Capítulo 2

25 0 0
                                    

Habíamos llegado a la revista The Famous; que es la empresa familiar mi jefe el señor Andrew Mitchells que la heredó y que heredará a su hijo. Esta revista esta basada en chismes y rumores sobre personas "importantes"  de la alta sociedad, coomo: políticos, actores, cantantes, empresarios, Dj's, etcétera, y todo tipo de cosas asi. Esta empresa lleva la contraria a Famous People; que pertenece al medio hermano del señor Andrew.
 
En todo el trayecto me senti incomoda por la forma en que ese chico me miraba y para colmo se olvido de presentarse a si mismo ¿Como puedes olvidar tu propio nombre? ¿Quién hace eso?. Si, ya se que deberia de saber su nombre; pero el señor Andrew solo me dijo que busque a su hijo; nada mas.
    Lo cierto es que al bajarnos de su coche; me toma de la muñeca como si fuese yo a echarme a correr por algún lado, claramente por mi desconcierto yo me separo rapidamente para mantener la calma ya que estaba realmente nerviosa y no se la razon, ademas de eso; queria cuidar mi imagen al ingresar a la empresa; debido a que las paredes tienen ojos, oídos y boca, y suficiente tengo con que digan que le robe el novio a Ruth la vicepresidenta del departamento de Diseños Gráficos.

   -Antes de que entremos...quisiera decirte algo-dijo entre dientes como si le diese verguenza lo que a continuación diria -Creo que olvide algo. 
   -Si, lo note...-adverti con cierta indiferencia.
   -Tu dijiste que yo te estaba confundiendo con otra persona.
   -Si, eso mismo ¿por que?.
   -¿En serio no recuerdas nada? -arqueo una ceja.
   -No, y no se que es lo que debo recordar -me cruze los brazos -Pero usted si olvido mencionar su nombre.
   -Pero trabajas para mi padre ¿Como es que no sabes mi nombre?
   -Ya, pero su padre solo me dijo que lo trajera aqui; nada mas que eso.

Entonces me puse a pensar un poco, a formular preguntas; hasta que supuse mas o menos sobre lo que quizas había pasado anoche. No podia creer, debía ser una mentira, no se supone que yo deberia de hacer algo asi; al menos con él.

   -Ya se...-afirmé con seguridad.
   -¿Que sabes? -cuestiono.
   -Si, ya se quien eres...
   -¿Aja? ¿y quien soy yo?
   -Tu eres Erick!.

Obviamente me quede en shock al ver su exprecion; que daba a entender que si era él realmente, ese chico de la carta, que me expresaba su descontento, pero a la vez su deseo hacia mi.
   Hubo un momento de silencio; hasta que él subio escalones arriba para llegar hasta llegar a la puerta principal de vidrio blindado, dejándome atrás.
   Pasaron quince minutos de recorrido por las instalaciones de The Famous; le presente a cada uno de los empleados y las funciones que cumplían allí. Ya en los veinticinco minutos mas o menos; lo dirigí hasta lo que sería su oficina, no se por que, pero le mencione el nombre de cada cosa que se encontraba alli...no es que crea que es un retardado, pero queria disimular mi incomodidad. Ademas en todo el recorrido, no decia nada mas que..."si, que bien, vaya, me gusta"...

   -Bueno, creo que cerraré la puerta -advirtió.
   -¿Para que? -subi mi tono de voz.
   -Ademas de traviesa; eres olvidadiza muñeca, creo que bebiste demas, pero todo esta bien.
   -¡Dime que diablos paso! Tu sabes bien que!
   -Bueno, no te pongas asi.
   -¿Como quieres que me ponga. Feliz?
   -Sientate, te lo dire.
   -Solo dilo y ya!
   -Ahh...si, me llamo Erick, y fui yo quien escribió esa nota -afirmo algo indeciso.
   -¿Que mas paso?. Dime ¿por que amanecí en ropa interior? ¿por que había bebidas en todas partes? ¿y por que mi casa era un verdadero desastre?!
   -Espera, tranquilizate ¿si? Vas muy rapido.

Erick fue interrumpido justo en ese momento en el que me contaría todo. Ese alguien abrió la puerta; dejando a la vista su figura alegre; se desprendía de su pálido rostro una sonrisa cargada de emoción, aunque en su grisáceo cabello se reflejaban sus años; y mas en su forma tan formal de vestir.

   -¡Hijo, que bueno que estes aqui! -va directo a abrazarlo y besarlo.
   -Hola mama -corresponde, luego hace seña de que me retire.
   -¿Cómo has estado mi niño?
   -Bien ¿y tu madre?  
    -Bien!...oh Bridgette, no te había visto.
    -Ah, ¿cómo esta señora Jeane?
    -Fantastica. Gracias por encargarte de mi precioso!
   -No hay de que. Mejor me retiro; para que usted y su hijo hablen.
   -De acuerdo querida. Hasta pronto!

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 09, 2019 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Almas Encontradas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora