Realmente Amor

Capítulo Dos

La última semana mi madre y yo hemos arreglado la casa juntas. Papá trabaja hasta tarde pero nos ayuda con las cosas pesadas.

Mi papá es un hombre alto de aproximadamente 1.80 m de altura. Tiene el cabello castaño claro y los ojos color verde, es de contextura delgada y de tez Blanca. Es muy muy gracioso y amigable.

Mi mamá tiene el cabello rubio, sus ojos son  color miel y su piel blanca. Mide aproximadamente 1.65 m siempre a sido gordita, sin embargo, mi papá dice que jamás se había dado cuenta.

La historia de amor de mis padres es la más real que conozco.

Yo, por otro lado, tengo 16 años, mido 1.60 m, mis ojos son café claro, mi cabello es castaño claro y una extraña mezcla entre ondulado, lacio y churon. Desde que tengo memoria he sido gordita y bajita.

........

Ya era viernes y me levanté como de costumbre. Durante las vacaciones mi mamá me permitía dormir hasta la hora que yo quisiera. Me acerqué a la ventana y vi por primera vez a mi vecino. Era un chico alto y más o menos delgado, no lo distinguí muy bien.

Baje a la cocina por una manzana y note que mi mamá no estaba.

- ¡Mamá!- grité. Pero nadie respondió.

Iba a subir cuando...

- Se lo agradezco muchísimo.- dijo mi mamá.

Me quedé en medio de la escalera para ver con quién hablaba.

- No hay de que. Si nos necesita por favor avisenos.- Le dijo una señora, tenía una voz dulce y amable.

- Oh muchas gracias. De igual manera si podemos ayudar en algo. Aquí estaremos.-  respondió mi mamá.

Cerró la puerta y me dirigí a ella.

-Hola mami-

- Hola pequeña, por fin despertaste.

- ¿A dónde fuiste?

- Fui a ese hermoso mercado que vimos, quería ver que tal y me encantó. Todo esta fresco y es muy limpio.

- ¿Y esa señora?

- Nuestra vecina, me ayudó con las cosas y la invité a una cena mañana con su familia, al parecer tiene dos hijos, una pequeña de 12 y un jovencito de 17. Ya sabes para conocer a los vecinos y eso.- me dijo mientras guardaba las cosas en la nevera.

- Oki.- le respondí y me acerqué a darle un besito en la mejilla.

Subí a mi habitación y me lanzé a la cama. Me pregunto si será el chico al que vi. No lo sé, en realidad no soy una persona tímida pero me cierro completamente a las personas que se deciden a verme como un monstruo, como si el hecho de ser gordita me transformara en menos. Espero y no sea ese tipo de persona.

Durante el día me la pasé en mi cuarto escuchando música y viendo series.

Escuché la puerta abrirse y el saludo de mis padres lo que significaba que había llegado papá y salí a abrazarlo.

Baje las escaleras gritando. - ¡Papá!

- Hola pequeñita- dijo papá mientras me besaba en la frente.

Mi mamá tenía preparada la cena y nos sentamos todos en la mesa. Como de costumbre, era el momento en el día en el que comentábamos de todo. Era nuestro momento.

Mi mamá le contó todo lo que había hecho hoy y le comentó sobre la cena con los vecinos.

A mi papá le encantó y sobre todo le gustaba que la gente que nos rodeaba sea gente buena, ya que, nosotras estábamos solas la mayor parte del día.

Después de comer mi papá lava los platos, y yo le ayudo, mi papá dice que es lo mínimo que puede hacer por mi mamá después de que ella lo hace prácticamente todo.

Cuando terminamos todos nos preparamos para dormir.