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Cansada del drama y la tensión, decidí que quizás sería una buena idea re-inscribirme en la escuela. Pase un año fuera, pero estudié en una escuela hermana así que no creó que eso sea causante de problemas.
Salí ya arreglada y desayunada de mi casa en dirección a la escuela, eran las nueve de la mañana y estaba lista para ser una nueva yo, ya no me sentariá en la mesa de la esquina sintiendome rechazada y sola, ahora me sentaría donde se me dierá la gana. Me arreglaría y haría que todos los estúpidos que jurán que soy una "niña perdida" se traguén sus palabras.
Antes de irme podia ser confundida fácilmente con una ñoña, siempre con trenzas y ropa que desecho mi hermana Caroline, mis lentes tampoco ayudaban a mi aspecto. En Francia me di cuenta que Damn It era un asco, por suerte lo note en el lugar y tiempo correcto, mejore mi aspecto, pero guarde mi escencia.
Salí del coche donde sonaba Latch, me encantaba Disclosure y esta canción era mi favorita, escogí mal momento para llegar, ya que era hora del recreo y todas las miradas iban dirigidas a mi, buscaba la mesa en la que solía sentarme. Estaba alguien sentado allí, nunca lo había visto, quizá luego le preguntaría a Austin, pero por ahora mi misión era ir a la oficina del Director Matthew.
Llegué a su oficina y Alicia estaba preparando un cafe.
-¡___! Es un gusto verte, creí que con todo lo sucedido, tal vez nunca volverías- Gritó dandome un abrazo demasiado fuerte. Alicia era una señora agradable, no más de 50 años, con el pelo entre güero cenizo y blanco. Chaparra y un poco rechoncha, con una sonrisa demasiado grande para su cara que siempre podía sacarte una sonrisa.
La abracé un poco más, después me indicó que pasará y que estaba muy orgullosa de mi por ser tan fuerte y aún así seguir interesada por continuar mis estudios. No quería que Austin me viera aquí en la escuela, será todo una sorpresa.
Austin Mahone, un chico completamente hermoso, sentimientos y físico, es espectacular y me trata como una reina, mi familia lo aceptaba, pero no se si es correcto estar con él en estos momentos, Caroline me necesita y yo a ella, no sería adecuado por el momento.
(Austin)
Mi siguiente clase era física y no tenia animos para calcular la velocidad de objetos que me interesan un bledo, así que como buen estudiante de mi preparatoria, hice lo que todos hacen cuando su único deseo es faltar a clases. Fingir una enfermedad. Se que es muy poco ético, pero también es muy poco ético, dos horas de física seguidas.
Llegué a la enfermeria, le conte sobre mis sintomas, leves dolor de cabeza y migraña desde los 12, listo con un permiso para faltar a las siguientes dos horas, salí y me sente donde __ y yo solíamos sentarnos el año pasado, allí habia un chico solo, se veía como de un metro con ochenta y cabello güero y cafe, estaba escribiendo algo en una libreta que tenia recortes de bandas de las que nunca había escuchado hablar.
-Hola, soy Austin Mahone ¿Como te llamas?- El chico de potentes ojos cafes, me fulminó con la mirada y escribio un poco más rápido y aplicando mayor fuerza, la hoja se rompió al mismo tiempo que la punta del lápiz -¿Eres nuevo?-
-Evan Peters, intercambio de Missouri- Contesto con la voz ronca, parecía agradable, quizá un poco raro, pero en este mundo de copias pirateadas, es increíble ver a alguien que esta dispuesto a seguir siendo la misma persona y no cambiar gracias a los comentarios de otras personas.
Lo acompañe por toda la escuela, dandole un pequeño tour, ya que era su primer día, era agradabale, le gustaba escribir historias sobre algunos manicomnios en los que trabajo su abuelo y su redacción en verdad era buena y en algún futuro él podría llegar a ser escritor.
-¿Sabes quién es ella?- Me preguntó refiriendose a una chica que se estaba subiendo a una pick-up negra, de reojo parecía ___, ya que a) tenia un carro así y b) era su viva imagen. Pero ¿Qué estaría haciendo ella aquí? Creo que si quisiera entrar a la escuela me hubiera contado. -Es linda-
-Si, lo es- Damn It ¿En verdad dije eso en voz alta? Era hermosa, pero no quería apresurar las cosas.
Evan se me quedó viendo raro, pero luego comenzó a reirse, se reía demasiado gracioso y al poco tiempo ya estabamos en su casa preparando palomitas para ver Chucky.
___ no me volvió a hablar en toda la tarde, le conté a Evan la historia de ___ evitando la parte de mi atracción hacía ella, de lo cual me arrepetí ya que el admitió que le gustaría conquistarla.
