Level Up, My Love 👾🎮🎸🎈❤️

Capítulo 4. Te Amo

Sangre.

Es todo lo que pude pensar cuando mi piel se rasgó y vi estrellas.
Bueno, no vi estrellas.

Vi lucecitas. Como cuando ves al sol fijamente en un concurso de miradas y luego cierras los ojos con fuerza y ves tonos azules y púrpuras.

Así. Luego,en mi ojo izquierdo todo se torno rojo.
La sangre me escurrió por la cara. Me entró en el ojo volviendo el café de mi iris un tono verde grisáceo bastante lindo de no ser por el rojo.

Mi cabeza falló. Arriba era abajo.
Luego recuerdo quedarme de pie. Después del golpe. Alguien grito "Paren el juego"

Y ahí fue donde mi espalda chocó con el suelo seguido del resto de mi.

Caí. Fulminada, mareada y sangrante al suelo.
Recuerdo un momento. En el que todo se borró.

No sabía dónde estaba. Qué pasaba. Quién era.

Fue el mejor momento. Luego abrí los ojos. Muchos rostros preocupados. Y él tuyo entre conmocionado y asustado.

Llorando.

Y se me encogió el corazón porque supe quién eras y fue el primer pensamiento racional post-golpe.

No quería verte llorar. Intenté hacerte reír.

-¿Perdimos, Stark?-dije estúpidamente.
Tu reíste en pleno sollozo. Las demás también. Y me sentí mejor.

Me abrazaste y algo goteaba de mi hacía ti.

Mi sangre. Y bueno no me espante. Me reí de mi propia estupidez. Me dijiste "Todo va a estar bien".

Ojala hubiera sido cierto.
Me llevaron al Sanatorio. Sangrante y riendo. Porque recordé que esa mañana mi compañera se había ofrecido entusiastamente a depilar mis cejas. A lo que yo respondí

"Aleja esas pinzas de tortura de mi cara ahora mismo, Guanajuato o te juro por el Almirante que te ahogo en la Fosa".

Y yo me la depile sola. De un madrazo.
Hilaraaante. Me reí como loca entrando al Sanatorio.

Ahí me colocaron una gasa, hicieron presión, me limpiaron la sangre que ya había empapado el cuello de mi camiseta gris de los Arctic Monkeys.

La lavaría antes de regalarla eso seguro.

Y el médico tomó unas pinzas, abrió aún más mi piel y vertió alcohol etílico puro en la herida para desinfectar.

Fue uno de los cinco peores momentos de mi vida.

El ardor. Se me nubló la vista. El alcohol entró en mi ojo. La piel me ardía a un punto tan atroz que sentí la cabeza partirseme por la mitad.

Y yo. Bueno yo, gritaba. Gritaba como si me estuvieran matando.

-No grites tanto, Bello.

Lo único que hice fue morder mi collar y permitir que me raspara la herida una y otra vez hasta que quedara limpia.
Quería golpearlo. Pero eso hubiera sido maleducado ya que me estaba "curando".

Luego vinieron las puntadas.

Le tengo miedo a tres cosas en esta vida.

El rechazo, las situaciones sin salida y a las putas agujas.

Sentir esta entrando en mi piel fue... Bastante educativo. Ya no tengo miedo de ellas. Casi les tengo respeto.

Deliré. Tenía una contusión.

Y empecé a hablar de mi sentimientos.

Lloré cómo una niña cuando la enfermera que me estába cosiendo preguntó quién era esa persona a la cual yo nombraba tanto y a la cual quería regalarle mi camiseta que ahora estába empapada en mi sangre.

Yo le conté. Le conté de esa persona a la cual amaba y rogaba con tanta desesperación ver de nuevo.

Y ella dijo: Espero la veas de nuevo.

Yo apreté los dientes en una sonrisa llena de sangre y dije: Espero que si.

Ahora tengo una cicatriz. Mi playera es tuya. Mi sangre circula de nuevo. Y mi corazón sufre.

Tan tan.

Así es. Esta jodido esto del amor.