Arrogant and clumsy love. [ Nomicon x Randy]

This is not a date [Parte 1/2]

[1]

-- Tiempo de meter las pelotas en el hoyo.

El de orbes zafiro desvió la mirada e hizo un puchero en señal de derrota mientras que el de orbes anaranjados se acerco a el. 

-- Dijiste lo que a mi se me antojara. -- dijo al ver la expresión de su estudiante haciendo que este suspirara en señal de derrota. 

-- Ahh, entiendo.

Le dio la espalda a su maestro  y procedió a tomar una pelota que estaban al inicio del juego.  

-- Te gusta lanzar pelotas. -- dijo burlón el ninja. Se la entrego y se posiciono a su izquierda. -- Al parecer mas que los  Videojuegos. 

Su maestro lanzo una en el aire y la volvió atrapar. Al entrar al arcade, el Nomicon no pudo evitar asombrarse. Había un sin numero  de maquinas coloridas, el lugar estaba casi oscuro y un montón de adolescentes jugando. Cuando su estudiante le pregunto que con que juego quería empezar este se avergonzó mucho pues no tenia idea de como diablos se jugaban esas cosas y lo menos que quería es quedar en ridículo, era demasiado arrogante como para perder en trivialidades.  Busco si existía un juego con el cual se familiarizada, para su suerte en la esquina del árcade se encontraba un juego que tenia unos aros con umeros y a un lado pelotas. Apunto ese y miro la cara de desconcierto de su alumno. 

-- Randy, estuvo ochocientos años en un libro. Se cosas importantes de la actualidad...-- observo nuevamente las maquinas -- no de trivialidades como estas. 

-- Ah, por favor. No son nada difíciles. 

-- Como sea. -- miro al tablero y los hoyos que habían. Eran círculos pequeños dentro de un circulo y en cada uno había un número. -- Entonces solo lo meto y ya. 

-- Pff jajaja. -- soltó una risa. Jamas creyó escuchar al Nomicon diciendo eso. 

-- ¿Qué?

-- Nada, nada. -- Se acerco mas a el para explicarle en que consistía. -- Los números en los hoyos son tu puntaje, el de 500.000 es el mas alto. Después dependiendo de cuantos aciertes saldrán unos boletos rosados que podrás intercambiar por un regalo de la vitrina. 

-- ¿Y como se si gane? 

-- Ahh, supongo que ganas dependiendo cuantos boletos rosados tengas.

Sin mas el de orbes anaranjados lanzo rápidamente y con un poco de fuerza al hoyo que tenia los 500.000 puntos, acertando con perfección. Del juego empezaron a salir varios papeles rosados como su estudiante le había dicho. Randy lo miro sorprendido.

-- Vaya, esos son muchos boletos. Mas de lo que Howard y yo ganamos jugando una tarde entera. -- susurro a lo bajo. 

-- ¿De verdad?

-- La maquina estaba vieja y nadie la utilizaba, tuviste suerte. Lo más probable es que se averio con tremenda fuerza bruta.

-- Aham. -- dijo burlón. -- No fue tan dificil.

-- Que arrogante.

-- ¿Disculpa?

-- ¡Vamos al siguiente juego!

El ninja dirigió a su maestro a una de ls máquinas. "Derriba tumbas III"

-- No lo se Randy...

-- Vamos sera fácil, yo seré tu maestro. -- dijo con orgullo.

-- Aunque digas eso...

-- Hum, supongo que esto es demasiado para el Nomicon. -- dijo lo ultimo con un tono retador.