Jamás tengan hijos. Pero son los cositas más especiales, adorables y tiernas en este mundo, ahora estoy haciendo la tarea de mi pequeño, por qué el llego y se fue a dormir; estoy apoyada de pie en la mesa recortando y pegando animalitos.
— Te vez bien en esa posición cariño — agarró mis caderas y las pego a las suyas, empezando un movimiento con ellas
— Nam estoy haciendo la tarea de nuestro bebito — me deje llevar por aquella sensación — Rayos — había pegado mal al león
— ¿Oh ya está en casa? — paro los movimientos y me dió una nalgada — Amo esos shorts cortos
Continue pegando a los animales, lo mire de reojo y ví como se sentaba enfrente de mi.
— También amo esa blusa de tirantes, te compraré más — sonrió de lado — También amo cuando no traes sosten, así como ahora
— Estoy en casa y tenerlo todo el día me molesta — pegue el último — Listo, mamá terminó la tarea
— Pero empezará otra — acomode mi ropa y me senté en sus piernas sintiendo un gran bulto
— Pero ahora serviré la comida así que baja al bebito a comer — bese sus labios y toque la punta de su nariz
— Mamá y papá jamás tienen un momento de pasión — sus manos se dirigieron a mis pecho y empezó a estrujarlos
— Cuando mamá quiere papá la ignora y dice “ Lo siento cielo, mucho papeleo” así que no te quejes — me levanté de sus piernas y fui a ver la comida
— Agh está bien, peor verás en la noche haremos de todo menos dormir — beso mi cuello y salió para subir las escaleras
— Todo menos dormir. . .ajá claro — rei y seguí sirviendo