Dicen que los dos últimos años de institutos son muy intensos, que tu vida da un giro de 180º, pero nunca imaginé que fuera a ocurrir así. O que terminaría de manera tan..., bueno, eso ya lo descubriréis.
Entrar al internado Sourthvil era el sueño...
Os estaréis preguntando que pasó el sábado en la fiesta. Bien! Os lo voy a contar.
El momento de besos con Nick, se quedó en eso, simples besos. No recuerdo muy bien cómo salí de la habitación o cómo acabé bailando con Alex al final de la noche, pero así pasó. Hay momentos de la noche que los tengo borrosos, pero lo que sí recuerdo a la perfección es la primera parte de la noche y la primera puerta subiendo por los escalones de las escaleras de los Anderson. ¡Siempre tiene que pasar algo en esa casa!
La semana ha pasado bastante rápido, sin darme cuenta ya estamos a viernes. Son los 5.30am y por primera vez en toda mi existencia voy a llegar pronto a clase. Me ducho, cepillo mis dientes y mi cabello - con cepillos distintos, solo lo digo para que conste - y ya me visto con mi uniforme, aunque hace unos días algunas chicas y yo decimos hacernos un cambio de look, es decir, recortar un poco la falda, y maquear un poco la chaqueta y demás. El mio quedó algo así :
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Aunque hay que decir que cambio un poco mi outfit según el día. No siempre llevo esta falda o esa camisa, y por supuesto cambio los colores del uniforme un poco a mi antojo, si un día estoy feliz la falda de color rosa y si estoy inspirada, verde...
OK no.
Lo de los colores ha sido una mentirijilla, pero si es cierto que tengo un par de faldas de distintos colores. Puede que os preguntéis: ¿Eso esta permitido? Pues sí, puedo llevar la falda de un color distinto al gris, pero sin pasarte mucho, no sé si me entendéis. Bueno, no importa ya lo veréis otro día.
(...)
Estoy en la última clase del día, tengo examen de álgebra avanzada, porque mis padres insistieron demasiado en que necesitaba estar en una clase superior y no se que historias más.
Mi mente no termina de procesar todos los cálculos que hay en la hoja, y no consigo concentrarme.
¿Cuánto es X+Y×12÷(-6)?
¡¡¡Ayuda!!!
Aún me queda la mitad de la clase para terminar de hacer cuatro ejercicios de los cuales tres son problemas. El mayor suplicio de todos, lo sé.
¡Uy! Éste problema es facilísimo.
¡Y listo! Solo me queda uno, va Nora, tú puedes.
- Cinco minutos - nos avisa el profesor.
- ¡Terminé! - grité sin darme cuenta en voz alta, todo el mundo dejó su examen a un lado y me miró con gracia, algunos se reían incluso.
