El laberinto {Jade y Harry}

Capitulo 21 "La noche de tributos"

-¿Y ya tienes..... pareja .... para La noche de tributos?-pregunto Kiara a Jesy.

-No, nadie me ha invitado-dijo Jesy mientras se colocaba una venda en la mano derecha, ya que en unos de los simuladores se lastimo gravemente la mano.

-Osea ¿Qué estas libre?-pregunto Brad.

-Si, igual mucho no me gusta esto de la fiesta-

-¿Por qué?

-No sé sera que nunca fui a una-dijo Jesy viendo al joven Brad.

-¿Quieres ir conmigo?

-Claro-dijo Jesy con una sonrisa. Las puertas del ascensor se iban a cerrar pero una mano se lo impidió. Era Harry y Jade.

-Hasta que se deciden llegar-dijo Perrie.

-Vamos, tórtolos no tengo todo el día-dijo Jesy. Los dos jovenes entraron con una sonrisa.

-Y al final, ¿De que sexo es el bebé?-pregunto Brad.

-Son mellizos, nena y nene-dijo Jade con una sonrisa.

-Y si no tenía dos hijos después de como le dío Harry iba ser milagro ¿No?-le susurro Perrie a Jesy y esta asistió.

-¿Cómo los llamaran?-pregunto la pequeña Julia.

-La niña se llamara Phoebe Indigo......-dijo Jade.

-Y el niño Edwards Mikel-completo Harry.

-¿Indigo?-pregunto Nahuel-Como la abuela Indigo-dijo mirando a su hermana.

-Si pero la bebé va ser más linda que la abuela Indigo-dijo Julia con una sonrisa.

-Eso es cierto-dijo Nahuel haciendo que todos sonrieran.

-¿Puedo tocar la panza?-preguntaron los dos pequeños hermanos-¡No, yo!..... ¡No, yo!..... ¡Te dije que yo!-gritaban los niños.

-Pueden tocarlo los dos-dijo Jade para tranquilizarlos, y funciono. Jade se levanto un poco la remera, los dos hermanos se acercaron a la panza de la futura madre y lo tocaron.

-No se mueven-dijo el pequeño Nahuel.

-Claro que no tonto si eso pasa cuando la panza es mucho más grande-dijo Julia mirando seriamente a su hermano.

-¿Cómo la panza de la tía Claudia?-pregunto el pequeño.

-No creo que tanto-dijo la pequeña Julia. Las puertas del ascensor se abrieron indicando que alguien se tenía que ir-Hay que irnos-comento la pequeña. Los hermanos se miraron y luego miraron a la panza para después darle un besito.

-Adiós bebés-dijeron los hermanos-Adiós a todos-dijeron para después salir del ascensor. Las puertas de dicho lugar se cerraron y siguió subiendo.

-Aww son un amor-dijo Jesy embobada por lo que acabo de ver.

-Son tan tiernos-dijo Perrie mirándolos. Francis vio a la joven de melena rubia, mejor dicho la contemplo. Le encantaba todo de ella, su hermoso pelo, sus ojos color celeste cielo y esa hermosa sonrisa acompañados con esos labios tan finos y delicados. Hechizado por la imagen de la joven Edwards, se acerco lentamente a ella hasta estar a su lado, suspiro profundo y preparo el dolor que podía llegar a sentir en su mejilla como también en su corazón.

-Perrie-susurro, pero la joven de melena rubia no le dio importancia ya que no escucho nada, ella solo seguía charlando con sus amigas. Francis vio que en cualquier momento llegarían al piso en donde se hospeda la joven Perrie. El joven respiro hondo y apretó el botón de emergencias del ascensor. Todos se miraban con rareza, buscando al culpable, pero no era necesario intercambiar miradas, Francis dio la cara-Lo siento.... pero necesito.... hacerlo-dijo nervioso. Con algo de nervios y miedo miro a la joven Edwards-Se que si te digo esto..... por ahí me.... mates, en fin yo..... yo....-suspiro hondo-¿Quieres ser mi pareja en.... La noche de tributos?-dijo con mucho nerviosismo, la joven Perrie lo vio con odio, este supuso cual iba ser la respuesta y bajo la cabeza-Perdón-dijo para después apretar el botón de emergencias nuevamente, el ascensor empezó con su curso. Las puertas del ascensor se abrieron indicando que ya era el destino de algunos de los chicos, en este caso de Perrie. La joven se coloca enfrente de Francis, este la mira y ella de manera rápida lo tomo del cuello de la remera y lo beso. Un beso que para ella le hizo recordar tanto a su viejo amor pero que estaba dispuesta a olvidar y para él un beso que tanto soñó con otras chicas pero que ahora se cumplía con la chica correcta. Las puertas del ascensor se iban a cerrar pero el pie de Perrie lo detuvo. Los dos jóvenes se separaron y esta lo miro con una sonrisa.