Vete De Mi Vida.

Capitulo 3

-Oye Mia te necesitan en el cubículo 16- Esa es Katterine mi amiga y compañera de trabajo, alta cabello castaño y de cuerpo delgado es la única persona con la que interactúo cerca de una amistad, no diré que soy antisocial y no me relaciono con otras personas pero en estos lugares todos tienen cola que les pisen y es mejor mantenerse al margen; trabajo en un call center, uno de los mejores del país, entré apenas teniendo conocimiento sobre lo que se hacía pero eso gracias a mi primo que es gerente del lugar aún que debo decir que me desenvolví muy bien y me ascendieron a supervisora a los ocho meses de iniciar mi jornada.

Me levante de mi lugar dedicándole una sonrisa a Katti hacia el lugar que ella me indicó, al parecer un joven que le calculaba unos veinte años parecía tener problemas con un cliente, le di una sonrisa conciliadora lo que pareció alentar un poco al joven levantando el teléfono me dispuse a continuar la llamada..
Cuando resolví el problema me informaron que había reunión con todos los supervisores de la planta, genial! Se suponía que al salir del trabajo pasaría al apartamento de Josep, creo que tendría que cancelar eso lo que daría inicio a una discusión, el problema de trabajar en un call center es que no tenia un horario formal, si mi jefe decía que debía quedarme mas tiempo tenia que hacerlo sin rechistar.

..

-Y por esa razón estoy anunciando mi retiro- Informa mi jefe dejandonos a todos perplejos, sabia que estaba enfermo pero no pensé que fuera un asunto de tal gravedad.

-Quien quedara a cargo?- Pregunta una chica rubia teñida llamada Lilith que según rumores ha estado en la cama de todos los supervisores incluso en la de mi propio primo lo que la ha llevado a estar donde está, bien por la zorra.

-Mi hijo Masson es el correspondiente a tomar mi lugar- No conocía a su hijo a decir verdad nadie lo hacia, me parecía erróneo que una persona que no había tenido relación con la empresa antes fuera a tomar las riendas del lugar pero decidí morder mi lengua y quedarme callada.

Una incontable cantidad de halagos fueron dedicados al futuro ex jefe la verdad iba a extrañarlo, a pesar de su mayoría de edad era un jefe moderno al cual le importaba la vida de sus empleados.

-Deseo una pronta mejoría para usted señor Richard- Fue mi turno de decir, no estaba del todo segura como serían las cosas con su hijo o si seria igual de buena persona como lo era él pero solo nos quedaba esperar, todo se sabría en un par de semanas.

Salí como alma que lleva el diablo hacia la estación de taxis mas cercana, si me apresuraba llegaría solo con 15 minutos de retraso y no tendría mucho que explicar a Josep, si llegaba a tiempo habían posibilidades de tener una buena velada.

..

Toqué el timbre del apartamento de Josep solo tuve que esperar unos segundos para que abriera, lucia sexy con su camiseta gris y su pantalón jean un poco mas abajo de lo que normalmente usa, no se como siempre lograba hacer que me derritiera ante esos ojos cafés que contrastaban con su cabello castaño prolijamente despeinado con esos abdominales en proceso, si en proceso, y un tanto mas alto que yo, definitivamente ese hombre me volvía loca.

-Creí que ya no venías- su tono amargado me sacó inmediatamente de mis pensamientos, solo esperaba se le pasara rápido.

-Tuve que atender unos pendientes lo siento- dije pasando al interior de su apartamento y quitándome mi abrigo.

-Espero que esos pendientes no sean problemas para nosotros- dijo con la voz seca.

-Para nada, solo tuve que quedarme a una reunión prevista a última hora casi tuve que volar cuando salí de la empresa para no llegar muy tarde.

-Pues la cena ya se ha enfriado.

