Llegada a casa

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*Narra Adriana

Despues de hablar con Evan, y acordar que el me alcanzaria despues de arreglar algunos asuntos en su oficina, aborde el avion mas tranquila y de mejor animo, por lo menos no veria la lastima en las caras de las mujeres de la familia, cuando vieran a Evan a varias se les irian los ojos, la verdad era un hombre de lo mas guapo, con esa sonrisa baja bragas que solo el poseia, y ahora que lo pude ver estaba mas seguro y mas varonil si eso se podia, ya quisiera ver la cara de todos al verme llegar no niego que siento muchisimos nervios, de solo pensar en ver a Patrick se que el se sorprendera al verme y yo me encargare de que a el se le caiga la baba por mi, pero solo para demostrale lo que perdio al engañarme y despues cuando vea llegar a " mi prometido ", estos dos dias me encargare de provocarlo, si tal vez sea mala o me este haciendo iluciones y el ya este casado o con novia, pero no importa esto es para sanar mi orgullo herido y demostrarme que lo puedo volver loco, y que se arrastre por un poco de mi atencion, como lo hacia yo antes con el, con ese pensamiento me dormi un rato despues de todo el viaje era largo, despues de horas de viaje por fin llegamos al aeropuerto, mi padre estaria esperandome por lo que me dedique a buscarlo hasta que por fin lo vi, tenia casi un año que no lo miraba me abraze muy fuerte a el, aunque en realidad no llevaba su sangre el para mi siempre ha sido mi padre, y yo para el su hija incluso podria juarar que me quiere mas que mi misma madre, el jamas hizo difrencia entre Becka y yo, a las dos nos concentia por igual, el se caso con mi madre cuando yo tenia a penas cinco añitos y desde la primera vez que nos vimos tuvimos una conexion, y desde entonces el siempre ha sido mi persona favorita, lo amo tanto que estoy orgullosa de llevar su apellido.

-Hola princesita, que tal tu viaje y tu acompañante-me pregunto el mirando hacia atras buscando.

-Hola papa, el viaje estuvo bien y Evan no pudo venir tenia que arreglar algunas cosas en su empresa-le dije.

-Evan, a si se llama el acompañante misterioso-yo rode los ojos por su exprecion y le sonrei, solo asenti el me rodeo los hombros con una mano y con la otra tomo una maleta y yo llevaba la otra, salimos, subimos a su auto mis manos sudaban al ver nuevamente las calles, cada vez estabamos mas cerca de casa no escuchaba a mi padre mi vista estaba perdida en los recuerdos y en todo lo que sufri, a donde quiera que miraba, miraba un recuerdo de mi, yo gorda detras de Patrick como un perrito faldero, no pude evitar derramar una lagrima, mi padre al percatarse estaciono el auto en la orilla y tomo mi cara, limpio la lagrima con sus dedos me dio un beso en la frente y me jalo hacia el lo abraze.

-Mi princesa, no me gusta verte asi que pasa.

-Nada papa, solo que aun me duele el volver despues de tantos años-le dije solo a el le permitiria ver cuanto me afectaba el estar aqui nuevamente, necesitaba esto por que en casa no me lo puedo permitir, el me mantuvo haci un rato mas pero no podiamos seguir mucho tiempo, era muy tarde y un auto podria golpearnos cuando llegamos a la casa, Joseph el encargado de la casa bajo mis maletas, lo salude efusivamente el siempre me trato muy bien, el me miro un poco apenado.

-Srita Adriana, esta usted muy cambiada.

-Gracias Joseph-le dije guiñandole un ojo, mi padre me llevo dentro de la casa hasta la sala, al verme todos se asombraron yo me pare derecha, aunque mis piernas me temblaban, ahi estaban mi hermana, su prometido, mi madre y Patrick quien no apartaba la mirada de mi, la primera en reaccionar fue mi madre.

-Adriana, estas muy cambiada cariño-me dijo mirandome de arriba a abajo, llevaba un vestido negro que me llegaba arriba de las rodillas y unos tacones que destacaban mis piernas, el vestido se amarraba del cuello por lo que dejaba mis hombros al descubierto.

-Gracias madre, tu tambien te ves muy bien-le dije dandole un beso en cada mejilla, mi hermana me abrazo, seguida despues de John, el siempre me trato muy bien, era tan diferente de su primo, asi por que el y Patrick eran primos, de hecho se crearon juntos debido a que Patrick quedo huerfano a muy temprana edad, y los padres de John se hicieron cargo de el, Patrick se acerco a mi pero le extendi la mano para saludarlo, el me miro sorprendido sonrio y me la tomo despues deposito un beso en ella.

