Capítulo 2

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Subimos a su auto, los asientos estaban cubiertos con el nylon que él había puesto antes de sentarnos para no mojarlos, era muy incómodo sentarse sobre el nylon, pero el estar con él en su auto era el cielo. Guié a Jongin a mi casa, aunque era inútil pues él sabía donde vivía porque a cada indicación me respondía con un "ya lo sabía", aún así continué con mis instrucciones, era una forma de evitar un silencio incómodo, según yo, debía mantenerme hablando. Pensandolo bien, creo que Tao le debe haber comentado donde vivía, porque él nunca vino de visita.

Llegamos a mi casa luego de unos 10 minutos, Jongin manejaba como un loco, hablamos cosas sin importancia en el trayecto, pero igual traté de conocerlo aprovechando esta oportunidad.

-¿A qué se dedica tu padre Jongin?.

-Mi padre es un muy buen doctor, reconocido en el mundo de la medicina, además es abogado aunque no ejerce esa profesión, dice que prefiere salvar vidas, tiene buena fama-me contó muy orgulloso, lo que me hizo entristecer al recordar a mi padre, él también era un buen profesional, era arquitaecto, siempre hacía un buen trabajo, que injusta es la vida.

-¿Qué pasó Kyungsoo, dije algo malo?.

-No, no, es solo que recordé a mi padre. Me alegro de que tengas a tu padre contigo Jongin-el frunció el ceño, no sabía si él conocía bien la historia de mis padres. Lo más seguro es que si, teniendo en cuenta que Tao era mi amigo y él estaba al tanto de nuestra historia familiar.

-Kyungsoo yo...

-Jongin-lo interrumpí antes de que continuara-¿Puedo confiar en ti?-no habíamos hablado mucho, pero deseaba de que me conociera, que supiera que no era raro como todos decían, sino que en el fondo era como todos los demás, solo que con un poco más de tristeza en mi corazón.

-Claro que si-dijo como si la pregunta estuviera de más.

-Pues no pienses que busco lástima ni nada de eso, pero hace rato me preguntaste porqué lloraba, la verdad es que extraño mucho a mis padres, de seguro ya sabes que ellos murieron hace mucho...y hoy es...la verdad es-en mis mejillas comenzaron a rodar las lágrimas-Me siento solo cada día desde que murieron, soy fuerte delante de mis hermanos, pero por dentro llevo aguantándome 5 años, odio este día con todas mis fuerzas...-me callé por que un sollozo pugnaba por salir de mi pecho...

-Kyungsoo lo siento tanto, debe ser duro estar solo-me rodeó con sus brazos regalándome ese consuelo que yo tanto ansiaba, lloré sobre su hombro otra vez, pero me calme con rapidez esta vez.
A pesar de que su auto tenía la calefacción encendida, estábamos temblando a causa de nuestras ropas, estábamos fuera de mi casa cuando comenzamos a hablar.

-¿Hoy se cumplen esos 5 años desde que fallecieron tus padres?-solo asentí-Yo lo siento mucho-fue lo único capaz de decir, me abrazó y depositó un cálido beso en el tope de mi cabeza-Creo que debes cambiarte, te puedes enfermar.

-Si, tienes razón, te estoy retrasando, lo siento.

-No, nada de eso, pero no quiero que te enfermes, además tu ropa tiene sangre, necesitas cambiártela.

-Lo había olvidado-me toqué la nariz, ya no sangraba, aunque en mi mejilla aún sentía la fuerza de la bofetada y ni hablar de mi estómago, le sonreí para que no se preocupara y abrí la puerta, pero él me sostuvo del brazo antes de que pudiera salir de su auto.

-Te recogeré en media hora, ¿está bien?, llegaremos justo para la siguiente clase.

-Claro, te esperaré, pero ya vete, que no quiero que te enfermes por mi culpa.

-Estaré aquí en media hora-asentí y salí del auto, me dirigí a la puerta de mi casa, me giré para observar justo a tiempo como su auto giraba en la esquina, no pude evitar soltar un suspiro, era tan lindo, tan tierno, y tan mi amigo y nada más.

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