-Lo único que quiero comer es tu cuerpo- digo en un tono seductor enredando mis brazos en su cuello para besarlo, el detiene el beso para tomarme de la mano y empujarme al sofá de la sala

Me quita la ropa rápidamente y se saca su camiseta y su pantalón prosiguiendo con el acto de hacerme suya, aunque debo decir que no de la manera que me hubiera gustado no es que lo haya disfrutado mucho que digamos pero parece que el acabo muy pronto como para poder dedicarme a disfrutar, siempre era así. Me levante del sofá regresando mi blusa amarilla a mi cuerpo y me dispuse a ir a la cocina para recalentar la cena, el sólo se quedo sentado y encendió la tv.

-Quieres que te lleve una cerveza?- grite desde la cocina, el solo levantó el dedo pulgar en forma de asentimiento.

La saque del refrigerador y me dirigí al sofá le extendí la cerveza y me senté junto a el, el ni siquiera volteó su mirada hacia mi, siguió viendo su programa de lucha libre como si yo no estuviera presente, carraspeé para llamar su atención, finalmente me miró.

-Estaba pensando en que tal vez podríamos ir donde tu madre.

-No podemos ir- dijo dándole un trago a su cerveza y volviendo su vista al televisor.

-porque no? Jos, en nuestros tres años de relación nunca me has llevado a la casa de tu madre ni siquiera me la has presentado- me queje pero el parecía hacer caso omiso a mi queja.

-No puedo llevarte Mia el coche esta en el taller y no se cuando me lo devolverán.

-Podemos ir en autobús.

-Imposible sabes lo mucho que odio el transporte público no soporto estar en medio de tantas personas.

-Bueno podríamos prestar el coche a tu amigo Robert- dije tratando de convencerlo.

-Mia no! No puedes entenderlo? No se porque tanto insistes en conocer a mi madre carajo- dijo alzando un poco la voz.

-Porque es lo que las parejas normales hacen Jos, conocen a su familia, salen de viaje de vez en cuando, conviven en cenas fuera de casa al menos una vez al mes.

-Pues no soy esa clase de persona y no creo serlo solo para cumplir tu capricho Mia- dijo poniendo la botella en una mesa pequeña que se encuentra a la par del sofá- no se porque siempre te pones tan insoportable.

-Te parezco insoportable?- dije ofendida, dispuesta a seguir con la discusión el pitido del microondas me detuvo lo mire mal y me dirigí hacia la cocina para sacar la cena, mi apetito se había esfumado junto con mi buen humor.

-Sabes si te parezco tan insoportable no deberías estar con una persona como yo- dije dejándole el plato en la mesa junto con su cerveza y dando la vuelta para dirijirme a su habitación, pude sentir su mirada tras de mi pero no me detuve ni volteé.

-Oye nena no fue mi intensión decir eso si- dijo sentándose en la cama, yo despegue mi vista del libro que estaba leyendo para mirarlo- lo siento sé que estuvo mal hablarte de ese modo pero es solo que no me gusta que me presionen.

-Y yo no se porque te sientes presionado, conocer a tus padres es tan normal como dormir con migo, es algo que en algún momento de la relación se tiene que dar- dije con molestia.

-Es que no se porque te empeñas en eso.

-Esta bien- dije haciendo señal de stop con las manos- no iremos a la casa de tu madre pero que te parece si salimos de viaje?- seguí ante su mirada de rendición- no lo se podríamos ir a la playa o salir a acampar.

Suspira -Esta bien, pero solo sera por esta vez- dice finalmente.

-De acuerdo- digo abalanzándome sobre el para abrazarlo.

-Pero me lo tienes que recompensar- dice agarrándome de las caderas y posiciomandome sobre él.

-Por supuesto que lo haré.

Continuamos con un camino de besos que nos tomó un rato para entrar en acción, luego me recosté y caí inconsciente en su pecho, no se si estaba soñando o fue real pero pude sentir como me apartaba de su cuerpo y se levantaba de la cama para salir de la habitación, aunque debí estar soñando porque cuando desperté el amaneció a mi lado.