Las caras de la luna

Una nueva amenaza

- ¡Jack, despierta...! -me zarandean con fuerza- ¿Otra vez durmiendo en clase? Menos mal que no te ha visto la profesora.

Me despierto poco a poco y miro hacia arriba.

- Perdona Shaima, no volverá a pasar.

Me levanto de mi asiento y me dirijo hacia la puerta, pero Shaima me coge del brazo antes de salir.

- Como delegada debo decirte que tu actitud no es bastante buena últimamente, pero...como amiga tuya y también de Mía, te entiendo. Fue muy duro asimilar lo de su accidente...

Mira hacia abajo con aire de tristeza. La cojo por los hombros y le sonrío.

- Creo que a Mía le gustaría que sonriéramos por ella.

- Gracias, Jack. -sacude la cabeza- Pero ya sabes, en clase estate atento por favor.

- No te preocupes, lo prometo.

Me alejo por el pasillo ensimismado en mis pensamientos cuando, de repente, choco contra alguien.

- Lo...lo siento, ¿estás bien?.

Miro hacia la persona en el suelo y, ¡se trata de Kate! La ayudo rápidamente a levantarse.

- Kate...¿qué haces aquí? ¡Estamos a plena luz del sol!

Kate me sonríe y me besa en los labios.

- Quería verte, bobo. Y no te preocupes por la luz del sol, puedo soportarla.

Sonrío y y me apoyo en el alféizar de la ventana contemplándola.

- Estás muy gu...

De repente se oye un ruido como de ventanas rompiéndose en mi clase. Salgo corriendo y me encuentro a un hombre alto y fornido llevándose en volandas a Shaima, que parecía inconsciente.

- ¿Qué crees que estás haciendo? -corro hacia él hecho una furia-.

De repente gira la cabeza y con una mirada me deja paralizado...'no puede ser...'-pienso-.

- No...no eres humano. Eres un licántropo, ¿por qué haces esto?.

Me mira largamente hasta que al final responde.

- Su sangre es muy valiosa, con ella nuestro clan ganará un gran poder y no queremos que los vampiros se acerquen siquiera. -mira largamente a Kate- Jamás la tendréis, chupasangre. No dejaremos que vuelvan a haber híbridos.

Salta por la ventana y se aleja corriendo.

- ¡Shaima! -grito y me dispongo a seguirle, pero Kate me agarra del brazo-.

- Esperemos al anochecer, Jack. Ellos no podrán convertirla aún, la salvaremos antes.

- Está bien. -pongo cara de enfado- No dejaré que le vuelva a pasar algo a un amigo mío, lo juro.

Agarro a Kate de la mano y nos encaminamos hacia su casa para contar lo sucedido.