• Serás mía •

🔹️🔹️Capítulo 18🔹️🔹️

Regina se sentó en el sofá de la sala de estar, temerosa de caerse al suelo si no lo hacía. ¡Leopold estaba muerto! ¡Y Robin estaba siendo interrogado! No pudo haber asesinado a Leopold, simplemente no pudo. Pero entonces recordó lo enfadada que había estado Robin al encontrarla de la manera en que lo hizo después de que Leopold intentara atacarla. Además del viaje que realizó a Vancouver para ver a Leopold, le seguía diciendo que Leopold nunca volvería a estar en sus vidas. ¿Lo había matado?

Por mucho que odiara a Leopold, no lo quería muerto, y si Robin lo hacía ... Era impensable. Él siempre había sido tan amable con ella, tan cariñoso. Pero él también fue muy protector con ella. Pensó en cómo había golpeado a Graham por estar en su departamento ese día. Entonces, justo esta noche, cuando el chico había tratado de golpearla en el club.

"¿Regina?" Will preguntó cuando Regina levantó la vista para verlo allí parado. Ella se había olvidado de que él incluso estaba cerca.

"Regina, sé que todo esto es muy confuso para ti. Pero confía en Robin, él te ama tanto", dijo Will.

"Will, ¿qué pasó en Vancouver?" Regina preguntó mientras Will miraba a un lado de la habitación. "Contéstame, por favor. Tengo que saberlo".

"Honestamente no sé mucho, sé que hablaron con Leopold, pero eso es todo lo que sé", dijo Will.

"Algo tenía que haber pasado para que él estuviera muerto, Will", dijo Regina.

"Lo sé Regina. Robin volverá y él te lo explicará todo", dijo Will. "¿Puedo darte algo para beber?"

La mente de Regina estaba trabajando horas extras en este momento. Necesitaba alejarse para aclarar su cabeza, y estar en esta habitación en este momento no estaba ayudando. Especialmente después de lo que casi había sucedido en el dormitorio. Casi había hecho el amor con Robin. Con un hombre que podría haber asesinado a otro hombre. Al menos sabía que Robin sabía algo sobre lo que había sucedido. Tenía que saberlo, había sido muy reservado desde su regreso.

"¿Regina?" Will dijo que cuando Regina se levantó y comenzó a caminar hacia la habitación, desvió la mirada para no mirar la cama. Fue al armario y comenzó a empacar sus cosas, simplemente tirándolas en su maleta rápidamente, sin importarle cómo estaban.

"¿Qué estás haciendo?" Will preguntó desde la puerta del dormitorio. No entraba en la habitación, se sentía como un intruso por hacerlo, también sabía lo que había sucedido con Robin y Regina hace unos minutos. Podía decir por el aspecto de su boca, por el aspecto de la cama y la habitación cómo todo había sido preparado para una noche para ellos. Obviamente, su amigo había hecho todo lo posible y había planeado una noche especial para ellos. Sentía mucha pena por su amigo, en más de un sentido.

"Necesito salir de aquí por un tiempo", dijo Regina.

"No ... no vas a dejar a Robin ahora, ¿verdad?" Will preguntó.

"Tengo que aclarar mi mente y hacer todo bien", respondió Regina. Pensó en la mirada en los ojos de Robin cuando él había tratado de hablar con ella, la desesperación allí. En ese momento ella sabía lo que tenía que hacer, por sí misma. Fue a su bolso y sacó su teléfono celular.

"¿A quién estas llamando?" Will preguntó.

Regina no respondió, solo levantó su nombre y dejó que sonara. En el tercer timbre, finalmente respondió.