Pesadilla

2: Hogar

-con que asi se siente el viento- comento David mirando a su alrededor, la ciudad era demasiado grande, mas de lo que recordaban

-tengo frio- comento Wanda antes que su dientes sonaran al tiritar

-debemos buscar algún lugar para dormir- dijo Lorna

-no tenemos ni un solo centavo como para buscar algun lugar- aclaro Pietro que sujetaba de la mano a una Wanda que aun se notaba asustaba aun cuando tenia a sus cuatros hermanos junto a ella y podría estar segura con ellos a su lado

-yo si tengo dinero- soltó una risita Peter

-de donde sacaste dinero?- pregunto Lorna mirando a Peter que estaba a su lado izquierdo -entramos a las instalaciones como unos muertos de hambre y salimos como unos fenómenos, pero lo único en que estamos igual a como entramos es que no tenemos ni una ciruela-

-robe las billeteras de los soldados y bien que les pagaban a esos desgraciado- Peter saco de los bolsillos que tenia entre pantalón y chaquetas unas 7 billeteras

-yo también tengo algunas- David saco almeno otras 3 de sus bolsillos, Pietro tomo todo y contó el dinero

-hay por lo menos mas de 800 mil dolares- dijo Feliz el peliblanco -hay  para comer y arrendar una habitación por un par de noches- los 5 mostraron grandes sonrisas -eso si, el dinero lo administrare yo- sentencio Pietro, sus hermanos asintieron -vamos a comer algo?-  comento feliz el mayor 

-es hora de dejar esta pocilga de lado- Lorna miro nuevamente el cielo.

algo sabían a la perfección estas 5 personas, la vida ya no volverá a ser la mismas, ya no eran los niños indefensos que caminaban por las frías calles de Sokovia  en invierno o en verano cuando el sol les cocinaba el cuerpo, ahora ya eran adultos y con poderes bastante extraños, sus cuerpo habían cambiado tanto interna como externa, aunque a simple vista solo resaltaba los llamativos colores en sus cabellos, un Blanco con toques de negro en Pietro, un rojo apagado en Wanda, un color plata en Peter, verde con negro en el caso de Lorna y finalmente un rubio bastante opaco en David.

-se siente raro que tanta gente nos este mirando- dijo David caminando a la par que sus hermanos -acaso tengo algo en la cara que me miran tanto?- comento algo asustado el chico al sentir nuevamente las voces que lo hacian sentir mas nervioso 

-cálmate David- dijo Pietro que miraba a su hermano -mira tus manos- el menor hizo caso y vio que estaban rodeadas por fuegos 

-mierda-  dijo David e hizo las llamas desaparecer 

-genial, el plan de pasar desapercibido le fue al diablo por tu culpa- Lorna le dio un pequeño empujón a David que este respondió pero de manera mas juguetona

-No peleen- dijo Wanda e inmediatamente Lorna y Devid dejaron de empujarse, Wanda pudo localizar un restaurante -comamos aquí- como era de esperarse en el momento en que los hermanos entraron se llevaron las miradas de la mayoría de personas pero a diferencia que las miradas que habían captado en la calle estas eran bastante diferentes, eran en su mayoria de hombres y mujeres jóvenes que los miraban, acompañados con unos susurros 

-me siento muy extraña con que tantas personas me miren ¿acaso no tienen una cosa mas interesante que hacer?- gruño Lorna algo estresada

-tratemos de ignorarlos- recomendó Peter acercándose a una mesa donde se pudieran sentar los 5 -bueno y que comemos?-

-lo que ustedes quieran, hemos pasado 7 años encerrados y comiendo cosas de dudosa procedencia que mas de una vez me intoxicaron demonos aunque sea un gusto- dijo Pietro mirando a su familia, estos asintieron y pidieron un típico menú que disfrutaron