¿Contigo para siempre?

69 7 0
                                    

Capitulo 17

Katiana.
Katiana.
Pensaba Chloe, todo el tiempo. Su novia parecía estar muy bien, bailaba estupendamente, cocinaba, limpiaba el apartamento no paraba, su atención a todas las cosas estaba perfecto. Exepto a Chloe, eran como amigas y no como una pareja. Más por parte de Katiana, Chloe la besaba, y no sentía nada, eran besos vacíos. Katiana no quería hacer el amor, no le provocaba desde el secuestro, algo que Chloe entendía. A Chloe se le fue apagando la llama de su pasión hacia ella, tal era la frialdad de la relación, ya no parecía la igual de antes. Entre ellas dos, lo necesario, con el mundo, igual.

Chloe sentía que se ahogaba por dentro, se confundió mucho, con todas esas semanas ayudando a Katiana con su recuperación, el psiquiatra,la policía, los investigadores, y su relación, quedó atrás muy atrás. Ellas en compañía, como un conjunto de cosas muertas. Después de cada terapia Katiana no era la misma. Sus conversaciones cortas, Chloe con ganas de más y Katiana con ganas de menos, pocas palabras.

Silencio.

Chloe una noche decidió hablar.

Katiana estaba en la terraza del apartamento viendo los autos esperando su turno al semáforo.

-Katiana...-dijo Chloe con sutileza y tono de atención.

Ella volteó y se vieron fijamente a los ojos. Chloe se acercó y le tomó la mano, que estaba muy fría.

Sin decir palabra seguian viéndose fijamente, sus respiraciones se hicieron fuertes, haciéndose notar en el silencio.

-Sabes bien, de lo que quiero hablar contigo-dijo Chloe asegurándose de la total atención de Katiana después de un tiempo, su intimidad era escasa.

-Si, ya es momento de responderte- respondió Katiana con tono de disculpa.

- Te extraño, a mi novia, la extraño, la que me enamoró, que me pidió estar con ella, recuerdas?- soltó Chloe sus palabras con una pizca de dolor.

-Lo lamento, yo misma ya no sé qué sentir. Algo me está rondando mucho en la cabeza, y me consume por dentro.
Pensé que estaba bien contigo y recordé, sentí la misma sensación de todo ese momento, y aún lo siento. Pensé que moriría, que no volvería a verte, y peor aún, que no tendría una familia. Yo quiero una familia Chloe. Quiero casarme contigo. Pero no me mereces, no soy lo que tu conociste antes- se desahogo Katiana soltando lágrimas silenciosas.

Chloe no pensaba.

-Quien eras antes, eres y serás siempre, y si ahora eres diferente, aún así te amo, y te amaré, deja que te amé, déjame preguntar ahora. ¿Quieres todavía casarte conmigo? -pregunto Chloe con mucho sentimiento.

Katiana tuvo regocijo, su corazón es de Chloe, y lo reconoce. Abriéndole una vez más a su novia los brazos, se abrazaron. Y nuevamente en el silencio acompañado ahora de lágrimas se consumió en una respuesta.

-Si quiero, yo te amo, no me dejes, que me muero, perdóname. Eres demasiado, que creí ser poco, pero para ti soy mucho, mi corazón lo vuelve a sentir. No imagino a otra persona como madre de mis hijos.-respondió Katiana sollozando.

La esperanza y el amor volvió a surgir en ellas.

Conformar una familia requiere mucho amor y sacrificio. Entrega mutua. Chloe le demostró a Katiana lo valiosa que es para ella, nunca le quitó espacio, tiempo. Respeto absoluto.

Katiana reflexionó, y perdonó a Pablo, que estaba muerto, para dejar atrás lo que la dejó marcada, para así continuar su felicidad con el amor de su vida.

Katiana y Chloe iban juntas a la academia. Después de la recuperación de Katiana, y la buena reconciliación de ellas, tuvieron mucho éxitos en Nueva York.

Una tarde en la que Chloe iba comprar los alimentos a Walmart. Katiana se escapó a una Joyería muy importante.

Luego ellas dos quedaron en verse en un restaurante con sus amigos para cenar. Llegaron todos tarde, los últimos fueron Paul y Florian. Ya que la Dra Caroline y Christine decidieron invitar la cena llegaron de primeras.

-Sin mentir, yo duro 30 minutos arreglándome.-confesó Chloe y todos rieron.

-Querida pero mantener éste cabello así, son una hora de peinado, secado, laca. Florian, simplemente sale del baño peinado, no sé qué brujería es esa. - aclaró Paul y todos rieron nuevamente.

-Bueno bueno ya Jajaja. Paul eres un marica a todo dar todos te conocemos-volvieron a reír- Pero en serio, estoy feliz por compartir está noche con ustedes.- Agregó Christine con mucha carisma.

-Gracias Christine, gracias a todos por venir. ¿Ordenamos la cena?- dijo Chloe con una sonrisa.

Todos ordenaron, comieron y rieron.

- Está comida está buenísima- Agregó Caroline.

-Sin duda, al igual que la champán que acabó de ordenar-dijo Katiana con picardía.

-¿Queeeeé?- dijeron todos.

El camarero se acercó y sirvió a todos la champán.

- Les pido a todos que no beban en seguida.- dijo Christine.

-¿Por qué?- preguntó Paul confundido.

Hubo un silencio

-Chloe... está noche he reunido a nuestros amigos más cercanos para que sean testigos.- dijo Katiana y Chloe no entendía nada.

-Pero testigos de que?- preguntó Chloe sonriendo.

Katiana sacó una pequeña cajita y una rosa de su cartera.

- Chloe Sanders, amor de mi vida, mujer incondicional, que estás conmigo en la felicidad y tristeza. Amor puro hecha mujer. ¿Quieres casarte conmigo?-preguntó Katiana con emoción y ojos brillantes.

Chloe sintió tanta emoción que en palideció.

- ¿Contigo para siempre? ¡SI! Por supuesto que sí! - respondió Chloe y la abrazo y todos aplaudieron y más.

Brindaron, las felicitaron. Ambas lloraban. Se abrazan y se decían al oído lo mucho que se querían, se disculpanban y perdonaban. Euforia en sus miradas.

- Hay que organizar esta hermosa bodaaaa! - dijo Caroline y Paul asintió.

-Por favor, es una boda sería, Christine, necesito que controles a tus esposas Paul y Caroline.-dijo Chloe chistosamente pensando en una boda demasiado Gay.

Estaban emocionados, y las novias no dejaban de verse. Katiana se sentía como nueva y Chloe aún más enamorada por el gran gesto de la bailarina al pedir su mano.

Al irse del restaurante Florian invitó a todos a ver la vista de un lago que estaba cerca. A todos les gustó la idea, ya que no hacía tanto frío y la ocasión para seguir celebrando resumía la noche perfectamente.

El lugar estaba iluminado, y cuidado por unos parqueros, unas cuantas personas cambiando a orillas del lago. Chloe y Katiana tomadas de la mano, con sus corazones conectados a través de sus miradas como imanes atraídas por el amor.

-Estoy muy feliz, me haces feliz- le dijo Katiana a Chloe abrazándola.

-Te amo- dijo Chloe y le dió un beso cálido a Katiana.

Abrazadas contemplado las estrellas, le surgió un pensamiento a Chloe.

-Quiero casarme en Venezuela- dice la pianista suspirando.

-Me leíste el pensamiento- respondió Katiana sonriendo.

Todo estará bien.

Baile Rosa II Corazón de Espinas(LGBT+)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora