Está Bien Así

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Distintos cojines se dispersaban sobre la alfombra, el rojo y azul sobresalía en la habitación. Cada rincón repleto de tenues luces Púrpura dándole la iluminación apropiada al ambiente.

—¿Es suficiente? — juguetón sacó del armario el tierno peluche de labios gruesos, acompañado del conejito de expresión altanera.

—Tae, si sacas más, probablemente termine enterrado entre tantos peluches

—Tengo muchos más, esto no es ni la mitad Kook — los dejó de lado, para tomar la bandeja repleta de snaks, bebidas y algunos dulces más.

—Tan tierno~ — directo, tomó la bandeja de sus manos, un corto beso en sus labios asombró al otro pero sonrió fascinado.

—¿Qué película quieres ver? — el castaño se acurrucó a su lado, el control entre sus manos cambiando de título a otro.

—No estoy seguro, pero me gustaría una comedia romántica ¿Te parece?

—¿Insinuas? — tomó unas cuentas palomitas, una en su boca y otra en la boca del pelinegro gustoso por el salado sabor, pero asintiendo con un gesto feliz. —Marchando

Presiono los botones con rapidez el nombre de la película, tantas veces la habían visto que no le era difícil recordar los diálogos en cada escena. Apreciaba con gran magnitud este sencillo momento, le gustaba ver como sus mejillas se veían rellenas por las frituras de maíz ó su reacción al sentir el gas del refresco burbujear sobre sus papilas gustativas.

La pantalla ayudaba a la tarea para disfrutar de cada expresión. Jennifer Aniston parloteaba con sorpresa cada vez que su gran jefe criticaba su sentido de la moda. Se perdió una que otra de sus escenas preferidas porque simplemente el hombre a su lado era más brillante que todo el elenco de aquella filmación.

—Taeee — Sus ojitos dejaron de ver a la niña con un extraño acento fingido, para abultar sus labios en un puchero.

—¿Si? — Sus labios formaron una cálida sonrisa.

—Quiero gomitas — De cualquier lado por donde lo vieran, resultaba irónico que el mismo chico que hacía gritar a miles de mujeres con una simple sonrisa, tomará una actitud más infantil para ser consentido.

Pero ¿Quién iba a negarse?

Taehyung jamás en la vida podría lidiar con la cara mimada de Jungkook.

—Dame un segundo ¿Si? — Su tierna dentadura mostró una amplia sonrisa complacido, jugando con una almohada que mantenía sobre sus piernas en mariposa.

No tardó nada cuando regresó con una colorida envoltura rellena de animalitos de gomita con sabor a frutas, ofreciéndole al azabache algunos como un niño.

—¿Por qué estás tan cariñoso? — Taehyung hizo su espacio entre los cojines, tomando su mano hasta entrelazar sus dedos.

—Me gusta esto — beso el lindo lunar en la punta de su nariz. —El tiempo jamás es justo cuando estoy contigo

—¿Tanto así me extrañaste?

—Sólo podíamos dormir juntos, quiero recuperar tiempo contigo ¿No quieres? — su voz bajo de tono algo tímido.

—Sabes que no hay nada mejor que estar contigo, está bien así — se acercó lentamente, el aliento dulce mezclándose para besar los lindos labios rosados.

—Tae... — Suspiró, paseando sus manos sobre sus hombros. —Otra vez no vamos a terminar de ver la película — se calló, besando de nuevo los carnosos labios. —¡Ya! — Se empezó a reír por cada toque en su abdomen.

—Ya sabemos que la oveja no se muere, anda Kook dame un besito~

—¡Quiero ver cuando el juguete sale volando! — Grito al sentir las manos frías correteando sobre su abdomen, leves cosquillas haciéndole estremecer. —¡Ya lo escupió!

—ew, eso es demasiado grande para que siga viva, dime ¿Qué tan grande es la garganta de la oveja? — Alejó sus manos.

—Tae ¿En serio? — levantó la ceja, su voz llena de sarcasmo. — Yo sigo vivo ¿No te preguntas cómo? —El rojo pinto hasta las orejas del mayor.

—¡Jungkook! — golpeó el pecho sin fuerza. —Ahora no es el momento

—¿No? — se acercó, sus labios de lado provocativo. —Quizá si, tienes razón y ya vimos muchas veces esta película

—Ah, no se qué haré contigo — se acercó, sus manos como reflejo a posarse sobre su cintura.

—Tae~ — frotó su nariz con la contraria. —Tengo frío —Abrazó su cuello con ternura.

—Tus cambios van a volverme loco — tomó el control entre sus manos, cambiando el programa a su lista de reproducción.

Era suave, era como una capa que los cubría, no existía nada fuera de su cobertura, sólo ellos. El sonido que hacían los instrumentos era confortable para ambos cuerpos que recorrían el ajeno ansiosos por el candente tacto.

Un toque tan simple, un toque tan corto, un toque tan minúsculo, pero sentía como su corazón temblaba de emoción.

Y estaba bien, estaba bien así.

Estaba bien si ambos amaban estar juntos.

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Digamos que lo arruine (?)

Publique antes el capítulo sin terminarlo y ah, bueno.

Quiero decir que quizá esto no sean capítulos tan largooos.

Aunque si me gustaría hacerlos, ah.

Bueno, dejó esto y me voy. UuU

Only With You. [Th+Jk] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora