En la esquina de la habitación se encontraba Harry con una sonrisa socarrona mientras sostenía su cigarillo con dos dedos y observaba el pequeño cuerpo del castaño bailar. Le dio una calada y soltó el humo guiñándole el ojo cuando sus ojos conectaron.
Louis se acercó a pasos apresurados, con sus puños apretados y el ceño fruncido.
"¿Qué haces aquí?"
"Hola a ti también." Harry le sonrió mordiendo su labio y tiró el cigarrillo pisándolo con la punta de su bota.
"No estoy de humor para tus bromas Harry." Louis gruñó tomando su brazo y tirando de él con fuerza hasta que salieron de la ruidosa habitación. "¿Quien carajos te invitó?"
"Lottie." Tiró de sus tirantes hasta que sus pechos se juntaron, el rizado tomó su mentón. "¿Y estos?"
"La fiesta es formal imbécil y tú llegaste con tus pantalones rotos y tu camisa deslavada." Louis movió su rostro y lo empujó cruzándose de brazos.
"Te voy a follar con ellos puestos más tarde." Harry se acercó y lamió su mejilla mientras reía. "Felicita a tu novio de mi parte, guapo."
Louis chilló cuando sintió la nalgada y miró la ancha espalda del rizado desaparecer por la salida. Apretó los ojos intentando calmarse y limpió su mejilla con furia antes de suspirar y regresar a la fiesta.
"Hey Lou, ¿dónde te metiste?" Los amorosos brazos de su novio lo rodearon y Louis sintió otra punzada de culpabilidad.
"Tuve que ir baño." Se giró a verlo y tomó sus mejillas. "Feliz cumpleaños otra vez Kyle."
Kyle le sonrió besando sus labios.
"Creo que vi a tu amigo Harry cerca del bar hace un rato." El rubio le peinó el cabello con una mueca.
"Harry no es mi amigo." Rio fingido y luego lo llevó hasta la pista. "Es mi canc..."
"Tu canción favorita, lo sé Lou."
—
Se escabulló de entre sus brazos y caminando silencioso sobre sus puntas bajó las escaleras. Con cuidado se colocó sus vans y mordió su labio cuando la puerta de la entrada soltó un chirrido y esperó, ningún otro sonido se escuchó. Louis cerró con llave y abrazándose a si mismo caminó hasta al rizado que lo veía apoyado en la puerta de su auto.
"Tardaste mucho." Le dijo estirando sus brazos a él para abrazarlo.
"Estaba cansado." Susurró parándose de puntitas sonriendo cuando los cálidos labios del rizado chocharon con los suyos.
"¿De qué? ¿De bailar y tomar vino tinto?" Rodó los ojos burlón y le abrió la puerta. "Hace frío, sube."
"¿A dónde vamos?" Preguntó cuando Harry entró al auto.
"Son las dos de la mañana Louis ¿a dónde crees que vamos?" Le apretó el muslo antes de encender el auto.
Louis se sonrojó sintiéndose repentinamente acalorado.
—
Era una mierda de persona, sabía que lo era. Kyle era un buen chico, amable, atractivo, caballeroso, el novio perfecto. Pero Louis no podía se resistir al rizado de ojos hipnotizantes y sonrisa seductora. No cuando le enterraba los dedos en la cadera mientras lo jodía con fuerza.
Louis gimió entre sus labios rodando sus caderas, sus piernas ya estaban entumecidas y sentía el orgasmo cerca, tan cerca.
Harry tomó su pene y acarició la punta sonriendo, Louis arqueó la espalda y se corrió en su mano.
"Precoz." Se burló en medio de un gemido.
"Idiota." Jadeó mientras saltaba en su regazo, sus manos se resbalan en el pecho tatuado del rizado. Harry lo sostuvo por la cintura hasta que se corrió.
Louis gimió dejándose caer sobre él, los espasmos lo hacían estremecer y soltar suaves jadeos. Los dedos de Harry le acariciaron la espalda.
"No trajiste tus tirantes, una pena." Susurró buscando con la otra mano un cigarrillo en su mesita de noche.
"Después." Louis le besó el pecho cerrando los ojos. "No fumes." Se quejó.
Harry soltó una carcajada y negó besando su cabeza.
"¿Cómo sabes que eso buscaba?"
"Siempre lo haces y odio que lo hagas, mi ropa se impregna y me hacen preguntas." Louis alzó la cabeza y lo miró con los ojos entrecerrados.
"Duerme."
"T-Tienes, tienes que llevarme a casa." Gimió cuando Harry salió de él y soltó un suspiro, satisfecho al sentir los besos de Harry en el interior de sus muslos.
"No, duerme conmigo." Harry buscó sus boxers por la habitación desordenada y limpió su estómago tomando una toalla caliente para limpiar a Louis.
"Kyle." Murmuró entre dormido.
Harry sonrió sintiéndose tan orgulloso.
"¿Qué con él?" El rizado rodó los ojos pasando el bóxer de Louis sobre sus gruesos muslos, se le hizo agua la boca. Louis era tan atractivo.
"Está en mi casa." Se acurrucó sobre la almohada soltando un suspiro.
Harry apretó la mandíbula. Louis no era su novio, no era nada suyo, no tenía por qué molestarse cuando el otro era él. Pero lo hacía, de un momento a otro Harry quería a Louis a todas horas con él y sólo con él.
"Arriba." Intento sonar lo más normal posible y no lleno de rabia y frustración. Louis parpadeó alzando sus brazos a él.
"Cárgame."
"Estás en bóxer." Harry se puso un suéter y rebuscó entre el tiradero su pantalón de pijama.
"Vísteme." Louis le sonrió coqueto.
"Eres tan mimado, no te soporto." Harry bufó apretando sus labios para no sonreír.
Louis se encogió de hombros sonriendo cuando Harry le pasó un suéter suyo por la cabeza colocándole el gorro, tiró de los extremos y lo besó.
Diez minutos después, el auto de Harry aparcó afuera de su casa. Un silencio se formó como lo hacía siempre que tenían sus encuentros por la madrugada.
"Nos vemos mañana." Susurró Louis con repentina timidez abriendo la puerta del auto.
Pero antes de salir la voz de Harry lo interrumpió.
"¿Él sabe que te mueves de esa manera?"
Louis le mostró el dedo del medio y azotó la puerta del auto no sin antes escuchar la carcajada del mayor.