¿Nuevo comienzo?

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Corria por los pasillos de la secundaria tratando de no chocar con nadie, y de que no me  viera  ridícula corriendo con la mochila pero eso ya era algo inevitable.

Tenía que llegar temprano, era el  segundo día de clases y no quería llegar tarde. Me saque  los audífonos para empezar a enrrollarlos y guardarlos pero como tenía la suerte de mi lado se me cayeron.

—¡Coño! — maldije seguido de agacharme a recogerlos y levantarme demasiado rápido que no me di cuenta que había un chico enfrente mío y por mi torpeza choque con él.

— ¡Perdón! ¡Perdón! — me disculpe torpemente y siguiendo mi camino pero su voz me interrumpió.

— Se te olvidaron — su voz era suave y algo ronca.

Me gire para verlo, sostenía en su mano mis audífonos que por disculparme y tratar de irme lo mas antes posible debieron caerse.

— Oh... Gracias — le agradecí y empecé a sentir mis mejillas algo calientes, la vergüenza llegando a mi —. Perdón por chocar contigo.

— No hay problema — hizo un ademán restando importancia.

Me tome el tiempo de ojearlo un poco puedo deducir que es unos años mayor que yo... Tal vez unos dos, iba todo vestido de negro, su cabello era un maravilloso desorden, su cabello color negro ébano apuntaba a todas las direcciones, tenia los ojos de un color gris plomizo que eran adornados por unas espectaculares pestañas junto a unas cejas algo pobladas, sus labios no se quedaban atrás, el labio superior tenia forma de un corazón haciendo que se vieran carnosos y muy rojos.

Salí de mi trance cuando me di cuentas que lo miraba fijamente y él carraspeo la garganta.

— Bueno, de nuevo, lo siento mucho por mi torpeza. Me tengo que ir —dije finalmente dandome la vuelta.

Después de la escuela llegue a casa aventando la mochila contra la pared y soltando un suspiro. No tenia tarea así que me puse a leer Wattpad
En mi celular estaba leyendo "Boulevard" mientras escuchaba las canciones de una Banda muy buena llamada Green Day, soy muy sensible pero nunca algo me había hecho llorar tanto como lo hizo esa historia, mientras leía soltaba suspiros queriendo algún día encontrar un Luke Howland cuando de repente llego a mi mente el chico con el que había chocado no pensé en entablar conversación con el, prácticamente por que iba muy despistada pensé que no lo volvería a ver porque no parecía estudiar en la secundaria, no parecía de mi edad, ademas no llevaba uniforme.

Al día siguiente todo fue normal a las 4:00 de la tarde tenia planeado ir a mi clase de pintura ya que  unas semanas antes me había inscrito en esa clase cuando llegue busque un lugar y me senté esperando que llegara el profesor. Se estaba tardando así que fui a preguntarle a Annie, una chica que también estaba en esa clase, me caía bien pero por ese dia quería sentarme sola.

— ¿Sabes si va a llegar el profesor Manuel? — pregunté con algo de curiosidad.

Annie desvío la vista de el boceto que estaba haciendo y llevo la punta del lapiz a su labio inferior dando toquecitos con éste con una mueca pensativa.

— Uhmm, creó haber escuchado que hablaba con la maestra de dibujo diciéndole que se iba a ocupar y que si le  hacía el favor de darnos clase o aunque sea algo para hacer — respondió.

— Gracias —le sonreí regresando a mi silla, saque mi  cuaderno y empecé a hacer un paisaje como si fuera un bosque con muchos árboles.

— Vaya... No pensé que te volvería a ver nunca en mi vida — escuche esa voz suave y ronca a la vez como si arrastrará las palabras en un tono burlon.



Cartas Para mi Crush.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora