Cuando sale la Luna

Hablando con la muerte

— A que viene usted señor, dígame qué se le ofrece,
— Soy la muerte que visita, vengo a llevarlo donde pertenece,
— ¿A dónde pertenezco?, Se equivoca, mi lugar es entre vivos,
— En eso tú te equivocas, te lo digo yo mi amigo,
— ¿Y porqué yo me equivoco? Por favor de explicaciones,
— Dejeme pues hoy le digo, tengo una lista de razones,
— ¿Una lista?, Imposible, si mi vida no ha sido larga,
— En 30 años ha hecho mucho y ha creado mucha carga,
— Señor muerte, no le entiendo, que me quiere usted decir,
— Que usted a perdido el sentido y las razones de vivir,
— ¿Y porqué me dice eso sí claramente yo aún las tengo?,
— Vivir en función del dinero no es motivo, te lo cuento,
— Cada vez que usted me habla menos le estoy comprendiendo,
— Es que usted vendió sus sueños e ilusiones y no entiendo,
Cómo es que alguien como usted que tenía la felicidad seguro,
Se lo trago la codicia obnubilandole el futuro,
— Señor está usted acusando de algo que no entiende,
— Claro que yo lo comprendo, le recuerdo, soy la muerte,
Y ya he tratado con tantos, demasiados como usted,
Que no cabe duda alguna de cómo debo proceder,
— ¿No me puede señor muerte dar otra oportunidad?,
— Yo lo siento hijo mío, vida solo una hay,
— Y después de que expire en mí la última chispa, ¿Que vendrá?,
— Esa chispa dará vida a quien la sepa aprovechar,
— Está bien mi buen amigo, el destino he de enfrentar,
— Ven entonces compañero, hora es de descansar