Solo son dos en uno

15

—hola Natsu— se escucho una voz detrás de mi —o end?— dijo Zeref abriendo el libro de end

—lo siento natsu— escuche decir a end antes de desvanecer ante la oscuridad.

NARRA END 

Mi vida estaba sellado en ese libro, mi verdadero poder salió a la luz cuando Zeref abrió aquel libro. Aunque yo sabía que esto iba a pasar y no lo quería evitar pero el único que puede detener a el...soy yo...END el demonio más poderoso del libro de Zeref.

—lo siento natsu— le dije antes de chasquear y que quedará dormido en el vacío.

—no me digas que te encariñaste con el, es una persona muy amigable— dijo Zeref frente mío.

—tu y tu hermano son muy diferentes— llamas rojas y negras salían a mi alrededor otorgándome mis alas, cuernos, garras y sobre todo mis ojos color rojo como sangre —zeref-sama.

—empezemos con la mejor parte de esta historia— suspiro —ya derrotaron a uno, gajeel el dragón de hierro.

—trabajar con idiotas no era lo mejor— rei —zeref-sama yo me encargaré de matar a todos— mi voz ronca haci temblar a los que estaban detrás de nosotros.

Zeref giro y me dio la espalda —eso lo ibas a ser quisieras o no, para eso estas END— me voltee acercandome a la ventana por la cual salte para empezar ese estúpido trabajo que me hace ensuciar las manos.

MIENTRAS CON NATSU

Solo podía ver oscuridad, mis manos y mis pues los sentía pesados como si algo me deteniera de moverlos, se escucha el ruido de cadenas chocando mutuamente, y un vacío al cual se supone que estoy viendo.

—mi presa— escuche eco provenir y gritos de gente pidiendo ayuda, lo último que recuerdo es que zeref abrió el libro.

—salvenme!!— una luz surgió desde la oscuridad donde vista de una mujer siendo atravesada por una mano con garras. Desde los ojos de la mujer pude ver un reflejo de la persona que la mató.

—maldición!!! Me traicionaste!— donde me quise mover las cadenas me retuvieron jalandome hacia atrás

—pensabas que te iba ayudar a salvar a la humanidad— al escuchar esa voz mi enojo aumentó el estupor END tuvo el descaro de hablar.

—tsk, nunca tuve que confiar en ti! Bastardo!— risas se escucharon.

—cada uno tiene diente motivos para pelear, el tuyo es salvar al mundo el mío es para derrotar a zeref y tener todo— su voz sería y ronca me daban escalofríos —y para lograr eso, tengo que matar a todos los humanos que haya en el mundo! Incluyendo a los de fairy tail.

—deberían de darte un premio para el mejor actor, realmente me has engañado descaradamente— rei de lado mientras mis ojos eran tapados por mi cabello —pero si te atreves a tocar sea a uno de mis amigos te mataré!!

Rio —tu matarme?— pregunto con sarcasmo —eso lo quiero ver y vivir.

—maldi-to— las cadenas me sostenían más fuerte que antes dejándome sin aire, era como si me estuvieran golpeando para sentir tal dolor.