Chiquito, Bonito y Caprichoso ||OffGun|| (Omegaverse)

Prólogo

—¿Por qué no traes tú uniforme? —Gun se giró sobresaltado ante la potente voz de un alfa azabache.

—¿Me hablas a mi?

—¿Acaso ves a alguien más? —El alfa lo miro con enojo y le aventó un delantal- Ponte esto al menos. ¡Los nuevos empleados siempre son un desastre!

Gun abrió la boca dispuesto a aclarar las cosas hasta que sus miradas se cruzaron. ¡Ay, por Dios! Se mordió el labio ¡Pero que alfa más sexy tenía ante sus ojos!

—Escucha yo no soy...

—Uno de los hijos del presidente Phunsawat está de cumpleaños y el salón debe estar listo en cuatro horas. —El alfa sonaba molesto. —Una fiesta de gente rica presumiendo hasta la marca de sus calzones... será una noche muy larga.

—¿Tienes algo en contra de los ricos? —Gun se atrevió a murmurar la pregunta.

—La mayoría no sabe apreciar lo que tiene. Y son unos consentidos insoportables y déspotas, despreciando a la gente trabajadora. Prepárate porque veras a muchos de ellos está noche.

Ay no...

—No todos son así.

—Si, claro —Dijo con una risa sarcástica.— Anda, ponte a trabajar o no hay paga.

—Pero yo no...

—¡Ah! Casi lo olvido...

Se acercó tanto al omega que Gun sintió que su corazón se saldría del pecho al percibir un olor a chocolate y café, la cercanía del alfa le quitó el aliento. ¿Lo iba a besar? Porque eso era lo que hacían sus pretendientes cuando se acercaban de esa forma. Emocionado ante la idea de que ese alfa tampoco se resistiera a su encanto Gun cerró los ojos y puso carita de beso.

Ante esto, el alfa frunció el ceño y se alejó un poco.

—Esta comida no es para ti. —Le quito uno de los canapés que habia tomado y lo regreso a la bandeja. —Que suerte que el chef no te vio. Se más cuidadoso.

El alfa agarro unas botellas de champán y salió de la cocina.

Segundos después entró un omega de cabello castaño oscuro, vestido con ropa de deporte carísima y lentes oscuros, joyería brillaba en su oreja izquierda y estaba enfadado.

—¡Aquí estás! Se supone que me ayudarías a escoger mi atuendo para la fiesta. ¡Que mal hermano eres! —New frunció el ceño.— ¿Por qué estás usando un delantal?

—Creo que me enamoré.

—¿Tan bueno están?— New pensó que hablaba de la comida así que metió las manos en la bandeja de canapés y se comió dos de un solo. Gimió de placer.— ¡A mis invitados les va a encantar!

El chef entró y agrando los ojos al ver al par de herederos de la familia Phunsawat en la cocina del hotel.

—¡Jóvenes amos, debieron llamar al servicio! No hay necesidad de que bajen a la cocina...

—No te preocupes Film! —New empujó a su hermano fuera de la cocina y se fue sonriendo. —Y Por cierto, deliciosos canapés. ¡Prepara mil más!

Mientras tanto el omega castaño seguía suspirando por el Alfa azabache. Hasta que recordó la manera tan despectiva con la que se expresó acerca de los ricos.

—¡New me quiero morir! ¡Él nunca me amara!

—¿Pero qué dices? Joss está loco por ti. —New revisaba si teléfono mientras camina a de manera distraída.

—¡No siquiera ha llegado a conocerme bien y ya me despreció!

—¡Me tomó al menos media hora encontrarte! —se quejo New sin prestarle atención a lo que su hermano decía. —¿Por qué tienes la costumbre de mezclar te con los empleados? La próxima vez quédate y llama al servicio...

—¡New​ me quiero morir!

—Ahora vamos a escoger mi atuendo, —New lo empujó hasta el elevador. —¡Mi fiesta será increíble!

Justo antes de que la puerta del elevador se cerrara, Gun tuvo una vista del Alfa azabache pasar en dirección al salón de fiestas, ahora empujaba un carrito de servicio y pudo apreciar lo bien que le quedaba aquel uniforme de camarero.

El omega se derritió hasta llegar al suelo ante lo guapo que era el alfa y lo desconsolado que se sentía que, por primera vez en su vida, encontraba algo que no podía pagar con su black card.