Sí, lo engañé, Ana.

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¿No es qué éramos felices?

Miguel y yo éramos ese tipo de parejas que siempre salen en las portadas de las revistas con tan sólo salir de casa, cosa que ya estábamos acostumbrados (yo más que él) pues bien, yo "acababa" de salir del huevo (como siempre decía Ana) y había traspasado corazones con mis canciones.
Por parte de él, era actor, más bien conocido por la serie titulada "Élite", aunque si os digo la verdad, nunca la había visto. De todas formas, mi madre y mi padre estaban contentos con Miguel y puede que yo también estuviera satisfecha con él.
Fueron unos 6 meses muy bonitos, hasta que descubrí que cuando yo me encontraba en el concierto de La Coruña, en esos momentos él se encontraba engañándome con una chica cualquiera. Esta noticia no fue de esperar verla en las portadas de los Titulares para no muy pronto darle el punto y final a mi relación con Miguel.

No era muy de esperar que mis fans se abalanzaran a él como abejas atraídas al néctar de la flor, nada más haciendo que me sintiera culpable de lo que había provocado yo misma. Y diréis, "No tienes que preocuparte por nada Aitana" pero sí, sí que tenía que sentirme mal conmigo misma porque yo lo había engañado mucho antes. Y sí, fue con Luis, Luis Cepeda.

Si no recuerdo mal fue cuando nosotros y nuestros compañeros de Operación Triunfo fuimos a la gala 1 de OT 2018. Luego de terminar de cantar aquella canción que nos representaba a todos los ex-triunfitos, salimos hacia una pequeña discoteca, para ya sabéis, "animar" un poco el cuerpo. No muy tarde de llegar allí ya podías visualizar a no muy lejos, a la parejita de Almaia dándolo todo contra la pared. Digo, se estaban enrollando. Roi no perdió oportunidad para sacar un par de fotos a los tórtolos y publicarlo en las redes sociales, haciendo que Twitter ardiera. Podría jurar que no pude reírme más al ver la cara de Amaia cuando pudo ver lo que había colgado Roi.

Tiempo después, muchos de nuestros compañeros se fueron de la discoteca, disculpándose de que mañana tendrían que trabajar, dejando a el Team Friends solo en la discoteca. Como no, me dirigí hacia la barra en dónde pediría un Ron Cola, no había probado bebida en toda la noche.

– ¿Desde cuando tomas Ron Cola? – Susurró alguien detrás mía.

Pude adivinar de quién era aquella voz, así que repentinamente contesté nada más que me trajeran la bebida.

– Desde que me sale del coño.

Luis rió y se sentó en la silla que tenía en mi izquierda por alguna razón inexplicable. Mi cabeza rondó hacia la derecha, para ver qué hacían los otros. Me sorprendí al ver a Amaia, Roi, Alfred y Ana cantando esa canción que dice "Que la detengan, es una mentirosa..." y realmente con las risas de Ana, Amaia y Alfred no me pude enterar de nada más de lo que cantaban.

Regresé mi mirada hacia mi bebida y me sorprendí, al ver a Luis mirándome concentrando en alguna parte de mi rostro. Puedo jurar que me miraba a mis ojos.

– Tienes una manchita de color marrón en tu ojo derecho. – Explicó mientras una sonrisa salía de él.

– Qué... Bien.

– Aitana, necesito que me quieras como antes hacías, digo... Como en la academia. – Susurró mientras jugaba con un trozo de mi pelo.

– Luis eso, es... Imposible. – Reí secamente. – Simplemente no puedo.

Y ahí fue donde en mi interior se descolocó todo por culpa de aquel idiota.

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– Y así fue. – Terminé de explicarle a Ana.

– ¿Así de fácil se liga? – Bromeó– Aitana aún no puedo que te hayas quedado embarazada por no utilizar condón. ¡Tienes 22 años! – Desesperó Ana.

– Mi abuela se quedó embarazada con 19 y nadie le dice nada.

– No es excusa. – Suspiró. – Aparte, en ese momento, ¿sabías lo qué Miguel era para ti?

– Sí Ana. –Hice una pausa– Engañé a Miguel.

░༉ᬄྲྀ⃢𝓔𝓵𝓵𝓪 𝓷𝓸 𝓮𝓼 𝓽𝓾 𝓱𝓲𝓳𝓪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora