La Esposa del Legendario Maestro

Capítulo 102: Reglas.

Varios hombres a caballo silban en el camino, levantando una nube de polvo amarillo. Diez mil caballos que galopan hacia adelante de una manera imponente finalmente se detienen a unos pocos cientos de metros a las afueras de la ciudad de HunJi. Las altas y gigantescas murallas de la ciudad que se elevan hasta las nubes hacen que todo el mundo parezca extremadamente pequeño.

You XiaoMo siente que tiene muy mala suerte. Después de que finalmente logró bajarse del coche de caballos, estaba a punto de tomar un poco de aire cuando un grupo de jinetes galopó frente a él, con los cascos levantando polvo amarillo que cubría toda su cara, incluso la boca.

"Ah pei..."

Los labios de You XiaoMo se mueven un poco desanimados, escupiendo una bocanada de suciedad amarilla. Qué mala suerte.

Estas personas no tienen consideración por los demás. Esto es en las afueras de la ciudad de HunJi. Quién sabe cuánta gente hace cola esperando para entrar en la ciudad. Causando tal conmoción, los afectados no son sólo él. Bastantes personas son como él, con la cara cubierta de polvo. Lo que le sorprende es que todos parecen estar furiosos pero no se atreven a expresar su ira.

Justo cuando se está preguntando sobre esto, alguien le da la respuesta.

"Chico, ¿tú eres el que acaba de escupir?"

Un hombre alto y delgado que monta un caballo grande de repente da la vuelta a su caballo y se dirige a You XiaoMo. Mirándolo desde arriba, a You XiaoMo que se está limpiando la boca, su cara es prohibitiva, como si estuviera mirando grillos topo y hormigas.

You XiaoMo está aturdido. ¿Qué significa esto? No me digas que no se le permite escupir después de tener la boca llena de tierra.

Pero lo que es realmente sorprendente es que podía oír a alguien escupiendo entre las pezuñas estruendosas.

Pensando en esto, ve a todos los espectadores mostrando expresiones de simpatía y lástima. Pero ni uno solo viene a ayudarlo. En realidad, hay unos cuantos de pie con los brazos cruzados mirando la escena con regocijo.

You XiaoMo se rompe los sesos, entonces pregunta, "¿Puedo preguntar qué quieres?"

El hombre alto y delgado sonríe diciendo: "Chico. No podría decir que tienes tantas agallas. Pero delante del gran yo, las agallas no sirven de nada, sólo los puños son útiles".

¿Agallas? You XiaoMo siente que lo que más le falta son agallas.

Pero cuando no se entera de cuál es el verdadero problema después de esperar medio día, empieza a impacientarse. Su cuerpo fue sacudido durante medio día y todavía se siente un poco incómodo. Y él le dice: "Este hermano mayor. ¿Qué es lo que quieres?"

Viendo la impaciencia en su cara, la cara del hombre delgado y alto se enfría, extiende su mano y se extiende hacia atrás sacando un gran cuchillo en forma de luna creciente. La balancea directamente hacia el aturdido You XiaoMo cortando hacia abajo mientras dice: "Muchacho. Veo que es tu primera vez en la ciudad de Hunji. Ahora te enseñaré una de las reglas. No creas que eres alguien de por aquí. A mis ojos, ¡ni siquiera eres una hormiga!"

You XiaoMo no puede entender completamente por qué esta persona ataca de repente cuando estaba hablando. No parece que haya dicho nada ofensivo.

Pero esa hoja creciente no tiene ninguna posibilidad de caer sobre el cuerpo de You XiaoMo. Detrás de él, una delgada mano, como de jade blanco, se extiende desde la ventana del carro y detiene fácilmente la afilada hoja en forma de media luna. No importa cuánta fuerza use el hombre delgado y alto, la hoja creciente no tiene forma de bajar ni siquiera un poquito.