▪ Tú, y mi destino ▪

624 76 5
                                    

"No me arrepiento de mi pasado, pero sí del tiempo perdido con la gente equivocada"

Las últimas colillas de mi cigarrillo salieron volando por aquella ventana frente a mí, cuando JongHyun azotó la puerta de nuestra habitación.

Otra vez.
La tercera vez en el día.

Habíamos peleado, como en los últimos 10 meses.

Bien me había dicho JinKi que un matrimonio por conveniencia nunca terminaría bien. Que aunque no nos faltara el dinero sí no iba a faltar amor.

Y al final, el anciano siempre tuvo la razón.

Pero ¿de qué me servía darle el crédito ahora, cuando mi vida estaba arruinada? ¿De qué me servía saberlo si JongHyun y yo estábamos matándonos entre nosotros cada vez se daba la oportunidad?
De nada me servía seguirle lamentando. De absolutamente nada.

Me bastó con girar un poco para darme cuenta de la realidad, de esa que tanto odiaba. Mis libros de la universidad estaban en el suelo. La computadora que compré quedó inútil; rota por algún lado de la habitación. La ropa revuelta, la cama totalmente empapada por el florero que JongHyun me arrojó pero pude esquivar.
El cuarto era el reflejo perfecto de lo que era mi vida en ese momento. Un desastre.

-Te tocará limpiar hoy, KiBum...

Me digo.

Y es que claro, JongHyun se había ido y no podía dejar la habitación así. La vida seguía, como todos los días.

Aunque las peleas entre ambos nunca fueron tan fuertes como la de ese día. Me di cuenta de ello cuando me miré en el espejo al lado de la cama; mi labio roto sangraba producto de una bofetada.

Pero, no me podía quejar, yo lo había golpeado primero, así que su cara probablemente estaba más desastrosa que la mía.

Confieso, con cierto orgullo, que tengo la mano pesada.

- Necesito el dinero de la caja fuerte. Voy a quedarme en un hotel.

Vaya, el señor había regresado más rápido que de costumbre. Por supuesto que sólo lo hacía por el dinero.

- Pues tómalo - le dije mirándolo desafiante y sin titubeos - ¿Cuándo me has pedido permiso tú a mí para coger dinero?

Dinero que se gastaba en la amante que se había conseguido de Dios sabe donde.

- Te anuncio que voy a coger el dinero para que luego no vayas con tus amiguitos diciendo yo te robo dinero, que por cierto también es mío. - gruñó mostrándome claramente que aún estaba enojado.

-Entonces toma tu dinero y vete- señalé la puerta de la habitación - Puedes llevarte tu ropa también. Nadie te lo va a impedir, no te preocupes.

Tan solo por la forma en que miró se notaba que si hubiera podido golpearme de nuevo lo habría hecho. Estaba furioso; tanto como yo. Pero esa ceja rota y la bofetada en la mejilla que le di no iban a dejar que siguiéramos peleando. Mi ventaja era obvia. Además que ya no iba a servir de nada, él no dormiría en el departamento de todas formas.

Me dejaría en paz aunque sea una noche.

Y gracias al cielo que lo hizo. Tomó su dinero y se largó con todo y su cara abofeteada.

Luego de tanto tiempo podía tener paz. A pesar que la casa estaba hecha un desastre por nuestro alboroto, eso pasaba a segundo plano porque ya no tenía que oír su odiosa voz gritándome que era un fracasado, que nadie podría amarme porque soy una completa basura y bla bla bla.

𝑈𝑛 𝑐𝑖𝑒𝑙𝑜 𝑒𝑛𝑡𝑟𝑒 𝑙𝑒𝑡𝑟𝑎𝑠 ☁️ [Drabbles JongKey] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora