Celos (parte 1)

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Se sentía extraño, la relación que tenía con Karai iba progresando con una película juntos, alguna misión riesgosa de la que salían vencedores e incluso dándose mutuamente obsequios discretos cuando eran sus cumpleaños, aunque no habían llegado más allá por su decisión

Donatello no se sentía preparado, no aún y Karai lo respetaba aunque no es como si hubiera dejado de pretenderlo

Aunque si no eran nada, ¿por qué se sentía extrañamente irritado por un ninja del clan del pie que estaba volviéndose muy cercano a la kunoichi?

Kuroki se hacía llamar y tal como sonaba su nombre provenía de Japón, recomendado especialmente por Shinigami. Servía fielmente a la líder y se le podía ver casi siempre juntos, al parecer era su secretario asignado o algo por el estilo

-Hey moradito- lo llamó Karai con el nuevo apodo que le había puesto desde la distancia, traía una bolsa de cartón la cual seguramente tenía el almuerzo de ambos, una sonrisa adorno su rostro mientras la figura femenina correspondía el gesto

.....

Nuevamente estaban juntos aunque realmente no estaban haciendo una actividad en conjunto. Él estaba realizando unos experimentos mientras que su acompañante leía un libro de fantasía de trolles o algo así

El teléfono de la kunoichi empezó a sonar y para cuando contesto la voz inconfundible de aquel ninja se escuchó con fuerza

-mi líder, mi flor la más bella entre todas las lunas, el delirio de mi mente y la perdición de mi corazón...-

-al grano Kuroki, estaba ocupada-

Donatello dejo salir una sonrisa de superioridad, esa era su Karai

-y de suma inteligencia cabe destacar- repuso el ninja asumiendo una pose más seria- mi señora él ha aceptado la oferta y la cita ha sido programada dentro de dos días a las 9:00 de la noche, ¿confirmo?-

-hazlo y pide a Shinigami que reuna mi vestuario y equipo necesario en caso de que algo salga mal-

-así será mi señora-


Para cuando le cortó la llamada vio por el reflejo del mismo teléfono como la tortuga le veía con atención y seriedad, ya no tenía ni un atisbo de diversión como momentos antes. Decidió entonces aprovechar que sus ojos estaban puestos en ella para decir sin pudor

-no serás google pero tienes todo lo que busco-

Karai dió la vuelta sonriente aún con sus facciones seductoras a la vista, Donatello por su parte fingía trabajar en su experimento, aunque la pelioscura notó que ni si quiera hacía mediciones de las sustancias además del sonrojo ya usual plasmado en su rostro


-no te preocupes Donnie- nuevamente con su voz cálida y aterciopelada se dirigió a la salida siendo seguida por la mirada del mutante -sabes que soy tuya- le guiño para después cerrar la puerta lentamente para después agregar -aún-

Para cuando la tortuga quiso de nuevo conectar su mirada con ella, la líder se había retirado, con un poco de presión en su pecho se cuestiono a quien vería y si estaría bien, si era algún pretendiente o si ya la estaba perdiendo cuando ni siquiera había correspondido

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