Cap. 2 Nunca rendirse es lo principal no importa cuantos hay

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En MEDIA se encuentra Lena (Emma Roberts)

....

-y te dijo que eres de su tipo!-se estremeció Lena al escuchar lo que paso hace unos días en el instituto -que asco me da ese tipo -dijo dándole un sorbo a su café

-lo mas extraño es de vino al instituto solo por mi anillo- analice fríamente mientras que movía mis dedos para jugar con su anillo

-mira se que estas muy preocupada por lo de Sebastián pero los de ese tal instituto vienen para arreglar todo-dijo mi mejor amiga tranquila aun tomando su café con crema, sentí la mirada de alguien y precisamente no mundano, muy disimuladamente mire a través de mi hombro para encontrarme a un chico gótico con cabello azul verdoso fosforescente que escuchaba con atención la conversación que establecía con Lena.

-Lena te voy a mostrar una cosa pero prométeme que no se lo dirás a nadie, mas bien simularas que nunca lo viste, si esto cayera en las manos equivocadas todos estaríamos muertos-dije de forma fría y sin emociones pero a la vez atrayente para nuestro querido espía de color llamativo de cabello -pero mejor te lo enseñó atrás del local no quiero levantar sospechas-conteste un poco mas decidida de lo que iba a hacer

-Qué es tan importante que me queres enseñar?- pregunto Lena levantándose de su asiento y colocándose un mechón rebelde atrás de su oreja

-vamos-la anime para que fuera detrás del local, tenía a la vista al muchacho o quiero decir demonio pero en lo que no contaba era que tenia amiguitos.

Cuando estábamos atrás del local otros muchachos nos rodearon.

-ahora escucha bien nefilim, nos das el anillo y tu amiguita mundana no morirá-explico este, Lena bufo y le pego una cachetada, este se iba a transformar pero un su amigo lo paro, el volvió a mirarnos a las dos.

-no le gusta que le digan mundana-respondí simplemente fría y con gracia

-danos el anillo y tu amiga mun…-Lena se había puesto frente mió preparada para pegarle otra cachetada, el otro se quedo mudo para que esta no le propinara el golpe

-así me gusta-mascullo esta- ahorra escuchen imbeciles, tienen una oportunidad, si se largan ahorra tendremos piedad contra ustedes –amenazo ella con estilo, si yo fuera uno de ellos ahorra estaría temblando de miedo, neh ,pero por un poco mas y le creo la amenaza-sino yo misma me encargare de cortarles a cada uno su hermoso cuello para luego mandarlos al infierno donde pertenecen y voy a hacer un portal para traerlos a la vida y de nuevo matarlos sin piedad, entendido!-grito lo ultimo, los demonios estuvieron callados unos minutos asta cuando el mas joven trato de atacar a Lena, ella se dio vuelta hacia mi y yo le extendí una daga, cuando el demonio se abalanzo sobre ella esta vino y usando uno de sus entrenamientos de la escuela de defensa personal mundana se dio la vuelta y lo decapito, empezó a expulsar chorros de icor manchando sus convers negras.

-quien es el siguiente!-grite yo para meterme a la ‘amigable’ conversación.

Y asi fue como comenzamos a luchar. Lena no era tan buena, era como cazadora de sombras principiante y yo la maestra pero el punto no es ese, estábamos solo dos contra unos treinta o treinta cinco, eran demonios con la piel escamosa, ojos saltones y una boca que parece un agujero negro pero lo peor eran sus tentáculos con dientes en las ventosas.

-que tipo de cosas son estas?-se pregunto Lena mientras que evadía los ataques de unos dos, yo tenia los demás.

-son demonios Raum, Lena-explique atravesando a uno con mi espada de serafín, uno quería atacar a Lena por la espalda pero yo la empuje haciendo que me rasguñara todo el hombro con sus ventosas con dientes, eso me lo dejo sangrando, lo mate acuchillándolo sin piedad, a este ritmo no conseguiríamos nada, Lena no tenia casi ningún rasguño por que yo siempre estaba allí para protegerla y al final yo recibía todo el daño. Lena estaba detrás de mi, la daga que tenia como arma se le había caído y yo estaba frente a ella como un escudo.

-van a morir-grito un demonio con la voz distorsionada

Saque del bolsillo de mi chaqueta rota un collar, el collar era simple una cadena plateada, tenia una pequeña piedra rojo tinto, la tire al piso y la machuque, de ella una niebla empezó a brotar paralizando a todos los los demonios.

-miren quien es el que va a morir-dije maquiavélicamente atravesando a todos los demonios con mi espada, al terminar con todos yo estaba cubierta de icor negro, tenia grandes rasguños en la cara, el hombro lo tenia descubierto y se miraba como la carne latía ferozmente mientras que goteaba sangre.

-Lena levántate-le di mi mano para que la tomara, ella la tomo y luego se limpio la sangre en su pantalón-veámonos antes de que aparezcan mas-me voltee sobre mis talones y cojee a la salida del callejón mientras que ella me seguía.

La acompañe a su apartamento para supervisar de que ninguna criatura la atacara, le di la daga que había recogido del piso.

-cuídate Lena-le di una sonrisa para que se tranquilizara

 -adiós Tessa-dijo para abrasarme con fuerza, yo gemí de dolor por que me toco el hombro descubierto-perdón- se disculpo mientras que me alejaba- ah, Tessa-me llamo antes de que me fuera, yo me di vuelta para verla- note metas en problemas-dijo, yo solté una carcajada

-por favor Lena, yo meterme en problemas-dije negando con la cabeza a lo que ella solo sonreía

Cazadores de Sombras: el secreto de los HerondaleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora