Inmerso entre los extenuantes ritmos actuales, me pregunto qué será de la sociedad sintiéndose identificada con estilos musicales que denigran la poca integridad que nos queda a los seres humanos. Todo esto me lleva a pensar qué ocurrirá con las generaciones venideras que no conocerán bandas como Guns N Roses, Bon Jovi, Queen, AC/DC que inspiraron gran parte del crecimiento momentáneo de la civilización, donde la lucha era por mantener el cabello largo y romper los esquemas tradicionalistas propuestos por las disqueras.
Bandas que inspiraron al mundo a amar con sentimiento total, hacer el amor como si fuera la última vez en su vida, a crear una revolución en la vestimenta que sólo algunos entendían. ¿Dónde quedó la creatividad, el entusiasmo? Se fue, tal como se marcharon muchos de los grandes, siento que Andrés Caicedo tenía razón; la vida es mejor con un rock clásico y una salsa que te haga mover los pies, o como lo mencionaba Rafael Chaparro, la vida es lujuria, beber a las nueve de la mañana mientras todos se dirigen a sus trabajos.
Como olvidar la prosa de Horacio Quiroga el Poe de los latinos, oscurantista, obsesionado con crear literatura de suspenso que pusiera a soñar los niños antes de dormir, hacer algo que no se olvide. Sueño con lo diverso, con lo diferente, con lo mundano y lo latente, las cosas que marcan la diferencia, son en definitiva las que dejan un legado en el hombre, usa un vestido y grita conmigo "I want to break free".
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Antología de las incomprensiones del ser
PoesíaUn pequeño relato de la realidad actual del ser humano. Sucita el contexto de una realidad latente, efímera, seducida por los placeres mundanos y el caos de la sociedad.
