Gleestory 6: Teenage Dream

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Esta canción es interpretada por los Dalton Warblers, con Blaine como voz principal y sale en el capítulo Never Been Kissed (segunda temporada, episodio seis)  y The Break-Up (cuarta temporada, episodio cuatro).

Gleestory por @valenhipster y @Mica692523.

La música retumbaba en mis oídos, despertándome. Esta se mezclaba con los gritos de adolescentes alocados y borrachos. Froté mis ojos y distinguí un cuerpo a mi lado. Era un chico que nunca en mi vida había visto. Tranquila, me levanté y me vestí para seguir disfrutando la fiesta. No me sorprendí de despertarme con un desconocido, para mí ya era rutina.Salí dejando al chico solo, aunque no importaba, ambos sabíamos que era cosa de una noche. Volví al ojo del huracán: la pista de baile. El olor a alcohol y a drogas era notable en esta parte. Un tipo de dos metros se acercó, me entregó un porro y se alejo sin decir nada. Aquí te comunicabas así, sin palabras.

Me acerqué a la barra y deje el porro a un lado. Pedí lo más fuerte que tenían mientras el barman me desnudaba con la mirada.

—Son $80 —me avisó. Saqué mi billetera y estaba desierta, así que aproveché mi belleza.

Me le acerque y le susurré: —No tengo plata pero te puedo pagar de otra manera —lo sentí estremecerse y asentir. Le rocé los labios y con una carcajada, me dí vuelta para perderme en la multitud con mi bebida.

Camine hacia el centro de la pista meneando mis caderas con varias miradas clavadas en mí. Comencé a bailar provocativamente frente a un chico de aspecto inocente. El chico se acerco tímidamente, comenzó a susurrarme al oído y a bailar a mi lado.

Estuvimos bailando uno tan pegado al otro que todos nos observaban, pero no me importaba, solo era un juego. El chico me susurro si quería ir afuera, yo acepte.

Mientras cruzamos la pista para ir al exterior, el mismo tipo que me había entregado el porro me dio uno. El aire fresco y saludable me golpeo en la cara, fue cuando me di cuenta que estábamos en el exterior. Le ofrecí el porro, el vacilo un instante pero al final acepto. Cuando le dio una calada se apoyo en la pared hasta sentarse en el suelo rasposo y me lo paso a mí, que antes de poder tocarlo, el chico me lo arranco de las manos y comenzó a darle caladas rápidamente. De repente se paró de un salto y comenzó a besarme alocadamente el cuello hasta llegar a mis labios. Se aparto de mi y le saco la birra un tipo que estaba al lado. El chico comenzó a tomar hasta acabárselo y tomo la segunda botella.

El siguió tomando hasta acabarse la caja, hasta que volvió a adentro dejándome sola con un porro en la mano.

Decepcionada volví a la pista. 

Sentí una mirada en mi nuca, haciendo que me gire lentamente, moviendo mis caderas. En las sombras, vi a un chico con un aura misteriosa. Si que estaba bueno. Puse una sonrisa coqueta de inmediato, ya tenía el postre de la noche. Desde la distancia, le guiñe un ojo a mi segunda víctima. Se acerco y me susurro en el oído si quería bailar, ya estaba entregado. El olor a alcohol golpeo en mi oreja, dándome escalofríos. Sin aliento, acepte y comenzamos a bailar pegados, pero sin llegar a tocarnos. El mordía suavemente el lóbulo de mi oreja.

Sus manos bajaban lentamente hacia mis muslos pero lo aparte, haciéndome la difícil. Dije que tenía sed y como un caballero, fue a pedir unos vodkas para nosotros mientras yo seguía sintiendo la música dentro de mi. Ni bien se los entregaron, volvió agitando las caderas al compás de la música a la pista.

Me rozó los labios torpemente, pero lo aparte rápidamente. De repente, un puño impactó en su cara, y no era precisamente el mío. El chico tímido e inocente, le había dado tremendo golpe que lo dejó en el piso sangrando. Se notaba que su cuerpo no procesaba bien el alcohol y las drogas.

El chico misterioso no lo iba a dejar así, por supuesto que no, todo lo contrario: le pegó en sus partes y así comenzaron a pelear.

Golpe, patada, otro golpe. Todos habían hecho un circulo a nuestro alrededor. Miraba la escena aburrida hasta que recibí yo una patada.

— ¡Basta! —grité y dejaron de pelear mientras todos se callaban.Se miraron entre sí.

—Ella es mia —dijo el tímido con el labio sangrando.

—No inútil ella es mía.

—No, no, no, se equivocan —dijo una voz detrás de mi. Voltee para ver quien era. Un chico de ojos cafés y pelo castaño alborotado se encontraba en el umbral de la escalera, era el chico con el que me había despertado. Éste me guiño un ojo, me sonrió y agarro al chico tímido del cuello de la camisa, el tenia ventaja, era mucha más grande y robusto. Le iba a pegar y yo no lo podía detener.

— ¡Paren! —grité a sabiendas de que no me iban a prestar atención, y así fue. El chico le pegó y el otro pobre terminó en el piso desmayado. Ahora fue por el otro y le estaba por pegar también a él, pero esta vez no lo iba a permitir.— ¡Dije que pararan! —dije y ahora me hicieron caso. Me dí vuelta con los brazos en jarra y camine a la salida moviendo con firmeza mis caderas. La música volvió a sonar y la gente se puso a bailar nuevamente. A los tres chicos los echaron del bar y yo seguí bailando, buscando una mejor diversión para esa noche de sábado.Algo tiró de mis brazos. Me arrastraban fuertemente. No era consciente de lo que pasaba. Logré distinguir a mis secuestradores, eran hombres grandes y fuertes con trajes de seguridad que me arrastraban fuertemente hacia la salida.

¿Qué estaba pasando?¿Y por qué, si me estaban secuestrando nadie hacía nada y seguía bailando? Yo no había hecho nada malo...por lo menos no peor de lo que todos en el lugar habían hecho.   

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—No hice nada, yo no fui, fueron ellos —gritaba la vieja—. Ellos se peleaban por mí, yo soy inocente.

Los enfermeros hicieron caso omiso a sus súplicas. Pasaron las puertas que decía "Manicomio Lenerco" hasta entrar y sentir el ambiente triste del lugar.

—Está loca —le dijo uno a su compañero.

—Ya lo creo —respondió el otro.La dejaron en su habitación, mientras ella, con un vaso de agua haciendo que era vodka, cantaba una canción a los gritos.

Los de batas blancas salieron burlándose de la pobre vieja y cerraron la puerta. En la puerta, con letras doradas, describía:

Julieta Amazon, la vieja del sueño adolescente. 

El Proyecto Glee 2 [Concurso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora