"Estudiante perfecto", "hijo perfecto", "novio perfecto". Mi vida era un constante "tienes que ser perfecto".Me llamo Sam Vanderweel, tengo 19 años y voy en primer año de universidad, es una de las mejores del país, por lo cual estoy becado. Mi padre murió unos días después de que yo naciera, estoy a cargo de mamá, soy lo único que tiene, tener que mudarme le destrozó el corazón, me rogó que me quedara en nuestro pequeño pueblo, pero al final aceptó que esto era lo mejor para mi. Hace 3 meses que me mudé a Francia para acostumbrarme al lugar, vivo con un chico con el cual estuve hablando meses antes para tener a alguien que me ayude. Hablando de roma...
- Oye Sam, ¿quieres que vayamos al club? - su padre era dueño de uno de los mejores clubes, así que él siempre insistía con ir pero le decía que no porque tenía que estudiar. - Y no me digas que no, porque los exámenes ya terminaron.
- No tengo ropa.
- Yo si.
- Tengo sueño.
- Dormiste todo el día.
- Me siento enfermo.
- Tomate una aspirina.
- ¿Vamos a estar asi toda la noche hasta que diga que si?
- Me conoces - se burló sutilmente para luego seguir - por favor hermano, nunca salimos. Me gustaría que conocieras el club, será la primera y última vez que vayas. Vamos Sam, di que sí.
- Bueno, ya, sólo cállate - empecé a reírme y él pocos segundos después me acompañó - Me baño y vamos
- ¡Si! - dijo haciendo un gesto triunfador.
- Eres tan irritable Theo.
- Pero me amas - me sacó la lengua en un gesto infantil, hice lo mismo y caminé hacia mi baño.
Luego de aproximadamente 15 minutos, salí , admito que tardé demasiado solo para hacerlo enfadar, me dirigí hacia mí armario para ver que usar.
- La camisa negra - dijo por detrás.
- ¿Estas seguro? - mencioné dudando
- Te verás genial, ¿sabes a cuántas chicas levantarás así? ¡Caerán a tus pies amigo!
- ¿Ya te he dicho que eres demasiado estúpido?
- Me lo recuerdas cada día.
- ¿Tú qué usarás?
- Camisa roja, nadie se me resiste - mencionó con una sonrisa de lado.
- Ese ego...
- Vamos, soy bastante apuesto, estoy seguro de que si te gustarán los hombres caerías a mis pies enseguida.
- Si, si, si, lo que tú digas. Ahora sal que necesito vestirme.
- Cómo si fuese a ver algo nuevo - dijo riéndose mientras salía por la puerta.
Una vez pensando en que tendría la casa sola hasta el otro día anduve sin ropa, él llegó por la tarde y me encontró desnudo a la mitad de la cocina, desde entonces no deja de molestarme con el tema.
Luego de vestirme y peinarme un poco me dirigí hacia la sala a esperar que mí compañero termina de arreglarse, en estos momentos creo que una chica podría tardar menos.
Esperé al rededor de 20 minutos hasta que el imbécil al que llamo amigo decidió salir.
- ¡Bendigo a tus padres por no haber usado protección y así tener a un amigo tan bueno! - me dijo mientras me observaba de pies a cabeza.

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S A M.
Misterio / Suspenso-No creas que todo lo que ves es real linda - dijo aquella vez y no le creí. Ese chico, que se hacía llamar Sam era el diablo y dios a la vez, podía enloquecerte con una mirada, podías enamorarte o salir huyendo, todo dependía de él. Cada vez que cr...