Over Again [L.T.]

Capitulo treinta cinco

Eran casi las doce y Louis no podía con el sueño, lo miraba y se veía tan tierno. Pero a la vez me sentía mal por él, pues dijo que no se iría hasta que las bebes nacieran, sin embargo mama estaba aquí pero aun así, el no se quería perder nada con respecto al nacimiento

— Louis, vamos descansa. Las bebes no nacen hasta mañana — me estire un poco y acaricie su rostro. Tenía ojeras y lucia cansado
— No...Yo no... Me puedo perder nada—bostezo
— ay Louis, estas que te mueres del sueño
— no... Es verdad— dijo mientras se acomodaba en la silla
— si lo es— reí
— no yo solo descanso

Louis se había quedado dormido, mientras que mama a un lado lo miraba, nunca se llevaron bien, pero mama sabia disimular, era decente, y no era grosera con Louis.

— Yo que pensé que sería un descuidado—burlo

— Ay mama—reí

— Dejo mi orgullo a un lado... y te digo que no lo es, es mas creo que ese tonto será un buen padre

— Después de todo... ¿ por qué no te agrada?—cuestione

— Porque Louis no ha sentado cabeza... ni sentara, además es infantil, y tu lo consientes mucho

— Si, ese es el Louis que me gusta

— Realmente no se que le viste—bufo y yo solo reí. Cuando amas a una persona realmente no le ves defectos.

Se dieron las dos de la mañana, y fue lo peor, las contracciones se hicieron presentes de nuevo. Una atrás de otra, mama salió en busca de un medico mientras que yo me quejaba. Estremecí a Louis y este abrió sus ojos, lucia confundido.

— Louis. Las bebes ya van a nacer—gruñí
— ¿qué? — dijo sorprendido, ni el mismo se lo creía
— si Louis ya vienen

Después de unos minutos la doctora llego, una chica aproximadamente de unos veinticinco años, alta de tés morena con el cabello liso, con un corte tres cuarto, su contextura delgada y proporcional la hacían lucir muy bien.

— muy bien verónica soy la doctora Matty y atenderé tu parto—se presento
— si— dije mientras hacia un poco de fuerza y respiraba rápidamente
-— ok coloca tus pies aquí, esto ayudara a abrir tus piernas, estas en buena forma, será un parto totalmente fácil— dijo mientras acomodaba mis pies en unas varillas que sobresalían de la camilla
— no lo creo— gruñí
— si claro que será fácil, tu solo relájate, estas en buena forma— me brindo una sonrisa y luego se puso unos guantes de látex— ¿ tú debes ser el padre? — Pregunto refiriéndose a Louis
— sí, yo soy el padre—contesto el emocionado
— ok papa, tu estarás al lado de ella sosteniendo su mano—indico
— si está bien
— ok ¿rony sientes presión en tu vientre? — Pregunto la doctora
— un poco, solo un poco

Ella me reviso, y fueron los segundos más horribles de toda mi vida. Luego abrió mis piernas un poco más. Sentía que iba a estallar en cualquier momento.

— verónica empezaremos. Quiero que aprietes la mano de Louis cuando sientas mucho dolor— dijo ella con un tono tranquilizador, era amable y comprensible

Yo solo asentí con mi cabeza y ella sonrio. Tome las manos de Louis, pues aquí venia la mejor parte.

Pujaba cuando ella me lo decía, luego descansaba por diez segundo hasta nuevamente pujar, la presión en mi feminidad era espantosa, era como si t estuviesen partiendo en dos.

Pero era gratificante, después de quince minutos nació la primera gemela, sentí su llanto y mis ojos se llenaron de lágrimas. Una enfermera se la llevo y atendió para cambiarla, mientras que yo seguía con la labor. Volví a pujar nuevamente, una que otra lagrima se me escapaba, pues el dolor era jodidamente insoportable, sentí un vacio en mi y luego un llanto, todo había terminado.

Me desplome sobre la cama y respire profundamente. Gire mi cabeza y ahí estaba Louis. Tenía una bebe en sus brazos mientras la arrullaba. Luego llego una enfermera y le entrego la otra. El estaba completamente feliz. Camino hasta mí y se poso a un lado.

— Gracias Rony — susurro Louis
— Louis esto fue un trabajo de ambos—reí
— si. Son perfectas, me has dado el mejor motivo de mi vida—sonrio y volvió a posar la vista en las bebes
— sí que lo son. Son producto de algo verdadero
— Jace y trace Tomlinson ryan bienvenidas

Pase el resto de la mañana en la clínica mientras reponía un poco de fuerzas. Luego me dieron salida. Mama dijo que me llevaría en su auto, pero Louis ya se había ofrecido antes así que me fui con Louis. Tenía que estar con él.

— son hermosas— dije mirando a las bebes en la parte trasera del auto
— si, son mis nenas y cuando sean adolescentes ningún tonto romperá sus corazones— rio con aires de grandeza
— ya piensas eso... y es lindo
— sí, tengo que pensar en el futuro, supongo
— que lastima aun no abren sus ojos. No sé el color— dije un poco frustrada
— ten calma dentro de unos días u horas los abrirán— contrarresto el con tranquilidad
— conozco este camino— exclame
— ¿si? — Alzo sus cejas y rio
— si claro cómo olvidarle ¿por qué vamos allá? —Cuestione
— mmm no lo sé...
— ¡Louis! — hice un berrinche y el solo reía
— si quieres averiguarlo espera a que lleguemos—ronroneo, y eso lo hacía lucir sexy
— ¿compraste una casa por donde teníamos nuestra casa? — Pregunte
— compre una casa...si. Si la compre...
-— entonces...

Y si, conocía el camino perfectamente, ese camino daba con nuestra antigua casa. Louis se estaciono, bajamos a las bebes, entramos, y en toda la sala había un letrero que decía.

"Bienvenida familia Tomlinson"

— ¿Te gusta?—pregunto
— me encanta
— ¿podríamos ser una familia de nuevo?
— Sí, me encantaría
— te amo ¿me amas?
— Más que a nada tu y las gemelas son mi vida
— yo te amo mas

Mire detalladamente todo y estaban los muebles que él me había hecho escoger. Todo lucia bien. Deje a las gemelas con Louis y empecé a recorrer la casa, en el pasillo que daba a la sala de descanso, estaban todas las fotos del foto estudio. Además tenía ese olor peculiar a pino, que siempre solía mantener con el ambientador. Subí al cuarto y en el de nosotros estaba una foto enmarcada de nuestra boda y por otra parte estaba la foto del matrimonio de jess donde nos estábamos besando. Pase a los demás cuarto y me encontré con el de las gemelas que era azul con estrellitas amarillas.

Baje de nuevo y ahí estaba Louis hablándole a la bebes. Lucia tierno, era un buen padre.

— Creo que lo he visto todo—murmuré

— Lo mejor para las mejores

— Sabes... creo que cuando encuentra a tu alguien especial... enseguida lo sabes...

— ¿ de qué hablas?—pregunto él y luego soltó una pequeña risa

— De que... el primer día que te vi... cuando fui a hacer el trabajo con jess. En ese instante me gustaste

— Y yo supe que eras para mi

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