-Y tu acompañante donde esta-pregunto mi madre.

-Evan no pudo venir conmigo, llegara dentro de unos dias-le dije restandole importancia.

-Y se puede saber quien es el en tu vida-pregunto Patrick, en su voz pude notar la molestia.

-El es mi prometido-les dije, todos pusieron cara de sorpresa antes mis palabras.

-Tu prometido, y se puede saber donde esta tu anillo-pregunto mi madre, diablos el maldito anillo no lo pense y ahora que hago.

-Evan lo mando a reparar, lo que pasa es que se le cayo un diamante, el fin de semana que fuimos a escalar-les dije no supe de donde salio la mentira, pero hasta yo misma me la crei, Patrick torcio la boca disgustado, y los demas me felicitaron.

-Bueno pasemos al comedor, preparamos tu cena preferida-dijo mi madre, desde cuando era atenta conmigo-y como es Evan es guapo-claro no podia faltar la pregunta, mi madre pensaba que solo alguien  feo o pobre se podria fijar en mi, pero no les daria el gusto de revelarles nada.

-Ya lo juzgaras por ti misma, en cuanto lo veas madre-le dije la cena estuvo deliciosa, todos hablaban de la boda de Becka y John, seria el evento del año segun las palabras de mi madre, yo solo sonrieia y asentia podia sentir como Patrick me comia con la vista-bueno yo me retiro estoy muy cansada y quiero descansar, ademas tengo que llamar a casa para avisar que llegue bien.

-Que tu novio es sobreprotector-pregunto Patrick, en un tono burlon.

-No te imaginas cuanto-le dije, le sonrei y subi las escaleras con rumbo a mi habitacion, mis maletas estaban en la cama las abri y saque la ropa, la acomode en el closet solo deje mi pijama me sente en la cama y observe esa habitacion, que tantos recuerdos me traia seguia igual a la ultima vez que estuve aqui, en esta cama en la que estuve apunto de entregarme a Patrick, no pude evitar derramar una lagrima al recordar, tome mi bolsa y saque mi telefono aun no lo encendia, lo hice y llegaron varios mensajes entre ellos dos de Evan.

"Mi vuelo sale mañana en la noche, asi que estare ahi el miercoles a primera hora que te parece"

" Ya llegaste, que tal tu vuelo espero que me llames o me mandes un mensaje, para saber si llegaste bien"

Ahi estaba preocupado por mi, que lindo asi que no lo pense y le marque.

-Bueno, Adriana como estas, llegaste bien-pregunto el ansioso.

-Si, Evan gracias llegue muy bien, acabo de leer tus mensajes y me parece perfecto que llegues tan pronto, no sabes lo feliz que me hace el que estes pronto aqui-le dije y realmente asi era, no creia aguantar tantos dias, si solo con estas horas con mi familia termine agotada, no quiero pensar lo que va ser con todos los demas invitados aqui.

-Te pasa algo te escucho triste.

-No, no me pasa nada solo que realmente no me siento en casa, y extraño a Fredy y a Emma sabes-le dije, y aunque era cierto tambien estaba mal por estar aqui despues de un momento mas colgamos, por que el estaba en una reunion al colgarle le marque a Fredy necesitaba desahogarme.

-Hola, muñeca como estas-contesto un feliz Fredy.

-Mal, muy mal Fredy-le dije con mi voz a punto de quebrarseme.

-Tranquila, a ver cuantame todo desde el principio-me dijo.

-No se Fredy, no me siento agusto aqui, me siento una extraña ademas el esta aqui, en el avion pensaba seducirlo y hacer que rogara por que yo lo mirara o pasara tiempo con el, como antes lo hacia yo con el, pero al verlo no se lo que me pasa me siento sola, desprotegida ante ellos y sera peor cuando llegen mis tias y las amigas de mi madre, me vuelvo a sentir como antes.

-Tranquila nena, solo seran unos dias ademas tengo entendido que Evan te alcanzara en unos dias.

-Si, me dijo que llega el miercoles, bueno te dejo me voy a bañar, te llamo mañana te quiero.

-Y yo a ti muñeca-me dijo y colgue, me levante fui al baño a darme una ducha, una vez bañada y con mi pijama puesto me acoste en mi cama, y me abandone en los brazos de morfeo.

Heridas de AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora