El Orfanato

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Juan aparenta ser un chico normal a no ser por una extraña condición que el sufría, solía tener pesadillas todas las noches muchas de ellas muy raras ya que solían tratarse de escenas sangrientas, perturbadoras e incomprensibles.
Las pesadillas hacían que Juan dejará de dormir para evitarlas, a la vez esto lo hacia sufrir dolor constante de cabeza por la falta de sueño.

Aquellas pesadillas iniciaron a corta edad cuando era tan sólo un niño de alrededor de 7 años de edad, lo raro de esto era que estas escenas de sus pesadillas se relacionaban con cosas que a su edad era difícil que conociera, o al menos eso era lo que sus padres adoptivos pensaban.

Juan había sido adoptado en un orfanato que quedaba lejos de su hogar actual. En aquel orfanato creció asta alrededor de 5 a 6 años donde luego fue adoptado por los Cooper.

El orfanato era de un aspecto extraño desde las instalaciones, hasta el personal que allí trabajaba, el ambiente era pesado, desalentador tanto que los niños cargaban caras algo inexpresivas y tristes, al menos la mayoría de ellos ya que Juan fue la excepción, era el único que sonreía e aquel maquiavélico lugar, esa fue la principal razón por la cual aquella pareja de recién cazados lo adoptaron, después de enterarse de la cruel noticia de no poder concebir hijos.

Juan empezó con esta extraña condición aproximadamente un año después de su adopción, sus padres pesaron que sería momentáneamente pero después de percatarse de la constancia de estas empezaron a preocuparse, luego de varios años de lo mismo decidieron llevar a Juan a terapia.

El psicólogo que trato el caso de Juan pregunto a los padres si el chico había sido víctima de agresiones o a sido expuesto a escenas de violencia, ya que al parecer estas pesadillas parecen ser recuerdos comprimidos de Juan que se presentan como pesadillas luego de tener bloqueó de memoria para poder tener una vida normal, los padres aseguraban que Juan nunca había presenciado una agresión mucho menos ser una víctima de esta.
Las terapias no servían de nada, porque,
esta situación perduró por muchos más tiempo, la desesperación aumentaba en los padres con cada día que pasaba la impotencia que sentían al no poder saber la razón ni como sanar a Juan.

Llegó el día de su cumpleaños número 18, Juan lo festejó con alegría junto con sus padres, familiares y amigos. Durante todo el día actuó de forma normal, pero al atardecer cuando la mayoría de los invitados se habían marchado empezó a sentirse mal con un fuerte dolor en la cabeza sintiendo como si fuese golpeado brutalmente, luego empezó a gritar y de la nada se abalanzó sobre uno de sus amigos, con el cual estaba conversando en el patio trasero, lo golpeó, pateo y desfiguro el rostro asta dejarlo sin aliento, tomo su cuerpo para ocultarlo en un cuarto abandonado que tenía la casa en el que por lo general su padre solía guardar herramientas viejas, después se dirigió al baño tomó una ducha para luego dirigirse al cuarto y quedar inconciente.

Nadie supo de él por un par de horas hasta que se levantó con un poco de jaqueca dirigiéndose a la sala donde sus padres le preguntaron acerca de su amigo pero al parecer Juan no recordaba nada de lo que sucedió, así que respondió negando a verlo visto después de la fiesta, sus padres no pregunto más.

Luego la hora de dormir Juan dormía por el día agotado que tuvo, mientras el dormida sus padres lo observaban con cariño sintiéndose un poco mal por todavía no descubrí lo que ocurría con su hijo pero alegres ya que cumplia sus 18 años, después de observarlo se dirigieron a su habitación.
Ya en su habitación ellos decidieron investigar un poco hacer a del orfanato pero lo que descubrieron los dejo sin aliento. Resuelta que encontraron un reciente artículo acerca del orfanato el cual informa lo siguiente:

En el orfanato se a descubierto varios echos macabros muchos de estos vinculados con las artes oscuras, durante un a investigación se encontró varios niños víctimas de violencia y abuso, la mismo tiempo cadáveres de infantes utilizados en algún tipo de ritual satánico esto aterrorizó a los investigadores los cuales no tardaron en avisar a las autoridades quienes se encargaron del rescate a niños y cierre de este espantoso lugar.

Los padres de Juan no podían creerlo, se quedaron anonadados con este artículo, mientras seguían investigando se enteraron de que muchos de estos niños que fueron adoptados de aquel lugar perdieron la razón a tal punto de asesinar a sus padres y a la vez ser protagonistas de masacres.
Esto estremeció poniendo la piel de gallina al señor y señora Cooper, no sabían que pensar, el temor los consumía como hace un fumador con un cigarro, temblaban al imaginar lo que podría pasar con Juan pero un aparte de ellos, esa parte que aman a su hijo, les hacía pensar que Juan no perdería la cordura como sucedió con los otros chicos.
Mientras ellos pensaban en su cama abrazados frente al computador, la puerta de su habitación se abrió de repente mostrando la silueta de su hijo, está vez no parecía el, su mirada era fría, su boca formaba una gran sonrisa maquiavélica.
Luego de que Juan entrase en la habitación sus padres lo obserbaron con un cuchillo en mano, se abalanzó sobre su padre el cual luchaba para soltarse de su verdugo, Juan lo apuñaló por la espalda introduciendo el cuchillo asta perforarle un pulmón a su padre , luego le hizo un corte en el cuello dejándolo sangrar sobre el colchón de la cama retorciendose por el dolor, la agonía y el no poder respirar, mientras tanto su madre escapó del cuarto corriendo hacia la cocina donde también cogió un cuchillo para defenderse.

Juan fue tras su madre hasta encontrarla, al verla ahí se acercó, lentamente con su cuchillo en mano, cuando estaba cerca de ella, su madre lo sorprendió al incrustar el cuchillo en el rostro justo donde de encontraba el ojo, pero a Juan pareció no importarle en lo absoluto ya que inmediatamente introdujo su cuchillo en el vientre de su madre para luego hacerle un corte vertical hasta el cuello dejando caer sus vísceras sobre el suelo, mientras su madre moría en el lecho de su agonía pronunció unas palabras que de seguro fueron las últimas:
Te veré en el infierno hijo! ¡No olvides que te amo!
Después de esto su mirada se apagó y su respiración se detuvo, Juan instantáneamente se paso el cuchillo por la garganta acabando con su propia vida.

Esa noche todos murieron de formas perturbadoras, la Policía al llegar ala escena del crimen encontraron el cadáver del amigo de Juan, además de descubrir que los Cooper eran unos de los asesinos en serie más buscados además algo raro el señor y la señora Cooper crecieron en el mismo orfanato en el que adoptaron a su hijo.

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