Penny: tenías razón amor, fue muy divertido asustar a la psicóloga.
Wendy: fue excitante.
Penny: no es para tanto... amor.
Wendy: si, mi vida.
Penny: después de todo por lo que hemos pasado, tus celos y locuras y mi mal carácter y todas las peleas, crees que seguiremos juntas hasta estar ancianas?
Wendy: para mí sería un honor envejecer a tu lado mi cielo.
Penny: te amo -le deja un beso en la mejilla- vamos a adoptar un bebé de verdad.
30 años después...
Penny: maldita babosa te dije que Ben ya es todo un hombre, déjalo escoger con quien se casa.
Wendy: pero él es mi bebé, y no quiero que esté con alguien de apellido Stark.
Penny: Morgan es una chica super linda y carismática, ella es increíble para nuestro hijo.
Wendy: sólo la quieres por que es hija de Antonia Stark.
Penny: y eso qué?
Ben: mamá...
W P: si, cariño.
Ben: embaracé a Morgan.
Penny: ¡hijo de tu puta madre, estás castigado!.
Ben: ya soy un hombre.
Morgan: yo sólo quería comer hamburguesas.
Otros 30 años después...
Wendy: no quiero ir al asilo.
Penny: por qué no?, será divertido.
Wendy: van a haber muchos ancianos que querrán estar contigo.
Ben: no te olvides de los enfermeros.
Morgan: ya déjenla en paz, son unos celosos y sobre protectores.
Penny: Morgan tiene razón, además ni que todos en el asilo estuvieran tan buenos.
Morgan: entre mas arrugada la pasa, mas dulce la fruta.
Ben: no ayudas... de quién estás hablando?
Morgan: de nadie.
Ben: es de tu asistente verdad.
Morgan: tú lo contrataste baboso.
Ben: y por qué me dejas hacerlo?
Morgan: por que no dejabas de llorara para que te dejara hacerlo.
Wendy: se parecen a nosotras.
Penny: no se a quien tenerle mas lástima.