Sea. ○Jinsu○

En El Viaje [5]

―¿No crees que se esta demorando?  ―Seokjin miró a su padre de soslayo y una mueca salió de sus labios.

―Solo son algunos minutos

―Media hora, Seokjin. Es la segunda ceremonia que se hace este año en tan poco tiempo y algunos no tenemos permiso de quedarnos todo el evento. ―el menor trató de ignorar las palabras de su progenitor y exhaló con fuerza. Después de dos meses, se había vuelto a hacer de nuevo su segundo matrimonio con Yoongi, quien había aceptado casarse con el de manera fácil, sin poner ninguna queja. Pero viendo a sus invitados mirar sus relojes y algunos poner cara de pesar, el actor se preguntaba si el amor de su vida le iba a dejar plantado. Apretó su abrigo con elegancia y se negó a pensar que se iba a quedar esperando en el altar.

Porque no era su culpa.

¿O si?.

[●]

―Joder, ¡hace poco me quedaba de maravilla! ―Yoongi maldijo y se sentó en una silla frente a su cama, mientras su madre apretaba los labios ansiosa. La mujer miró la hora en una de sus muñecas y devolvió la mirada a su hijo.

―Mi amor. Solo han sido muchos pasteles. Te has alimentado bien ya que el trabajo te tenia en un estado de ansiedad ―puso una de sus manos en su hombro.―Solo ponte otro, bebé. Nadie lo notará. Además, estamos tarde y tu padre y los padres de Seokjin y mucha gente más esta enloqueciendo ―el menor negó casi llorando, mientras sus dedos tocaban con delicadeza su rostro ya que estaba maquillado para la ceremonia y su cabello estaba tan organizado, que no había forma de que pasara sus manos por el gracias a la frustración.

―Seokjin me ha regalado el maldito conjunto, mamá. No puedo hacerle esto

―Solo es ropa, Yoongi. El lo entenderá, lo que no entenderá es el por qué le has dejado plantado cuando no entraste en unas telas. Buscaré otro para ti, pero por favor, termina de organizarte que no podemos demorarnos más.

Y entre medio de muchos pucheros y pataletas, el productor tragó con fuerza cuando mucha gente de la recepción lo miró con mucha extravagancia. Ignoró los susurros y suspiró tranquilo cuando llegó al pasillo donde se celebraría la boda. 

―¿Crees que en serio me veo bien, mamá? ―su madre lo miró a través del espejo donde se retocaba su brillante labial rojo y arrugó sus cejas.

―Como un maldito príncipe, mi niño. Ahora, creo que estás listo. Entremos ―temblando como una gelatina, Yoongi asintió siendo escoltado por algunas personas, en compañía de su progenitora. Le sonrió a su esposo quien estaba en el pequeño escenario y caminó con lentitud hacia el.

Dios, se iba a casar de nuevo con el amor de su vida. 

Como un mantra, ignoró los aplausos de la gente que conocía ya fuera la familia de su esposo o de el mismo y no pudo evitar el sonrojo de su rostro, cuando Seokjin besó uno de sus dorsos.

―Diferente, pero encantador ―el menor asintió ante el actor, quien probablemente se estuviera refiriendo a su ropa.

Y mediante muchas palabras de amor, promesas y discursos amorosos, la pareja se apretó en un largo abrazo, después de dar el si por segunda vez. Seokjin atrajo el pequeño cuerpo de su esposo a su cuerpo y besó su frente.

―Te amo mi amor. ―Yoongi ebrio en las palabras de su pareja, lo miró tratando de parecer competente para la ceremonia que seguía en curso.

―Yo... También lo hago

―¿Qué haces?

―Dejen que la burbuja se rompa, queremos felicitarles también ―la pareja se giró sonriendole a la pareja de Irene y dieron paso a las felicitaciones de sus invitados.