Naruto no tiene como costumbre meterse en la vida de los otros, pero la situación lo ameritaba. Una apuesta por ver quien conquista a la solitaria Sakura Haruno: si el joven rebelde Sasuke Uchiha o el heredero Neji Huygga. La escuela necesitaba algo...
Disclaimer: Naruto es propiedad de Masashi Kishimoto, pero la historia es de mi autoría.
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Capítulo 8. Estúpidos dulces.
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El fin de semana había pasado nuevamente y de forma inquietante. No había tenido ningún plan en especial y se arrepintió de no haberle pedido a Sakura su número de teléfono, así quizá hubiera podido invitarla a salir, ir al cine, a tomar un helado, hacer algo juntos.
Si bien pudo haberla contactado mediante su correo electrónico para pedirle una cita, eso habría sido muy raro, incluso formal y sobre todo no era su estilo, al final, solo lo utilizó para enviar la parte de su trabajo que le tocaba. En realidad, había contratado a una persona para que se encargará de la investigación, porque siendo sincero, no se encontraba con los ánimos suficientes para trabajar y tampoco quería quedar como una irresponsable frente a ella.
Además, por su mente no había dejado de rondar la última vez que la vio, dificultándole concentrarse en otras cosas. Esa donde Sakura lo encontró con una chica en una situación un poco comprometedora y que, lo más probable era que ella hubiera malinterpretado, pues realmente solamente había estado conversando con aquella chica (sí, como no). Pero la pelirrosa obviamente no le iba a creer, después de todo él estaba abrazando a aquella muchacha y sabiendo que su comportamiento había sido un error, realmente se sintió como un estúpido después de eso. Ni siquiera el que ella lo saludará, a pesar de todo, logró calmar la sensación de incertidumbre en su pecho.
El analizar lo que había sucedido le sirvió para prometerse que no volvería a tener ese tipo de gestos con otras chicas, no quería que ella lo volviera a descubrir y pensara que era un despreciable playboy, que sí, lo era, pero no ya lo quería serlo más.
Pero, sin duda lo que más le perturbó durante ese fin de semana fue recordar haberla visto salir de la escuela al lado del imbécil de Neji Hyugga.
Después de que ella lo encontrara con aquella chica ese día, él se había despedido y había tratado de buscar a Sakura, sin embargo, la había perdido de vista y no lo logró, así que decidió esperarla en la entrada de la escuela para abordarla cuando saliera y fue grande su sorpresa al ver que no se iba sola, sino acompañada de la persona que había osado tener las pelotas suficientes como para retarlo.
No supo cómo reaccionar en ese momento, pero sí reconoció la sensación de los celos acumularse en su pecho cuando notó la manera en que ella lo miraba, la forma en que el chico la veía a ella y como caminaban uno al lado del otro con sonrisas en sus rostros. Incluso parecía que habían combinado sus ropas, pues él llevaba un abrigo negro y ella uno blanco, la imagen era tal que parecían casi una pareja ¡Una maldita pareja!
Sus planes de hablar con ella y tratar de explicarle lo que había visto se habían ido totalmente al carajo después de eso y por ello había montado su recién arreglada motocicleta de regreso a su casa, completamente iracundo.
