Suggar Babby +18

20. Epifania

Narra Marco:

Exactamente un día después de que David reportara a Andres con el director y después con la policía de vender drogas a estudiantes de universidad,
salio en una cita con un chico, mas bien un hombre, es un maestro de universidad, que tiene dinero y David quedo encantado.

Siempre es horrible cuando tus amigos te hacen a un lado para salir con parejas románticas,
aun que para ser juntos yo le cancele algunas veces a David por salir con mi novia, ex -novia, mas bien.
En fin, el tipo con el que David esta saliendo tiene dinero, trabaja en una de las universidades mas caras del país y se lo lleva a comer a la zona alta de California (donde por cierto, esta su hotel).

El me pido que lo fuera a dejar a este lugar para verse con el, y aun que no me agrade mucho (principalmente por que no deja de hablar de el) lo lleve a verlo.

Después regrese a la universidad.

Cuando baje de mi auto al estacionamiento apenas alumbrado por unas cuantas titilantes de el estacionamiento.
Todo estaba tan tranquilo cuando apague el motor del auto.
Se veian solo algunas luces encendidas de los dormitorios.
incluso podías oír a los grillos si ponías atención, no estoy exagerando.

Tome de mi bolsillo un paquete de Pall-Malls de me menta y un encendedor que al encenderlo casi hizo eco en el estacionamiento.
Algo tenia que perturbar toda esta calma.
A lo lejos se escuchaba el sonido de motores de motocicletas que se iban acercándose seguido de gritos como si quisieran despertar a toda la universidad. gritos como de celebración.
Era muy incomodo. Entonces llegan y se estacionan justo al lado de mi auto pero en la calle.
El mio ya estaba en el estacionamiento de la escuela. Se vería muy cobarde si simplemente entro a mi cuarto como si no los hubiera visto así que hice como si ni siquiera hubiera notado su parecencia y seguí fumando.

Eran dos motocicletas rojas, en una iban Javier y el otro amigo de Andres y en la otra iba Andrés, fumando marihuana mientras conducía.

Yo salia de fiesta con ellos aveces, bueno, al menos con Andres, pero nunca lo considere mi amigo, siempre hacia que nos metiéramos en problemas para después echarme la culpa de todo o desaparecer.

—Que tranquila esta la noche, ¿No, amigo? — comento Andrés —.

—Si, estaba.

—¡Hey, tranquilo! —Dijo bajándose de la motocicleta — No te pongas así, solo pasamos a saludar—.

El se acerco a mi, poniendo su brazo al rededor de mi como si me estuviera abrazando.
Que asco.

—Los amigos no se traicionan. Marco. y eso que tu hiciste ayer...
eso que tu y ese marica que también me estrello la cabeza con la litera hicieron ayer fue traición — Dijo Andrés muy cerca de mi cara, su aliento olía muy mal —.

Javier y el otro tipo solo observaban con una expresión de burla.

—Sabes, en la divina comedia... el circulo del infierno mas bajo, el mas alejado de dios, donde se encuentra satanas... es precisamente del de la traición en donde el diablo mastica y masticará por siempre a judas — Decía cosas que no me interesaban el lo absoluto.

—Nunca leí ese libro — dije—.

—Yo tampoco —dijo — pero es un hecho conocido, es fácil sentirse identificado ¿No?, pero siempre puedes reivindicarte... me quede expectante a ver a que se refería.

—Ayúdame a jugarle una broma a tu novio — Dijo refiriéndose a David—.

—No me interesan tu juegos Andrés, déjalo en paz, el estaba asustado de lo que le podrías hacer —.