Capítulo 13

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-Silenciosa

(Cap.13)

Uno, dos, y ¡tres! Exclamé interiormente.

Llevaba sin ver a Julie durante todo el día, intentando resguardarme de su mirada y su desaprobación a medida que pasaba el día. Os preguntaréis, ¿que estaba haciendo? Pues bien, rodear la casa sin ser vista era un gran logro. Antes de bajar por la ventana de la habitación, el cual se me iba a hacer una costumbre diaria. La verdad, era bastante fácil hacerlo después de todo. Y ahora, solo faltaba salir del jardín, junto a mi mochila repleta de utensilios que llevé durante todo el día recogiendo por diferentes partes de la casa. Lo más difícil, fue conseguir la linterna, ya que debía cogerla de uno de los cajones de la mesita de noche, en la habitación de mis tíos.

¿Lo más increíble de todo? Samantha Parker me acompañaba sin decir palabra.

-Sam -susurré en su dirección, para acabar por mirarle fijamente a través de la poca oscuridad, alumbrada por las farolas de la calle.

Sam me devolvió el gesto, dio un asentimiento de cabeza, y me obedeció -Que quieres.

-Necesito que me des la linterna de...-señalé con el dedo pulgar la mochila a mi espalda -de la mochila.

-Tranquila -alzó la palma de su mano -Llevo una -sonrió

¿Como que llevaba una? ¿Y no me lo dijo?

-¿Sabes...que tuve que cogerla de la mesita de noche de mis tíos, no? -enarque una ceja en signo de fastidio.

En pocas palabras le explicaba que evidentemente, podría haberme avisado mucho antes de que tenía una, y yo no lo sabía. Cual tonta podría haberme puesto en riesgo...

-Lo importante es llegar a tiempo a casa, y que Julie no se de cuenta de que no estamos, ¿si? -le dije, alzando las cejas.

-Tranquila -hizo un ademán rápido con la mano derecha -No se despertará.

Yo volteé mi mirada a ella de nuevo, mientras comenzábamos a caminar dirección al final de la calle, donde poco después podríamos ver que las farolas ya no iluminaban el camino. Con que, el bosque estaba próximo a nosotras. Lo conseguiríamos.

-Espera -la interrumpi de golpe -¿Porque no tendría que preocuparme? Es Julie -aclaré -Pasará por nuestra habitación cada tres horas para ver si dormimos. O si, como estamos haciendo ahora, no nos hemos escapado.

-Le puse un somnífero en su taza de té de todas las noches -alzó los hombros indiferente.

Yo por mi parte, abrí los ojos de manera desmesurada, sorprendida -¿¡Que hiciste que!? -exclamé.

Ella carcajeó divertida -¡Tranquila! Esta todo controlado -dijo segura.

-¿¡Como que controlado!? Sam, eso debe utilizarse bien. ¡Tiene efectos secundarios!

-Oops -enseñó los dientes -¿Crees que no lo iba a saber? Tranquila, lo tengo controlado -intentaba calmarme a modo de gestos con ambas manos.

Fue fácil hablar con ella hace un par de horas atrás, ya que, al igual que yo, sólo quería disfrutar de las que serían nuestras vacaciones de verano sin padres. Sólo solas. En pocas palabras, conseguimos reconciliarnos y desde entonces no paró de hablarme de los ojos de Luke. Sabía que eran perfectos. Pero había límites de extensión del texto...con que, ya lo sabía. No hacia falta repetirlo.

-Quiero fiarme de ti -la señalé a modo de advertencia.

-Me leí el prospecto.

-Ni siquiera te lees la agenda para hacer los deberes -me quejé.

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