Las ventajas de ser mío

Participante 221

Me encontraba bajando las escaleras de la escuela, me tocaba la clase de gimnasia, la cual faltaría.

- ¿Chica de las reglas? - voltee los ojos.

-¿Por qué me molestas tanto?

- Es parte del deber de ser tu novia querida, hasta deberías crear esa regla para mí- sonrió mordiéndose el labio.

- Me repugnas- le dije con asco- salte de una vez de mi juego, me gustan los hombres, nunca estaría con una mujer y menos contigo.

- ¿Sí?- dijo acercándose

- Sí.

- a ver, pruébalo- y la tenía al frente y le dí la espalda rápidamente.

- Hey 221, ven rápido- dije llamando al chico que se encontraba sentado, revisando su teléfono.

- ¿Qué le puedo servir niña?- hizo una pausa - ¿sí te puedo llamar niña?, Lo siento si no te gustar, por favor no me elimines, en serio quiero ganar y es que..- voltee los ojos.

- ay cállate- y lo besé - para que entiendas que solo me gusta los hombres.

- Yo...- dijo la perra, toda roja de la ¿Tristeza?

- Ya te puedes ir 221, gracias por tu colaboración.

- Benjamín, me llamo Benjamín Dappo.