Capitulo 16 ✔️

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Dominic no podía evitar olfatear como loco, el olor de su Omega estaba en el aire totalmente, estaba obsesionado con ese olor que parecía envolverlo. Parecía tan fuerte y tan excitante

Quería ir a la habitación de su pequeño compañero embarazado y follarlo duro, por más de que quisiera intentar apagar sus sentidos para no seguir olfateando ese delicioso aroma, el lobo en el no lo dejaba y seguía intentando atraer ese delicioso olor a su sensible nariz

El olor parecía solo intencificarse si no estuvieran enojados uno con el otro, hubiera ido corriendo por su compañero, Samuel estaba entrando en celo, lo cual era muy malo, ya que Samuel estaba embarazado el supuso que no entraría en celo

Estaba equivocado

Sus ojos empezaron a ponerse negro lupino, sabía que en cualquier momento iba a enloquecer, parecía que su lobo se estaba volviendo loco, se removió y gruñía con salvajismo, parecía que incluso el no podía resistirse a el olor de su pareja, el lobo en su cabeza por lo general era fuerte y cuando el humano le ordenaba apagar sus sentidos este lo hacía, pero esta vez parecía que el no podía apagarlos por más de que lo intentará

Cuando la puerta de su dormitorio se abrió y entro Samuel sudando y mirandolo con deseó, Dominic perdió el control. Se levantó donde estaba recostado y alcanzó a Samuel tirandolo a la cama debajo de él

- Alfa - Samuel parecía ido, el Omega era quien hablaba - Te extrañé

- También yo pequeño amor - Dijo Dominic y se lanzó por la boca de su compañero, lamiendo y chupando su lengua, Samuel soltaba pequeños gemidos necesitados - Mi hermoso Pajarito

Estaba muy excitado, su pantalón se apretaba fuertemente contra su polla casi hasta el dolor, Dominic sentía que se moría con el olor a su alrededor

Con sus garras desgarro la ropa que tenía puesta su compañero y los suyas propias, Samuel apenas gimoteo un poco, alzando los brazos para rodear su cuello. Empezó a ronronear suavemente en su oído, rodeó con sus largar piernas su cintura y lo abrazo fuertemente contra su cuerpo, por lo menos todo lo que pudo con sus cachorros interponiendose

- Mi alfa - Samuel ronroneo sonando contento. Dominic froto su erección contra la de su compañero complacido cuando soltó un pequeño gemido

Los omegas cuando entraban en celo se ponían muy necesitados de atención, más si estában emparejados, Samuel metió una mano entre ellos y agarro la erección de Dominic empujándola contra su adolorida entrada que desbordaba lubricante natural

- Mi precioso Omega - Dominic arrullo besando sus suaves labios - Te amo, mi pequeño pajarito

Dominic empujó las caderas en un rápido movimiento, Samuel grito de placer mientras se corría entre sus cuerpos - Mmm, bebé, Tan receptivo

Samuel soltó leves sollozos de placer, mientras Dominic empujaba en su apretado agujero, los gemidos y gruñidos se escuchaban por toda la habitación junto con el choque de sus pieles, Dominic en un rápido movimiento enterró sus colmillos en la herida de apareamiento.

Sus embestidas se volvieron profundas y desenfrenadas, con Samuel deshaciéndose debajo de él, gimiendo y gritando su nombre mientras con sus garras marcaba su espalda

- Mi alfa, lo siento - Dijo Samuel entre gemidos y sollozos necesitados

Dominic sin dejar de embestir, saco sus colmillos de la marca y lo besó - Eres mío, no hay nada que perdonar mientras estés a mi lado, si no te vas, no tengo nada que perdonarte

El Omega alcanzó a Dominic y lo empujó a un profundo besó, gimió mientras se corría manchando en medio de sud cuerpos, el alfa siguió el ejemplo de su compañero manchando el interior de su pareja

- Te amó - Dijo el Omega antes de quedarse dormido

- Yo también te amo, mi pequeño amor - Dijo Dominic sintiéndose complacido por fin en semanas, su pareja estaba a su lado y no lo podía creer, sospechaba que el Omega en Samuel se había inducido al celo, ya que el olor de este estaba empezando a volver a la normalidad, como nada hubiera pasado, probablemente quería seducirlo y lo había logrado

Pajarito mentiroso - Fue el pensamiento que el y su lobo compartieron

Aún así estaba contento y ronroneando mientras apretaba a Samuel más cerca suyo, Samuel se sentía tan bien en sus brazos, como si perteneciera ahí

Lo hacía

Lo hacía

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