Decisiones.

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—¿Puedes dejar de seguirme? - Irritada encaró la ojiverde al hombre de traje negro.

—Lo lamento, señora - El hombre mayor negó con la cabeza —Tengo las ordenes claras de ser su guardaespaldas - Lauren reviró los ojos.

Aquello era un problema, habían sido los peores días de su estancia en el castillo pues Camila había hecho cómo si no existiera, ella sólo entraba a su habitación para asegurarse que siguiera ahí y eso no era lo peor, ella junto a su hermana se lo habían pasado en paseos conociendo el territorio y a ella le había tocado quedarse con los celos consumiendo su alma, tampoco ayudaba el hecho de que la princesa había puesto seguridad en Lauren luego de haberle hecho saber que su deseo por regresar a su país no había cambiado, ahora tenía a ese hombre siguiéndola hasta en el sanitario.

—He sido tolerante contigo porque no es culpa tuya y sólo haces tu trabajo pero enserio, necesitas dejarme respirar un momento - El hombre ni siquiera parpadeó —¿Puedo saber tu nombre al menos?

—Bruce, señora.

—No me digas señora, soy Lauren y me importa una mierda lo que haya dicho Camila perdón, su alteza Cabello - Ironizó lo cuál hizo sonreír a Bruce por un segundo. Tantos años en la familia y nunca había conocido a una mujer tan... directa.

—¿Señorita Lauren está bien?

—Está bien, señor Bruce.

El mencionado estudió el rostro completo de Lauren, era cierto que era totalmente igual a su hermana gemela pero había algo diferente en la ojiverde; ella notó la mirada intensa de Bruce y se puso nerviosa, Lauren sólo quería llevarse bien con el hombre pues ya habían pasado tiempo juntos y pasarían mucho tiempo más, era mejor que se hiciera a la idea.

Bruce era un hombre mayor, su cabello gris hacían resaltar sus ojos azules, sus arrugas eran pronunciadas en su frente y su bigote era gracioso, hacía ya un par de meses que Lauren no sonreía naturalmente aquello la hizo traer de vuelta a la realidad.

—Quiero ir al hospital, ¿Me llevarás tú? - Asintió para después darle paso primero. —Entonces... conoces a la familia Cabello desde hace tiempo... - Quiso averiguar una vez que estuvieron camino al hospital. Tal vez Bruce podría tener información que ni siquiera Camila tenía.

—Toda mi vida, señorita Lauren.

—¿Tienes familia? ¿Esposa? ¿Hijos?

—Usted pregunta mucho y no, no tengo familia - Lauren hizo una mueca al escuchar aquello, era amante de la soledad pero no era como si quisiera pasar el resto de su vida estando sola, en algún momento de su vida quería encontrar a un hombre o una mujer con la cuál compartir sus días aunque, aquello por el momento estaba fuera del plano —¿A qué viene al hospital?

—Tú también preguntas mucho, Bruce - Se burló —Visito a alguien - Respondió con profunda tristeza dejando a Bruce confundido, no sabía que la señora Jauregui conociera a alguien además de la familia.

Las probabilidades por que Bethia despertara eran cada vez menos, los médicos día con día le recordaban que su sistema se debilitaba con rapidez, dejándolo en claro que se preparara para la peor de las consecuencias, aquello le hacía recordar que tenía el tiempo encima, que tenía que apresurar sus pasos si quería alejarse de Camila. Lauren no quería pasar más tiempo en el mundo de Camila Cabello, para la morena sólo era un capricho y ya no estaba dispuesta a seguir a su lado, ya no iba a permitir que la siguiera usando. Por muy ridículo que sonara ella aún tenía un poco de dignidad y estaba decidida a recuperar la que había perdido, por su bien, por el bien de su bebé.

KITTENSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora