concentrarte más ¿entendido? - el pelinegro asintió - Muy bien ¿qué tal si ahora estudiamos otra materia? ¿Como biología? Estas muy atrasado. -

Narancia se levantó emocionado de no tener que seguir estudiando matemáticas que tanto se le complicaba, buscó en el librero entre los muchos libros que hay hasta que lo encontró y lo llevó a la mesita.

-Bueno nos quedamos en la página 51 ¿cual es el tema? - dijo Fugo.

Narancia abrió el libro y buscó la página, su rostro se puso rojo y se tapó los ojos con las manos - ¿Podemos ver otro tema? - dijo Narancia apenado.

Dietro La Mafia. (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora