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Pasaron los días y las semanas. No volví a ver a Jungkook, a excepción de una vez cuando fui a casa de los Jung y lo encontré besando a Mi Yeon... Lo admito. Odié verlo junto a ella y no voy a mentir, la verdad es que me puse algo celoso, pero lo olvidé al instante y seguí con mis asuntos, después de todo yo también tenía a un Jung a quien amar y dar cariño.

-Hola Tae... Taehyung- corrigió Jungkook.
-Hola-respondí sin mirarlo- Hola Mi Yeon noona, ¿dónde está Hobi?- pregunté.
-Salió con papá a comprar unas cosas, pero no demora en volver.
-Oh, de acuerdo, esperaré en el patio.
-Te acompañamos- dijo refiriéndose a ella y Jungkook- Nos haría bien estar afuera.

Los tres salimos, noona y Jungkook siguieron con lo suyo, mientras yo le enviaba mensajes a mi novio pidiendole que volviera y me salvara de la incomoda situación. Mi Yeon entró a la casa para ayudar a su madre y pude escuchar como le pedía a Jungkook que hablara conmigo, dijo que ambos debíamos ser más cercanos, pues seríamos una familia... ¡Qué tontería!

-Ya oíste a la reina- dijo Jungkook sentándose a mi lado.
-La oí, pero no tengo por qué obedecerle.
-Sonrió- Entiendo, sigues con eso de que no podemos ser amigos.
-Jungkook solo déjame en paz.
-¿Por qué? Yo quiero ser tu amigo.
-Yo no quiero tenerte cerca, ¿puedes solo largarte de mi vida? ¿Por qué demonios tienes que aparecer ahora?
-Alguien está de mal humor-se burló.
-Escucha, solo déjame en paz, no te sorporto.
-¿No me soportas? Ni si quiera me conoces. He cambiado mucho Taehyung.
-¿Cambiaste?- reí- Lo dudo sigues siendo el mismo idiota de antes.
-Vaya, ya entiendo, sigues dolido porque te engañé.
-Eres un maldito idiota- me puse de pie y me dispuse a irme.
-Me detuvo- No te irás sin que arreglemos esto.
-No hay nada que arreglar Jungkook, solo vete de mi vida.
-No puedes verme y pretender que todo está bien. Sé que me odias, sé que aunque dices que me has perdonado en el fondo solo quieres golpearme por haberte dañado.
-¿Y qué si quiero golpearte? ¿Y qué si solo quiero odiarte por el resto de mi vida? No puedo hacerlo, eres el novio de noona y a ella la aprecio mucho. No puedo dañarla odiando al hombre que ella ama.
-Pero me odias, odias verme, odias escuchar mi voz porque aún te duele Tae y no sabes lo arrepentido que estoy. En serio lo digo de corazón, lo lamento. Jamás quise dañarte, cometí un error pero quiero enmendarlo. Por favor Tae, deja de evadirme, solo quiero que arreglemos las cosas.
-Jungkook basta, no sigas ¿De acuerdo? Estoy cansado de esto, simplemente quiero que me dejes en paz.
-Negó- No lo haré hasta que me perdones de corazón.
-Lo único que mi corazón hará por ti es mantenerte alejado, no quiero volver a verte.
-Entonces me iré, dejaré a Mi Yeon y me iré lejos de tu vida ¿Eso quieres? ¿Quieres que la abandoné solo por un capricho tuyo?
-No vuelvas a amenazarme utilizando a noona. No la metas en esto, ella no merece que la dañes- dije acercándome a él- Así que cierra la boca y no me des más razones para odiarte.
-Ya volví chi...- dijo Mi Yeon acercándose-¿Qué ocurre?
-Nada- respondí- Tu novio y yo conversamos un rato.
-Sonrió- ¿En serio? ¿De qué hablaron?
-De ti y lo mucho que te quiero.
-Tae- me abrazó- También te quiero, pero no lo digas en frente de Kookie, es muy celoso- dijo bajando la voz.
-Claro. Iré a la sala, Hobi ya debe estar llegando.

Entré a la casa y me dirigí al baño, me miré al espejo y traté de calmarme. Si no conseguía relajarme iba a terminar golpeando a Jungkook frente a todos y arruinaría la tarde.
Cuando Hobi llegó corrí a abrazarlo, necesitaba tenerlo cerca para calmar mi enojo. Su hermosa sonrisa me llenaba de paz y me hacía sentir mejor.
Aquella tarde no volví a hablar con Jungkook y traté de evadirlo, pero Hobi se dio cuenta y al volver a casa me preguntó que ocurría. Silo respondí que no lo conocía y que me preocupaba por Mi Yeon, pero Hobi me dijo que no había razón para hacerlo, que Jungkook parecía un buen chico... Si tan solo supieras Hobi.




Estaba con Mi Yeon comprando algunas cosas. Ella hablaba, pero no podía escucharla, solo pensaba en Tae... Mi hermoso Tae, ¿qué debo hacer para recuperarte? Por favor ya no me odies ¿No ves que tus palabras me lastiman? Necesito tu perdón, no me rendiré. Voy a recuperarte, lo prometo. No me interesa si vas a casarte. Hace cuatro años cometí el peor error y desde que te perdí no hubo un solo día en el que no me arrepintiera y no pensara en ti.
Te encontré sin estar buscándote y para mí el destino es motivo suficiente. Tú y yo deberíamos estar casados y no voy a permitir que los Jung nos separen. Te amo Tae y aunque me odies seguiré amandote y cada vez que me intentes alejarte de mí, solo harás que te desee con más ganas.

-¿Kookie? ¿Estás escuchandome?
-Ah... Sí amor.
-¿En qué piensas? Desde hace días te pierdes pensando ¿Algo te preocupa?
-Negué- Estoy bien, lo prometo.
-¿Seguro? Sabes que puedes confiar en mí.
-Lo sé, pero estoy bien.
-De acuerdo.

No pude ver a Tae hasta luego de una semana, cuando los Jung invitaron a toda la familia a comer, espero que sigan haciendo estas reuniones, de lo contrario no veré a Tae.

Capricho «v.k.»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora